El presidente de la Diputación de Zamora, Javier Faúndez, ha explicado que desde el área de Deportes y Juventud se ha abierto una investigación a la empresa de autobuses Julio Fernández que protagonizó el accidente en la localidad leonesa de Boñar el pasado domingo 3 de marzo. Cabe recordar que 25 niños de entre 8 y 10 años de edad y 6 monitores viajaban en dicho vehículo que chocó contra una valla de protección y estuvo a punto de precipitarse al embalse del Pomar. En el autobús viajaban alumnos procedentes del CEIP Buenos Aires Benavente y CEIP Coreses, que iban a participar en actividades extraescolares promovidas por la Diputación Provincial.
Tras el suceso, que finalmente quedó en un susto, tanto el diputado del área, Juan del Canto, como el propio Javier Faúndez, tuvieron conocimiento a través de los medios de comunicación que la causa del accidente había sido "conducción temeraria y que los neumáticos podían estar en mal estado".
Por ello, el presidente de la Diputación ha solicitado un informe completo "de todo lo ocurrido" a los técnicos de la Institución Provincial, que recaben toda la información y se ha pedido las explicaciones pertinentes a la empresa de transportes en cuestión. "Si fuese cierto, procederíamos a iniciar la resolución de su contrato", ha advertido Faúndez.
El presidente de la Diputación de Zamora ha insistido en que desde el equipo de Gobierno y desde el área de Deportes y Juventud "siempre velamos por la seguridad de las personas que atendemos". Y ha puntualizado que la empresa que se encarga de organizar los deportes de invierno y juegos escolares, como a los que se dirigían estos escolares, Zamora Natura, "pidió información a las autoridades del estado de las carreteras antes de iniciar el viaje". De hecho, muchos autobuses escolares de otros puntos subieron a San Isidro a realizar actividades de esquí, como indican desde la Diputación Provincial.
Los pequeños iban a realizan actividades de esquí promovidas por la Diputación de Zamora con carácter extraescolar. Sin embargo, a las 09:50 horas, el vehículo ha estado a punto de precipitarse al embalse del Porma, en la carretera LE-33, a la altura del kilómetro 10.900, en sentido ascendente, en el término municipal de Boñar.
Afortunadamente, el autobús se quedó finalmente al borde del precipicio gracias a la valla de protección que ha retenido al vehículo. La Subdelegación del Gobierno en León indicó que la "velocidad inadecuada para el estado de la vía", que estaba cubierta de hielo, como la causa probable del accidente.
Inclemencias meteorológicas
Por su parte, el delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, ha achacado a las inclemencias meteorológicas este accidente, aunque no ha podido confirmar si el suceso de produjo por una velocidad inadecuada. También ha asegurado que afirmó que no disponía de la información sobre el estado de los neumáticos del autobús.
"Pudo ser un accidente muy grave, no se nos tiene que olvidar. En este caso, era un transporte público de viajeros y todos tenemos que agradecer que quedara en la propia calzada", señaló.
"Se encuentra dentro de unos días en los que hemos estado afectados por un frente frío, lo que conlleva que en muchas carreteras donde estas precipitaciones han sido muy importantes, además de las bajas temperaturas, y que han podido producir el desplazamiento de este autobús de transporte", indicó.
Zamora Sí pide explicaciones
El diputado de Zamora Sí, Eloy Tomé, ha anunciado que solicitará explicaciones tanto al diputado del área de Deportes, Juan del Canto, como al presidente de la Diputación de Zamora, Javier Faúndez, por permitir la excursión de este autobús de escolaresal puerto de San Isidro de León, a pesar de la situación de riesgo alertada por la Dirección General de Tráfico y la Agencia Estatal de Meteorología.
Zamora Sí asegura que la DGT había emitido una alerta de nivel negro, que indica el cierre de la carretera, en un tramo de la vía LE-331, tan solo a 16 kilómetros del lugar del accidente del autobús escolar. Este hecho se produjo una hora después de que se publicara el parte de la DGT, y a pesar de la disponibilidad de esta información, la excursión no fue cancelada.
"Esto significa que antes de ocurrir el accidente existía información de la situación al alcance de los responsables, ya que con tan solo una consulta a la página de la DGT podrían haber suspendido el viaje escolar, ya que en la web estaban colgados los datos sobre la situación de la carretera a la que se dirigían los niños", aseguran en un comunicado.
Ante esta situación, desde Zamora Sí se exigirá explicaciones de por qué no se tuvo en cuenta "el estado meteorológico adverso en las carreteras por las que debía circular el autobús de los niños hasta San Isidro, cuando ya había numerosas alertas que desaconsejaban esta decisión, que podía haberse convertido en una tragedia, que por fortuna se evitó".
Eloy Tomé también resaltó que, "con independencia de las investigaciones que se estén llevando a cabo respecto a la empresa de autobuses, algo que nos parece correcto que se deba realizar, lo que parece claro es que esa decisión política debe explicarse por la gravedad de lo que podría haber ocurrido, y tanto el diputado del área como el presidente de la Diputación deben asumir las posibles consecuencias".