Castilla y León celebra este martes, 23 de abril, su día. Uno de los más polémicos tras la decisión de la Junta de llevar el evento a todas las provincias de la región. De hecho, desde León, Salamanca o Zamora han calificado esta acción como “innecesaria” y han censurado el gasto de dinero en esta iniciativa.
EL ESPAÑOL de Castilla y León charla con Luis Alonso Laguna, el alcalde de Villalar. Él apuesta por centralizar el evento en su pueblo y augura un “fracaso” en la iniciativa de la institución regional.
Hablamos con él sobre esto y muchas cosas más en la siguiente entrevista:
P.- ¿Cuántas fiestas del Día de Castilla y León lleva organizando el alcalde de Villalar?
R.- Llevo de alcalde desde el año 2011. He organizado parte de la fiesta durante años. La programación del día 22 y el día 23 la hacía la Fundación Castilla y León. La fiesta del pasado año la hizo el Ayuntamiento. Fue muy singular porque montamos cinco escenarios y 63 actuaciones diferentes. La idea fue muy acertada y la teníamos en la cabeza desde hace tiempo.
P.- ¿Qué ha tenido que hacer el municipio de Villalar este año?
R.- Contratamos a cinco personas. Hemos segado la hierba de la campa, preparado aparcamientos y lo que tenemos dispuesto siempre. Antes nos daban una cantidad para compensar y ahora no nos dan nada. Llevamos 8 días de preparativos con personal contratado para tener, lo que corresponde al Ayuntamiento, preparado. El Consistorio tiene organiza el ‘Canto a la Esperanza’ y la ofrenda floral de las 10.00. También una carpa grande en la entrada de la campa donde damos información del lugar. También hay foros con jóvenes y demás. El día 23 continuaremos con el Programa Europeo.
P.- ¿Cómo va a transcurrir el día?
R.- Va a ser una jornada como la que vivimos todos los años. Parece que el tiempo va a acompañar, aunque con un poco de frío. La gente viene preparada. Lo peor es la lluvia, pero este año parece que no. Será un día con mucha gente. Esperemos que como en los años anteriores y que sea un éxito.
P.- ¿Cree que será un día inolvidable?
R.- Cada año tiene su singularidad. Para muchos será inolvidable, para otros normal. Para el pueblo y los vecinos, por la programación que tenemos, será un Villalar más.
P.- En los años anteriores y desde esa coalición de Gobierno entre PP y Vox se ha venido reduciendo la ayuda para la fiesta al Ayuntamiento.
R.- El Ayuntamiento de Villalar, este año, se puso en contacto con la Consejería de Presidencia. Pensábamos que podía pasar lo mismo del año pasado, que la Fundación que venía haciéndose cargo de la infraestructura que se pone para seguridad y demás, hablé con el consejero para que nos echaran una mano y poder hacer una programación como la del año pasado que fue singular y con impacto. En ese momento dijeron que no, que era cuestión de la Fundación Castilla y León.
P.- ¿Y qué pasó?
R.- El 22 de enero nos dijeron que no iban a hacer nada. A partir de ahí, nos pusimos a preparar un programa, mejor que el del año pasado. Llegamos a tener un programa que ascendía a 30.000 euros que estaban ya recaudados unos 42.000, necesitábamos 75.000. Los busqué en la Junta, pero nos dijeron que estaban preparando una programación para las nueve provincias y tres municipios y Villalar. Les pedí que se fueran a gastar aquí lo pusieran para el programa del Ayuntamiento y tampoco pudo ser. Ahí nos retiramos.
P.- ¿Cuál es el coste para el Ayuntamiento?
R.- Entre 3.000 y 5.000 euros por la infraestructura necesaria para montar la carpa. Daremos unos pañuelos para que la gente se lleve un recuerdo de Villalar.
P.- Por si fuera poco, la idea este año es llevar la fiesta a otras provincias… ¿Cómo lo ve?
R.- Llevar la fiesta a otras provincias no lo he visto nunca. Así no se hace Comunidad ni se fomenta el sentido de pertenencia. Allá ellos. No es la primera vez que lo han intentado y nunca les ha salido bien. La gente tiene el espíritu de Villalar en su memoria colectiva. Me parece que no adelantan nada con esto. La intención se ve y te duele. Se intenta deslavazar esta fiesta. Por lo que a nosotros atañe, sabemos que tenemos que aguantar. Este año es así y aventura un fracaso. El tiempo dará o quitará la razón. Creo que la gente seguirá viniendo a Villalar y da igual donde se convoque.
