Protesta de los alumnos de la UVA, que comen sus táper en el suelo de la facultad ante la prohibición de hacerlo en la cafetería
Varias decenas de alumnos de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Valladolid han llevado a cabo una protesta este jueves y se han reunido en el vestíbulo del edificio y en los accesos para comer, sentados en el suelo, la comida que se llevan de casa ante la prohibición de hacerlo en la cafetería, algo que sí que se les permitía otros años.
Según ha explicado uno de los representantes de los alumnos de esta Facultad, situada en el Campus Miguel Delibes, la prohibición ha entrado en vigor este curso por primera vez y consideran que se debe a un cambio en el contrato de concesión de la cafetería. Igualmente, les llama la atención que en el momento en que se ha aplicado esta prohibición el precio de los menús ha subido.
De hecho, han aseverado que, en una situación como la actual de pandemia del COVID-19, sería más seguro comer la comida de su túper con sus propios cubiertos en la cafetería que comprar y consumir algún producto de los que se ofrecen en el establecimiento.
En cualquier caso, los alumnos reclaman que, como sí que ocurre en otras facultades de la UVA, se habilite como comedor un aula o un espacio "ya no en el propio edificio sino en esta zona del campus" en el que los alumnos puedan consumir la comida que se traen de casa.
Mientras tanto, aseguran que la solución que por ahora les ha dado el decano de esta Facultad en una reunión que han mantenido es que la UVA valora habilitar un nuevo comedor en la Residencia Alfonso VIII, en la calle Real de Burgos, para consumir productos llevados desde casa, pero estos alumnos de Ciencias explican que esa solución tampoco les sirve, ya que sería "compartido con toda la Universidad" y ellos deberían desplazarse desde el Campus Miguel Delibes, casi dos kilómetros.
Todo ello en un curso que ha comenzado con la situación excepcional de la pandemia, con horarios desdoblados que implican que la gran mayoría de los alumnos tienen clases o actividades académicas en jornadas de mañana y de tarde, y en ocasiones solo disponen de una hora para comer, por lo que resulta "imposible" ir a comer a su casa y regresar a tiempo.
Por todo ello, este jueves varias decenas de alumnos de este centro se han reunido a la hora de la comida, para, sentados en el suelo, comer los productos que se habían traído de casa en los típicos 'túper'. Con la "adecuada distancia de separación" se han sentado tanto en el vestíbulo como en la zona situada junto al acceso principal de la Facultad.
De esta manera, han tratado de demostrar a la dirección de la Facultad y de la UVA "lo que va a ocurrir" en unas pocas semanas, ya que por ahora, como el tiempo acompaña y no hace excesivo frío se podían sentar a comer en el césped, pero cuando avance el otoño, si no se habilita un espacio, la imagen que se ha dado este jueves puede ser más habitual.