El Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León ha aprobado la inversión de más de 6,34 millones de euros para ensanchar y reponer el firme de la carretera que une a La Bóveda de Toro con Cañizal. Una medida que para la delegada territorial de la Junta en Zamora, Leticia García, es "un ejemplo más del compromiso inequívoco de Alfonso Fernández Mañueco con Zamora".

El contrato prevé un plazo de ejecución de 26 meses, con la renovación de la señalización y balizamiento de todo el tramo de 19,6 kilómetros, que une las carreteras autonómicas ZA-605 con la CL-605.

Las obras plantean el ensanche de su plataforma hasta conseguir una sección 6/7, con carriles de 3 metros, arcenes de 0,5 m. y bermas de 0,5 m. a cada lado. El eje del trazado en planta se proyectará en paralelo al actual, puesto que el ensanche de la vía se acometerá prioritariamente a un lado de la calzada ya existente, realizando las correcciones oportunas en planta y alzado para alcanzar unas condiciones geométricas que mejoren tanto la seguridad como la comodidad de circulación. Para ello se modifica el trazado en prácticamente un 5% de su recorrido.

La Junta ya ha comprobado que el movimiento de tierras es medioambientalmente sostenible, ya que gran parte del material excavado será reutilizado para la formación del terraplén y su explanada, y la tierra vegetal servirá de recubrimiento de taludes y para la recuperación ambiental de zonas degradadas y superficies que necesiten regeneración. En este mismo sentido, para la capa de rodadura se empleará betún mejorado con caucho procedente de neumáticos fuera de uso.

La obra también mejorará y ampliará todas las intersecciones que recorren la vía, así como una reordenación de los accesos para mejorar la seguridad vial de la zona.

El proyecto se completa con un drenaje longitudinal y transversal, que incluye la sustitución de las obras de fábrica existente, la renovación de la señalización horizontal y vertical, la sustitución e instalación de las barreras de seguridad según la normativa vigente.

Esto incluye la implantación de dispositivos de protección de pasos salvacunetas, para crear unos márgenes benignos. El proyecto también acometerá actuaciones en el ámbito de las travesías y entornos urbanos, como puede ser el camino peatonal de acceso al cementerio de La Bóveda de Toro.