P.- En León o Salamanca lo ven mal y como un despilfarro de dinero… ¿Usted?
R.- No me parece mal que la Junta se gaste el dinero en esta iniciativa. Lo veo como las fiestas de los pueblos. Lo que ocurre es que hay un día especial en Villalar, una fiesta propia de la Comunidad. Lo que menos en cuenta hay que tener es el gasto del dinero sino lo que motiva a la fiesta. La gente se reúne para celebrar su fiesta en la Plaza Mayor, hay fiestas en los barrios, pero son para unirse. En el caso de Castilla y León es lo mismo: gastarse el dinero para la fiesta es lo propio pero lo que ocurre es que, si ese dinero, 575.000 euros, se pusieran en la fiesta de Villalar, habríamos tenido un evento totalmente diferente a la que se viene haciendo. Con recursos es más fácil.
P.- El dinero no lo es todo…
R.- No, lo bueno es hacer una fiesta en la que se exprese el sentimiento del pueblo y se realce el sentido de pertenencia. Eso nos ayuda a estar unidos. No se puede tener una Comunidad, con nueve provincias, y hacer provincialismo. Lo que hay que hacer es que la fiesta sea de todos y debe tener un punto en común para convivir. Si se sigue haciendo provincialismo, nunca me voy a sentir orgulloso. Es muy importante presumir de Las Médulas en León, de los parques naturales de Soria, de la Catedral de Burgos.
P.- Mañueco va a acudir
R.- Sí, como lo ha hecho el presidente Herrera todos los años. Le saludaremos, le daremos un abrazo. Hablaremos, por el camino, de como está el municipio. Le diré que igual que el año pasado y que de lo que teníamos que hablar no hemos hablado. Tiene que venir porque es obligado. Ojalá hablemos, en serio y marquemos un plan para Villalar, el símbolo de las tradiciones y de la revolución comunera. Que Villalar sea de todos. Para los vascos, Gernika es ensalzar lo suyo, eso debe ocurrir aquí. Mucho tienen que cambiar las cosas. No me dan esperanza.
P.- A Vox no se le espera.
R.- No le interesa estar aquí. Con lo que hizo el vicepresidente y los calificativos que empleó, le identifican y le diseñan o dicen cómo es y lo que esperamos de él, que es nada. O están muy mal informados, o no lo hacen con buenas intenciones. Esto forma parte de una historia y a ellos no les va. Están en otro plano. Hablar de justicia e igualdad que es lo que, en definitiva, fueron las señas de identidad de la revolución, no les interesa nada. No echo de menos a Vox en la fiesta.
P.- Choca cuando en dos años va a ser el 50 aniversario de la fiesta y parecía que había que apostar por reforzar la que teníamos y no por nuevos experimentos…
R.- En el 50 centenario, algo tendremos que decir. Sobra, todo intento de hacer algo nuevo. Tenemos la experiencia clara del quinto centenario y lo que ha quedado. Tenía que haber marcado un antes y un después. Lo que vamos a celebrar es muy importante para las democracias. Tenemos que celebrarlo.
P.- Óscar Puente va a ser el que pronuncie el Canto a la Esperanza. ¿Por qué él?
R.- Sí, vendrá el ministro de Transportes. Invité a los tres ministros de Castilla y León para que vinieran a hacer la ofrenda. Han coincidido que eran ellos. De otro partido habría sido igual. Es muy difícil tener a tantos representantes en el Consejo de Ministros. Que sea de aquí es un orgullo para todos. No para Villalar, sino para los castellanos y leoneses. Va a estar Ana Redondo. La he invitado para que firme en el libro de visitas y me ha confirmado. Puente ha dicho que se encargaba de hacer el discurso del Canto de la Esperanza y me ha parecido extraordinario. Ha estado, conoce Villalar desde que venía con chupete. Para mí es un orgullo que alguien que ha pasado por aquí que alcance puestos tan altos. Pondrá su sentimiento para que todo salga bien. Ojalá, en el futuro, podamos contar con tres ministros de otro partido, del PP, y estaría encantado como lo voy a estar con los de este año.
P.- Virginia Barcones, también van a estar. Amplia presencia socialista…
R.- Viene representando a la sociedad civil por su puesto. Siempre ha estado ahí, desde el primer momento. Ha venido siempre. Todos los representantes son bienvenidos. También los sindicatos.