Esteban Geijo en una foto tomada recientemente

Esteban Geijo en una foto tomada recientemente

Valladolid

Fallece Esteban Geijo, empresario de Tudela de Duero vinculado al mundo del toro

Se recorrió buena parte de Castilla y León con sus mulillas y sus caballos de picar, y ahora es su hijo Carlos quien sigue la tradición. Tenía 86 años.

30 noviembre, 2022 12:10

De profesión tratante, mientras que su esposa se dedicaba a la carnicería que tenían en Tudela. Esteban Geijo era un hombre de los del campo de toda la vida, ya que su familia procedía de la labranza y siempre tuvieron caballerías en la casa. Aunque luego derivó en el trato, en el negocio de la carne, en las mulillas para el arrastre de los toros y en los caballos de picadores.

“A raíz de casarme yo -nos dice su hijo Carlos- fue cuando iniciamos el negocio de las mulillas y posteriormente con los caballos de picar, hace 27 o 28 años. Todo empezó por la afición de mi padre a los toros y a la propuesta que nos hizo Roberto Aguado, el empresario de Tudela de Duero”.

Trabajaron en todas las plazas de Castilla y León con las mulillas y los caballos de picar, excepto en Soria, hasta que llegó la crisis del 2008 y decidieron seguir solo con las mulillas, dejando a un lado los caballos.

Esteban Geijo junto al torero Rivera Ordóñez y miembros de la cuadrilla de mulilleros (foto cedida)

Esteban Geijo junto al torero Rivera Ordóñez y miembros de la cuadrilla de mulilleros (foto cedida)

“La primera plaza que pisamos con nuestras mulillas fue a través de Aguado en Ledesma -nos dice Carlos-. Entonces había muchísimo trabajo, recuerdo un 8 de septiembre que hicimos once pueblos el mismo día. Teníamos 12 mulas y tuvimos que pedir algunas prestadas para cumplir los compromisos. Luego, en el 2008, nos pilló la crisis y dejamos los caballos de picar”.

Carlos Geijo sigue al frente del negocio de las mulillas, la última vez que nos saludamos fue en la novillada de Mojados, y ya nos comentó que su padre estaba muy malito. Anoche nos avisaba del fallecimiento de Esteban Geijo el que fuera novillero Adrián Gómez, y nos pareció oportuno hacerle este obituario.

Las mulillas y la labranza

Las mulas trajeron otro negocio paralelo como es el de las labranzas a la antigua usanza en viñedos y bancales de espárragos en su pueblo natal. Fundamentalmente, Carlos trabaja con sus mulas en terrenos de cultivos ecológicos. Recientemente veíamos un reportaje sobre ello en La 7 de Cyltv, y lo cierto es que Carlos se maneja a la perfección con sus mulas y sus arados de toda la vida.

Vaya nuestro recuerdo para el bueno de Esteban Geijo, el único mulillero que ha tenido Valladolid en los últimos 30 años. D.R.P.