La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha viajado hoy a la República Eslovaca con el fin de impulsar nuevas inversiones en España vinculadas a la fabricación de baterías destinadas la movilidad eléctrica y conectada.
En su visita a Eslovaquia ha estado acompañada por el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, así como por la embajadora en este país, Lorea Arribalzadga, y por Francisco Blanco, secretario general de Industria y Pyme, y se han reunido con el CEO de Inobat, Marian Bocek, y con el presidente de la compañía, Andy Palmer. Precisamente Valladolid es firme candidata a albergar la nueva fabrica de baterías para Europa de Inobat, y aunque ya se han firmado protocolos previos a su instalación, lo cierto es que también Gran Bretaña aspira a llevarse la factoría de la firma, especializada en investigación, desarrollo, fabricación y reciclaje de baterías. El viaje ha incluido una visita a las instalaciones que Inobat tiene en la ciudad eslovaca de Voderady. Precisamente, Eslovaquia es en la actualidad uno de los centros europeos más importantes de fabricación de automóviles, con 200.000 trabajadores en el sector para marcas como KIA, Volkswagen, Volvo y Land Rover.
“Con esta visita queremos reforzar el compromiso del Gobierno con el proyecto de Inobat, para que España, y, en concreto, Valladolid, sea elegido para su nueva fábrica”, ha declarado la ministra, quien considera que Valladolid tiene un “capital humano excelente”, con infraestructuras “de primer nivel” y un “know-how de primera línea en movilidad eléctrica y conectada”.
En este sentido, ha destacado que España apuesta “decididamente” por la electrificación de la industria del automóvil, y que desde el Gobierno se están fomentando inversiones a través de Fondos Europeos y del Perte VEC, que lanzará su segunda convocatoria en el primer trimestre de este 2023.
Una inversión de 3.000 millones para Valladolid
Maroto subraya que España ofrece “confianza, seguridad y certidumbre” a los inversores, gracias a un ambicioso plan de inversiones y reformas que está atrayendo capital para proyectos en distintos sectores, entre ellos a la automoción, que aspira a ser el hub de electromovilidad de Europa.
El encuentro da continuidad al protocolo firmado el 17 de octubre entre el Ministerio de Industria e Inobat, donde quedó patente el interés de Valladolid por acoger la nueva fábrica europea, con una inversión prevista de 3.000 millones. Valladolid está preseleccionada gracias a su posicionamiento en el sector de la automoción y su ubicación geoestratégica.