Citada a declarar la hija del magistrado vallisoletano Fernando Valdés, investigado por maltrato a su mujer
El Tribunal Supremo ha citado para este miércoles a la hija del magistrado del Tribunal Constitucional (TC) Fernando Valdés, investigado por presunto maltrato a su mujer, y a un guardia civil, ambos en calidad de testigo, después de que ya compareciera el matrimonio, que negó cualquier agresión.
Según ha podido saber Europa Press, la ronda de comparecencias comenzará a las 10.00 horas con un guardia civil que no pudo acudir a la primera declaración, que tuvo lugar el 1 de octubre, y continuará media hora después con la hija de la pareja.
En su comparecencia de la semana pasada, Valdés y su mujer negaron de forma "categórica" que el incidente que motivó la detención del magistrado el pasado 11 de agosto en su vivienda del municipio madrileño de Majadahonda fuera una agresión, aunque reconocieron que hubo discusión de pareja que pudo ser "sacada de contexto" por las personas que la escucharon desde la calle y alertaron a las autoridades.
Además del matrimonio, declararon los dos jóvenes que presenciaron el incidente y dieron el aviso, que se ratificaron en sus testimonios iniciales sobre lo que oyeron y el estado de Valdés cuando les abrió la puerta de la casa, a donde acudieron en busca de explicaciones, así como el médico del SUMMA que acudió al lugar, y cuatro guardias civiles y cuatro policías locales.
APARTADO DE LAS DELIBERACIONES DEL TC POR SALUD
La citación de Valdés en el Supremo llegó después de que el magistrado solicitara acogerse a una baja por motivos de salud que le apartará temporalmente de las deliberaciones del TC, ya que en dicho momento se encontraba ingresado en un hospital de Madrid.
Valdés, magistrado del TC desde 2012 a propuesta del PSOE para un mandato que ya ha caducado, fue arrestado después de que unos vecinos llamaran a la Guardia Civil tras escuchar una fuerte discusión con su mujer en el interior de la vivienda familiar de Majadahonda.
Estuvo detenido unas horas pero finalmente la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 7 de Majadahonda acordó su puesta en libertad sin fianza tras valorar la salud y la edad de Valdés, de 75 años, y en el contexto de la pandemia de coronavirus.
Aunque inicialmente el asunto recayó sobre este juzgado de Majadahonda, especializado en Violencia Sobre la Mujer, el magistrado está aforado ante el Tribunal Supremo, de modo que la Sala Segunda (de lo Penal) del alto tribunal es la única que puede investigarle.
"BASE INDICIARIA SUFICIENTE"
El pasado 15 de septiembre, la Sala Segunda abrió una causa penal a Valdés al apreciar indicios de la comisión de los delitos de maltrato recogidos en los artículos 153.1 y 153.3 del Código Penal, misma posición adoptada por el juzgado de Majadahonda y la Fiscalía.
A criterio de dicha Sala, las declaraciones de dos testigos y la de un agente, a pesar de las del propio Valdés y su esposa, "conforman una base indiciaria suficiente para descartar en este momento cualquier decisión diferente a la incoación de diligencias" para esclarecer los hechos.
Además de los interrogatorios a Valdés, su mujer y los testigos, entre las pruebas a practicar por el Supremo estaría un informe pericial sobre los efectos en el magistrado de la medicación que toma por la enfermedad que padece.
Las fuentes presentes en la declaración del 1 de octubre han señalado a Europa Press que estos efectos no se relacionan en modo alguno con una situación violenta o de agresión, si bien reconocen que el estado de nerviosismo o temblores que pudieron ver los testigos cuando el magistrado les abrió la puerta pueden deberse a dicha medicación.
El Tribunal Constitucional ya ha salido de manera oficial en defensa del magistrado y ha apelado a respetar el derecho fundamental a la presunción de inocencia "mientras continúe el procedimiento judicial en curso".