Iglesia de San Claudio de Olivares, Zamora

Iglesia de San Claudio de Olivares, Zamora Turismo CyL

Zamora

Esta es la iglesia más antigua de Zamora: cuya construcción se realizó en dos fases

En el año 1931 fue declarada monumento histórico-artístico nacional

8 julio, 2024 07:00

Castilla y León es una de las regiones con más joyas arquitectónicas del país. Pasear por las calles de cualquier municipio de la Comunidad implica que lo más seguro es que te encuentres algún monumento de siglos pasados. Ya sea iglesias, monasterios, castillos, puentes o catedrales entre muchos otros elementos.

Si nos sumergimos por las calles de la capital zamorana encontramos, que a cada paso que damos hacía el casco antiguo de la ciudad nos encontramos con verdaderas joyas del románico español. Un total de 23 templos que sitúan a esta localidad como la de mayor número y calidad de templos románicos de Europa. Esta es la razón por la que Zamora está considerada como 'la ciudad del románico'. De todas las iglesias que hay en la capital, la iglesia de San Claudio de Olivares es considerada la más antigua de todas. 

Este templo románico se sitúa a la orilla del Duero, en el barrio de Olivares. El origen y la historia de esta iglesia es un poco desconocido, ya que la primera referencia documentada que existe la datan en el año 1176. Se cree que esta es el primer templo románico levantado en la ciudad.

Su construcción se sitúa en dos fases, una primera a mediados del siglo XII cuando se levantó el ábside, y a finales de ese mismo siglo, se realizó el resto de la obra. Destaca una abundante decoración escultórica, en las arquivoltas del pórtico y en los capiteles de las columnas interiores. 

Es un tempo pequeño, construido con arenisca anaranjada local, formado por una única nave irregular con un tramo recto presbiteral y un ábside ultrasemicircular. Inicialmente esta obra estuvo abovedada, pero al estar el muro sur cercano al río Duero, las crecidas dieron en el suelo del templo y fue sustituida por una armadura de madera. Un muro que se ha rehecho y reforzado varias veces a lo largo de los años, en una de ellas se prescindió de la portada que había en el muro.

Iglesia de San Claudio de Olivares

Iglesia de San Claudio de Olivares Diócesis de Zamora

El ábside se encuentra sobre un podio corrido cuyo escalonamiento se divide en cinco tramos por seis pedestales en lo que deberían alzarse otras columnillas adosadas al paramento, de las cuales solo se conservan las del lado sur. La cornisa del ábside se adorna en la parte frontal con una banda ajedrezada y posee una colección de magníficos canecillos figurativos con una temática que mayormente alude a actitudes humanas. 

La portada septentrional donde está presidida por un cordero, que simboliza la figura de Cristo, se despliega un interesante calendario litúrgico muy erosionado, un ejemplo tardío, pero muy rico y claramente hispánico por la presencia de escenas como la trilla en agosto y el motivo de la sed en julio.

La portada de entrada a este templo se encuentra en el lado norte. Está construida en arco de medio punto con cuádruple arquivolta. La primera interior está formada por dovelas sin labrar, la segunda tiene catorce dovelas. Los dos salmeres representan sendos leones, y las doce restantes plasman escenas cotidianas propias de cada mes del año. La tercera arquivolta repite en cada dovela grandes horas de mucho relieve que se desarrollan simétricamente sobre una palmeta central. La arquivolta exterior tiene veinte dovelas donde hay representados una colección de animales reales y mitológicos. 

En el interior de la iglesia destaca el desarrollo del presbiterio que se encuentra organizado en dos tramos mediante arco triunfal, con un fajón de medio punto en el centro descargado sobre ménsulas y otro en el plano del inicio del ábside. Está cubierto con bóveda de medio cañón y los lienzos laterales aparecen aligerados mediante arquerías de medio punto. Los capiteles interiores de la cabecera son tallas magníficas que se conservan en muy buen estado.

Además, dentro de este templo se encuentra la imagen del Cristo del Amparo, una escultura anónima del siglo XVII, que procesione durante la noche del Miércoles Santo en la Hermandad de Penitencia que recibe el nombre de esta figura, conocida popularmente como 'las capas pardas'.

La iglesia de San Claudio de Olivares fue declarada monumento histórico-artístico nacional en el año 1931. También conserva una pila bautismal de origen impreciso, aunque se cree que sea medieval, al igual que los herrajes de la puerta del templo.