El Gobierno de España apuesta por “reactualizar el modelo de gestión y el compromiso” de las empresas hidroeléctricas con los territorios

Juanma de Saá / ICAL

El Gobierno de España promoverá un encuentro entre los representantes de los municipios afectados por el vaciado del embalse de Ricobayo (Zamora) e Iberdrola para “reactualizar el modelo de gestión y el compromiso de las empresas hidroeléctricas” con los territorios afectados.

“Hay que tener en cuenta que, especialmente en las empresas que se dedican a la energía, que llevan varios años poniendo en marcha mecanismos de adaptación al cambio climático, la adaptación debe alcanzar a todos los extremos de la gestión y el compromiso de las empresas, no solo al diseño de negocio”, señaló el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán. “Las concesiones deben adaptarse a la nueva realidad en esos términos y, por tanto, confiamos en que las empresas sean consecuentes con su responsabilidad frente a la sociedad”, añadió.

Hugo Morán hizo estas declaraciones en la Subdelegación del Gobierno en Zamora, después de mantener una reunión, junto con el delegado del Gobierno en Castilla y León, Javier Izquierdo; la presidenta de la Confederación Hidrográfica del Duero, Cristina Danés, y el subdelegado del Gobierno en Zamora, Ángel Blanco, con los alcaldes de los municipios de Muelas del Pan, Luis Alberto Miguel; Palacios del Pan, Lucía Pechero; Carbajales de Alba, Roberto Fuentes; San Pedro de la Nave – Almendra, Braulio Prieto; Andavías, Antonio Iglesias y el vicepresidente tercero de la Federación de Asociaciones y Municipios con centrales hidroeléctricas (Femembalses) y alcalde de San Cebrián de Castro, Javier Aguado.

“Hemos traslado a los alcaldes el compromiso de trabajar conjuntamente hasta diciembre, el último tramo de la exposición pública de los borradores de los planes, a recoger las aportaciones para incorporarlas a los planes de cuenca para tener unas herramientas jurídicas suficientemente sólidas para que situaciones como esta no vuelvan a repetirse”, indicó.

“Nos hemos comprometido con los alcaldes a poner en marcha tras una reunión en septiembre, incorporar en el ámbito en el que la Ley de Aguas faculta a Gobierno para intervenir en limitaciones del uso, una instrucción a las confederaciones hidrográficas para tener claro qué herramienta debe limitar la capacidad de aprovechamiento de las concesiones”, agregó, además de expresar su esperanza de que la agenda de trabajo puesta en marcha “dé resultados de forma inmediata y a medio plazo”.

Morán aseguró que las confederaciones hidrográficas “llevan un seguimiento puntual” de cómo se desarrollan las concesiones y que es frecuente la apertura de expedientes. “Este no es un caso excepcional. Se hará un seguimiento, más teniendo en cuenta que hay una denuncia explícita de municipios afectados. Será un procedimiento relativamente rápido y en los próximos días habrá una respuesta”, indicó.

“No es una situación exclusiva de este embalse. Ha habido problemas en embalses de varias demarcaciones por la puesta en marcha de regímenes de producción eléctrica por encima de lo habitual en estas fechas. Hemos seguido la evolución de la situación desde el primer minuto y, más allá de la vigilancia del cumplimiento del régimen concesional, si se constata que hubiera habido una mala praxis, se abre un expediente informativo y si se constata, se pondrá en marcha el mecanismo sancionador correspondiente”, expuso.

Cambio climático

En cualquier caso, el secretario de Estado recordó que la mayoría de las concesiones a empresas para la generación de energía eléctrica cuentan con varias décadas de vigencia, de manera que la situación global ha experimentado modificaciones sustanciales. “El momento en el que se inician dista mucho de parecerse al actual. Cualquiera es consciente de que hay un fenómeno que condiciona de forma radical la gestión de los recursos naturales y el agua es uno de los más sensibles, que es el cambio climático”, dijo. “Cuando se diseñaron, en su momento, estos mecanismos, no existía siquiera en la imaginación un fenómeno como este. Hablamos de una concesión, en este caso, que data de la década de 1930, lo que da una ida del concepto que había entonces de gestión medioambiental”, insistió.

De esta forma, Hugo Morán hizo hincapié en que fue preciso tener en cuenta esas circunstancias para el proceso de elaboración de los planes de cuenca de tercer ciclo, que entrarán en vigor en los próximos años. “Decidimos incorporar estos dos elementos como principales para definir la gestión y el uso del agua en las demarcaciones. El impacto el cambio climático va a condicionar la capacidad de gestión de cada demarcación y los criterios ambientales deben ser reforzados respecto al origen de los planes vigentes”, explicó. “

Por lo que se refiere a que el embalse de Ricobayo deje de ser regulador, como requieren los alcaldes de los municipios afectados, el secretario de Estado apuntó que se trata de una petición con “complejidad jurídica”, aunque no descartó la posibilidad de que pueda revisarse.

Otros casos

Hugo Morán insistió en que hay otros ejemplos de conflicto relacionado con el nivel de explotación “por encima de lo recomendable” en el período estival, como en las demarcaciones de Miño-Sil y Tajo, además de la del Duero, y otros casos no vinculado a la explotación hidroeléctrica. “Todos los años se producen en estas fechas situaciones de respuesta inadecuada frente a la escasez. El nivel de embalsado está en torno al 45 por ciento de la capacidad total, por debajo del nivel medio de los últimos diez años. Año tras año, la presión va incrementándose y este escenario se vive a partir de ya. Siempre hemos vivido en el ámbito de la escasez de agua pero apunta a reducciones entre el 15 y el 45 por ciento. No se puede plantear el mismo régimen de explotación que antes”, advirtió.

En este contexto, el secretario de Estado pidió “responsabilidad en el uso del agua” al conjunto de la ciudadanía. “Si el próximo otoño y la primavera no responden hidrológicamente, podríamos tener dificultades en la disponibilidad de recursos en algunas demarcaciones. La tendencia es preocupante y, por eso, todos los usos, especialmente los hidroeléctricos, tienen que atender a esa situación”, recalcó. 

“Debemos ser capaces de gestionar con sentido común los datos que la Aemet pone sobre la mesa todas las semanas y no es razonable hacer una disposición del recurso por encima de la capacidad prevista del sistema para los próximos meses”, concluyó.