El Plan de Choque Social de León apuesta por “la defensa de lo público” como mecanismo para abandonar una crisis “arrastrada desde 2008”

Miriam Badiola 

La Plataforma Plan de Choque Social de León, compuesta en la provincia por las organizaciones Ecologistas en Acción, el Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza (Stele) y el la Confederación General del Trabajo (CGT), busca “planteamientos diferentes a nivel social como económico, ecológico como político” que pasan por “la defensa de lo público” para “salir de una crisis que no es solo debida a la pandemia” y que viene “arrastrada desde 2008”.

Así lo apuntó hoy el portavoz de la Plataforma Plan de Choque Social de León, Jesús Albarrán, durante la presentación de la misma en la capital leonesa, donde aseguró que la actual crisis es “una profundización de la originada en 2008, que todavía no se ha superado” y criticó que la salida de la misma “está recayendo erróneamente sobre las espaldas de las clases populares y la población más precarizada”, ante lo que la Plataforma plantea “un análisis y unas propuestas de salida diferentes y que no inciden en las mismas dinámicas, tanto a nivel social como económico, ecológico como político” ante “un comienzo de descrédito en las instituciones”.

Para ello, las tres organizaciones que conforman la Plataforma han trabajado en la elaboración de un documento base que aborda “servicios públicos, vivienda, ecología, trabajo, mujer o medio rural” con la idea de “salir de una crisis que no es solo debida a la pandemia y que irá mucho más allá al arrastrar una crisis anterior no resuelta”.

Así, las salidas propuestas propuestas pararían para el Plan de Choque Social de León por “la defensa de lo público y dotar de mayor recursos y presupuestos a las entidades públicas”, para lo que es necesario que “se reviertan los procesos de privatización que están del deterioro de lo público a nivel de sanidad, educación o servicios sociales”.

Un aspecto “fundamental” para lograr esta cuestión es para Jesús Albarrán “la derogación del artículo 135 de la Constitución, que antepone el pago de la deuda y coarta bastante las políticas sociales”.

A nivel económico, la Plataforma también abogó por “una salida mucho más social” en la que “la economía esté al servicio de las necesidades básicas de la gente, algo que no se está cumpliendo”, ya que “el sistema deja a bastantes capas de la situación en la pobreza o precarizada”.

Además, “en un contexto de crisis climática y ecológica”, el Plan de Choque Social de León busca incidir en “la justicia social y ecológica” frente a las salidas planteadas “que inciden en modelos productivistas de industrialización máxima, que ahora mismo no son los válidos.

Por otra parte, entre las reivindicaciones de la Plataforma se encuentra la derogación de las reformas laborales al ser “el marco jurídico donde se genera la precariedad, el desempleo y figuras como, por ejemplo, los falsos autónomos”. De igual forma, se busca “una salida feminista que afronte en profundidad la crisis de los cuidados”, así como “la devolución íntegra de los rescates a la banca, un ingreso incondicional y suficiente para todas las personas y unas pensiones dignas y blindadas en la Constitución”.

En definitiva, la Plataforma Plan de Choque Social de León aborda “muchos aspectos” y lo pretende hacer “enfocados a mejorar las condiciones de vida de las clases más precarizadas” para lo que “será participado por el conjunto de la población a través de asociaciones y barrios”, para que tenga “un recorrido mayor” y permita “llegar a propuestas mucho más arraigadas”.