Peligro ecológico en las carreteras de acceso a Sanabria desde Portugal por Calabor y Rihonor
Nueva denuncia de Ecologistas en Acción en Zamora por el uso de herbicidas en las carreteras de acceso a Sanabria desde Portugal por Calabor y Rihonor. Piden poner por delante el “principio de precaución” con medidas como el uso del desbrozado mecánico, ante las sospechas fundadas del riesgo que estos productos crean en la salud pública y el medio ambiente.
Las lluvias abundantes de esta primavera en las cunetas de las carreteras ZA-925 y ZA-921, que desde la frontera con Portugal por Calabor y Rihonor respectivamente conducen a Puebla de Sanabria y al Parque Natural del Lago de Sanabria, no han sido capaces de regenerar su vegetación ni la biodiversidad que albergan a pesar de los meses transcurridos después del riego con herbicida practicado en ellas. "El espectáculo a lo largo del recorrido resulta desolador y sorprendente en una zona protegida y turística", indican.
Los servicios de mantenimiento de estas carreteras autonómicas, que por tanto dependen de la Junta de Castilla y León, "se han esmerado" en la aplicación de herbicida en las cunetas de tal forma que aún permanecen de color pardo, y como consecuencia ni una brizna de hierba asoma en todo el recorrido. Hay que recordar que ambas vías transcurren dentro de zonas LIC de la Red Natura 2000, Lugares de Importancia Comunitaria que la Administración regional tiene la obligación de conservar, garantizando la biodiversidad mediante la conservación de hábitats naturales, fauna y flora según la Directiva 92/43 de la Unión Europea.
Son también dos de los puntos de entrada en la parte española de la Reserva de la Biosfera Transfronteriza “Meseta Ibérica”, lo que no deja de ser sorprendente cuando se está promoviendo un turismo sostenible.
Numerosos arroyos y manantiales en riesgo de contaminarse
Lo habitual es que el tipo de herbicida utilizado sea el conocido glifosato o cualquier otro compuesto de parecida toxicidad, que varios países de Europa ya han dejado de utilizar por sus efectos en la salud de las personas y animales y por supuesto en la vegetación. "Lo alarmante una vez más es que estas cunetas desaguan en acuíferos y arroyos cercanos y, dado su carácter venenoso, contaminan las aguas de los alrededores. Hasta diez arroyos cruza la primera de estas carreteras, a los que se suma el propio río de Calabor y el arroyo de los Baños; el último de estos pequeños cursos de agua denominado Arroyo de las Porfías, hace frontera con el país vecino", detalla la organización.
En el caso de la carretera que conduce a Rihonor, además de cruzar varios arroyos, pasa al lado de los llamados Manantiales del Cerroso y varias fuentes cercanas, lo que indica la alta posibilidad de que se contaminen.
“Principio de precaución”
Desde Ecologistas en Acción de Zamora denuncian "esta irresponsable agresión al medio ambiente de la provincia, que se viene realizando también en otras vías provinciales y en muchos municipios, y que en esta ocasión afecta a una zona muy sensible y protegida que tampoco está siendo respetada, a pesar de la obligación de conservarla por parte de quienes la riegan con tanta generosidad destructiva".
Piden una vez más a las administraciones que cesen en el "uso aberrante" de estos herbicidas, cuya toxicidad está siendo denunciada, y que pongan por delante el “principio de precaución” adoptando medidas protectoras "ante las sospechas fundadas" de que estos productos crean un riesgo grave para la salud pública y para el medio ambiente, aunque aún no hayan sido prohibidos definitivamente debido a las fuertes presiones de las empresas del sector en la Unión Europea. Y recuerdan que existen alternativas al uso de estos compuestos químicos, como el desbrozado mecánico o la utilización de otras especies que controlen la maleza.