Víctor con su negocio a la espalda

Víctor con su negocio a la espalda

Valladolid

Abre su negocio en un pueblo vallisoletano: “Soy un soñador y una persona echada para adelante”

Víctor Ferreiro nos cuenta su valiente idea de instalar su puesto de trabajo en el mundo rural

17 marzo, 2023 15:02

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A 28 kilómetros de Valladolid, y sobre la vega y ribera del Duero, se levanta la localidad vallisoletana de Tordesillas, un municipio cargado de historia, cultura, y que pasa por ser un gran cruce de caminos en la provincia pucelana y un punto estratégico a la hora de hablar de conexiones.

Con 8.664 habitantes en la actualidad, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística, es también un punto perfecto para implantar un negocio. Eso opina Víctor Ferreiro, que lo ha hecho hace cuatro meses. Cuenta toda su historia y cómo le va, en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León.

Un soñador

“Me considero una persona normal”, asegura. “muy soñador y una persona echada para adelante. En la NASA hay un letrero que dice: está demostrado que aerodinámicamente es imposible que el abejorro pueda volar, por su tamaño, su peso, y la forma de su cuerpo. Solo que él no lo sabe. Supongo que soy el abejorro”, añade, en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León, Víctor Ferreiro.

Licenciado en economía, a sus 40 años, le gusta viajar, ir a la montaña, bailar… y pertenece a la banda de gaitas ‘Nivaria’ de la Casa de Galicia de Valladolid. Nació en Valladolid, aunque la mitad de su familia es gallega. “Podemos decir que soy medio galego y medio del Duero”, añade, con una sonrisa.

Tras estudiar económicas en la Universidad de Valladolid, posteriormente hizo un MBA (Master’s in Business Administration) y después otro en Master de Dirección Logística. Todo ello antes de instalar su negocio en Tordesillas, un pueblo muy conocido y con un gran encanto patrimonial y cultural de la provincia de Valladolid.

Víctor Ferreiro en su tienda

Víctor Ferreiro en su tienda

Un negocio que nace hace cuatro meses y la buena acogida de Tordesillas

“Mail Boxes nace en los años 70, en Estados Unidos. Para dar servicios de mensajería a las ciudades. En España estamos acostumbrados a ver los buzones amarillos de Correos, pero no todas las culturas y sociedades han evolucionado igual”, nos cuenta nuestro entrevistado, que da se ha abierto su negocio a las puertas de la calle principal de Tordesillas, en un sitio muy visible y de fácil acceso.

Nos explica que Tordesillas es “un enclave estratégico”. Pasa por ser el “cruce de caminos del Noroeste de España”. Un lugar con una gran historia en el que se firmó un tratado que ha marcado la historia del mundo, el Tratado de Tordesillas.

Hace cuatro meses que abrimos de cara al público. Este invierno se está haciendo muy largo. La acogida del municipio ha sido muy buena. Yo me lo esperaba algo más complicada pero los vecinos y la localidad me están dando la oportunidad, poco a poco, de asentarme”, explica satisfecho Víctor Ferreiro.

Mail Boxes está especializado en el embalaje profesional y en los servicios de envíos a nivel nacional e internacional. Todo desde la documentación y paquetes hasta servicios especiales. Intentan dar el soporte logístico a todos sus clientes.

Víctor Ferreiro

Víctor Ferreiro

Optimista con el futuro

Reparte, fundamentalmente, a la pequeña y a la mediana empresa. Da soporte logístico para exportaciones e importaciones y también servicios a medida que vayan surgiendo. Además de a particulares. “Actualmente hay mucha gente con familiares fuera de España. La ilusión que haría si les enviamos un poco de embutido o una botellita de verdejo, ¿Verdad?”, añade.

Víctor ve el futuro con optimismo. De hecho, nos cuenta que “tiene muchas ideas”. “Uno es tan grande como el tamaño de sus sueños”, apunta. Apuesta, además firmemente, por el mundo rural y por sus bonanzas mirando a dentro de unos años.

“Estos últimos años estamos comenzando a cambiar las ideas de la sociedad. Se comienzan a valorar otros aspectos que antes no se tenían en cuenta. Las oportunidades están en el mundo rural, pero se necesita más esfuerzo y apoyo”, explica.

Por el bien de todos espera que los pueblos sigan existiendo porque “como caiga el mundo rural, detrás caemos todos”, añade. A él, el pueblo le encanta. Tanto que ha montado ahí su nuevo negocio.