Los nuevos labios de la Seminci: el "complicado" paso a paso de llevar el beso original de Sierra a la "simpleza más absoluta"
Félix Rodríguez, uno de sus ideólogos y director de PobrelaVaca Studio, defiende que la imagen anterior "no estaba pensada para ser un logotipo"
25 junio, 2024 07:00Noticias relacionadas
El pasado jueves, 20 de junio, se anunciaba la inesperada renovación de la identidad visual de la Semana Internacional del Cine de Valladolid (Seminci). Los icónicos labios del pintor leonés Manolo Sierra pasaban a mejor vida después de 40 años representando uno de los festivales cinematográficos más importantes y arraigados en nuestra tierra. Hoy, conocemos el "complicado" paso a paso de llevar el beso original de Sierra a la "simpleza más absoluta".
EL ESPAÑOL - Noticias de Castilla y León ha tenido la oportunidad de charlar con Félix Rodríguez, ideólogo junto a Ana María Hernández y directores de PobrelaVaca Studio, de la nueva identidad visual de Seminci. Una identidad que busca adaptarse a los nuevos tiempos, los nuevos soportes y facilitar todo el trabajo alrededor de lo que implica un logotipo de estas características. "Michael Jordan me parece el mejor, pero por muy icónico que sea llega un momento que se retira", manifiesta Rodríguez, quien con esta metáfora trata de explicar que los labios de Sierra "no estaban pensados para ser un logotipo" y necesitaban una renovación.
"Los labios que había antes eran completamente icónicos, pero era muy difícil ya trabajar con ellos", relata. El diseñador gráfico desgrana que la identidad creada por el artista leonés se pensó para un cartel, pero se extrayó y se vectorizó, cuando por aquel entonces "a lo mejor no era de la mejor manera". "Poner un simple vinilo con estos labios era una labor bastante ardua porque estaban troceados en 20.000 cachitos. A mayores, durante estos 40 años había sufrido mucho trabajo de rediseño, de añadirle una tipografía que tampoco era muy clara, de torcer los labios", añade.
Con esto sobre la mesa, Félix y Ana María pusieron "encima de la mesa" un trabajo de diseño especialmente a "nivel tipográfico, a nivel icónico". "Queríamos respetar sobre todo ese trabajo, ese beso que todo el mundo tiene en la cabeza. Lo que hemos hecho ha sido del beso original de Sierra, sacar las líneas de fuerza que tenía ese logotipo y llevárnoslo a la simpleza más absoluta, que es lo más complicado", asegura.
Para Rodríguez, cuando se ve un logotipo que funciona, es porque tiene "mucho trabajo detrás". Y esto es algo que se aprecia en algunos ejemplos como en Nike o en Apple, según defiende. "Logotipos que durante su vida han ido cambiando, pero que mantienen su esencia y han cambiado otras cosas", insiste el ideólogo de la nueva identidad de Seminci.
Lo primero que quiere dejar claro es que cuando un estudio se encuentra un proyecto de este tipo, lo primero que se preguntan es "para qué" se va a utilizar esta nueva identidad. Una identidad es una herramienta que el cliente, en este caso, utiliza para "comunicar" y su labor es "solucionar problemas de comunicación".
Los labios de Sierra tenían una estética muy "marcada y rota", además de no contar con acentos, por lo que cada vez que había que poner un nombre había que "hacerlo a mano". Por ello, incidieron en la "claridad de la tipografía" porque es el "mensaje". Tanto Félix como Ana María eran muy seguidores de una que se llama Centrale Sans. "Luego empezamos a trabajar en el icono y, siguiendo las mismas formas que de Sierra, hicimos el nuestro", desgrana.
Y es aquí, a la hora de hacer las comisuras, cuando se plantearon la posibilidad de que éstas también estuvieran presentes en la tipografía. "Lo que hicimos fue desarrollar esa Seminci Sans, basada en Centrale Sans, pero con los cortes que tienen las letras que son los mismos ángulos que tienen las comisuras de los labios", revela el diseñador gráfico.
Todo ello con la intención de "simplificar todo lo posible" por una identidad se tiene que ver en "muchos medios que antes en el 84 no había", como pueden ser los digitales, móviles o tablets. "Por muy icónicos que fuesen los labios, llega un momento que su usabilidad era muy reducida", reconoce Félix Rodríguez a este periódico.
No obstante, todo el proceso se ha basado en el "respeto" a su significado pero orientado a darle "simplicidad, ligereza y sobre todo limpieza y orden dentro del logotipo". A pesar de la polémica generada en redes sociales, Rodríguez recalca que "el propio Manolo Sierra está encantado". "Ya eran 40 años de utilizar su logotipo. Y no hizo un logotipo, hizo un cartel. Entiendo que está muy arraigado en Valladolid, pero precisamente por eso hemos respetado los labios", puntualiza el diseñador.
Para Félix "ya era hora" de hacerles ese retoque y, precisamente, una de las "primeras dudas" que le surgió fue a raíz del briefing o instrucciones que dieron desde Seminci, donde hablaban de la "usabilidad del logotipo actual" y que, además, "estaban abiertos a una nueva interpretación". "Estuvimos debatiendo durante días qué hacemos con respecto a esa frase. Optamos por lo de que 'oye, esto necesita un cambio. Vamos a trabajar en los labios, por eso buscamos esa misma forma y esas comisuras, para no olvidarnos que ese icono que va dentro de la Seminci pues no había que perderlo", subraya.
Tanto él como Ana María no tienen "miedo" a lo que diga la gente y reconocen que aceptan "muy bien las críticas", siempre y cuando sean de forma "constructiva y respetuosa". "Entendemos a la gente que diga que le gustaban más los de Sierra. Perfecto. Pero los Óscar también han ido cambiando de logotipo. Las identidades visuales son muy diferentes a los iconos gráficos. Tú puedes trabajar en una identidad sin perder la iconicidad de la imagen", señala.
Además, asegura que la "primera llamada" que hicieron por "respeto" cuando les propusieron ser una de las tres empresas que participarían en esta especie de concurso, fue al propio Sierra. "Me alegro de haberlo hecho porque me contó la historia de cómo él hizo ese cartel, de cómo Seminci utilizó después ese logotipo y lo que él pensaba después de ese uso", insiste. Y fue precisamente en esa conversación donde les dijo que se alegró "mucho" de que fuesen ellos porque les tiene "mucha estima" y son compañeros de "muchos años". "Durante el proceso le dijimos que si quería estar involucrado y nos dijo que no, que no quería interferir para nada, nos dejaba completa libertad y que él era un artista y que ese trabajo se había hecho hace 40 años y ya había cumplido su época, que había que remodelarle", afirma con rotundidad.
Además de la tipografía y los propios labios, el nuevo diseño también cuenta en su apartado para la espiga de oro con un añadido que son los cinco laureles que aparecen a cada lado. Una imagen que le gustaría "aclarar" porque la gente se ha pensado que se han puesto unos "laureles que hay en el escudo de Valladolid" y eso "no es así".
Realmente, los laureles se utilizan en el mundo del cine "para hacer un guiño a las películas" que se han presentado o han sido galardonadas dentro de un festival y su referencia al escudo de Valladolid corresponde al "centro" del mismo, a esos cinco girones que aparecen, y no a la corona del exterior. "En un campo dorado cinco piezas ondean dentro del escudo. Es el centro del escudo. Por eso, cada pieza de los laureles tanto a la izquierda como a la derecha tienen esas cinco espigas o granos que vienen de ahí, pero no es por la corona", aclara Félix.
El director de PobrelaVaca Studio recalca la importancia de "poner en valor" el trabajo de los diseñadores de Castilla y León, algo que "falta les hace". "Aquí hay muy buenos profesionales. Nos alegramos mucho de que la Seminci haya mirado hacia dentro y no hacia fuera. Cuidemos más el diseño de la Comunidad porque cuando no se cuida tenemos el ejemplo alrededor como el logotipo de turismo de la naturaleza de la Junta o el de Castilla y León excelente. Cuando no se cuida todos salimos perdiendo y se echa para abajo todo el trabajo", sentencia el diseñador vallisoletano.
Sobre PobrelaVaca Studio
PobrelaVaca Studio nace hace más de 22 años de la mano de Félix Rodríguez y Ana María Hernández. Tras trabajar como directores creativos en grandes agencias de Castilla y León y Madrid, estos dos diseñadores decidieron emprender con su estudio cuando apenas tenían 22 años para "explotar la parte más propia" de un estudio de la Comunidad, donde el tiempo "pasa de una manera más despacio".
"Donde tienes más tiempo si cabe para cada proyecto y para hacer los trabajos con mimo, que era lo que queríamos", señala el vallisoletano. Ambos estudiantes de la Escuela de Arte de Valladolid, han trabajado en múltiples proyectos desde que se lanzasen al mundo laboral.
Desde PobrelaVaca Studio se han encargado, como especialistas a nivel gráfico en identidad visual, de trabajar para empresas tanto de Castilla y León como de España e internacionales. Cuentan también con una parte "más artística" que les permite estar dotados de esta "versatilidad". El propio Félix se dedica también a la caligrafía y participa en diversos festivales de arte urbano.
Todo ello les ha permitido hacer desde la identidad y pintar un hotel entero en República Dominicana a trabajar en este mismo país con Lux House, un grupo que cuenta con mansiones y casas de lujo, hasta otros trabajos como la identidad de Iberaval.
También fueron los ideólogos de las audiovisuales de las Cortes de Castilla y León cuando se inauguró la nueva ese den 2007. También diseñaron la segunda equipación del Real Valladolid esta pasada temporada que, además, ha acabado con el ascenso a la Primera División del fútbol español.