La Audiencia de Valladolid vuelve a absolver al policía nacional acusado de mentir en un juicio

La Audiencia de Valladolid ha vuelto a dictar sentencia absolutoria, y va la segunda, en el caso del policía nacional que había sido acusado de acusar falsamente en un juicio a una persona de propinarle un pisotón en un pie durante una carga ocurrida cuatro años antes ante las puertas del restaurante La Parrilla de San Lorenzo donde compartían mesa y mantel líderes del PP tras una convención nacional celebrada en la ciudad.

Frente a las peticiones de condena de un año y nueve meses y tres años de cárcel, respectivamente, formuladas por las acusaciones pública y particular, la Audiencia Provincial ha vuelto a absolver al funcionario al considerar no acreditado que Ángel Luis G.M. faltara a la verdad por cuanto consta un parte médico aportado por el encausado en el que se constata que sufrió una lesión en el pie derecho tras ser asistido en el hospital unas horas después de los incidentes, según informan fuentes del Gabinete de Prensa del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.

Contra la presente resolución cabe interponer recurso de apelación ante la Sala de lo Civil y Penal del Alto Tribunal castellanoleonés.

El que era subinspector cuando ocurrieron los hechos, ha sido juzgado en dos ocasiones por la Audiencia Provincial, ya que en el primer juicio celebrado en diciembre de 2019 por la Sección Segunda de lo Penal quedó también absuelto del delito de falso testimonio en una sentencia luego anulada por el Tribunal Superior de Justifica al objeto de que volviera a celebrarse nueva vista por una sala compuesta por nuevos magistrados.

La causa contra el funcionario trataba de dilucidar si cuando en abril de 2018 declaró en el Juzgado de lo Penal 3, donde se celebró juicio por atentado y lesiones contra tres manifestantes--fueron absueltos y se abrieron actuaciones contra el agente por falso testimonio--, mintió al asegurar que uno de los encausados, Juan H.B, le propinó un pisotón en su pie derecho que justificó la detención del supuesto agresor.

En su nueva comparecencia, el policía, en declaraciones recogidas por Europa Press, sostuvo que sí sufrió el pisotó, algo que ahora el tribunal vuelve a dar por sentado, y que el mismo no se produjo al aproximarse a la pancarta donde se hallaban los manifestantes y su supuesto agresor sino en el momento en el que condujo a Jesús H.B. hasta un lugar apartado para, únicamente, proponerle para sanción administrativa debido a los insultos y amenazas que estaba profiriendo.

Aunque en su día también negó haber golpeado al manifestante, frente al vídeo en el que se cómo le acomete por la espalda con su porra y luego, ya en el suelo, le propina más golpes con su defensa, el agente achacó a los nervios y tensión del primer juicio el motivo por el cual sostuvo que el pisotón se produjo al "acercarse" a Jesús H.B. y luego matizara que tal agresión se registró en una zona de seguridad, junto a los furgones, a la que condujo al citado individuo para identificarle y proponerle para sanción.

"Siento que en ningún vídeo se vea ese pisotón, pero las pruebas de que existió están en el testimonio de mi compañero y jefe de grupo, al que di cuenta de ello, mi declaración, el parte médico y el informe del médico forense que acreditan la fisura que sufrí en el dedo gordo de mi pie derecho", resumió el funcionario, quien también apostilló que el agente que aparece en un vídeo golpeando con la porra al manifestante antes de la detención "pudiera" ser él, algo que en su momento no reconoció debido a su "similar corpulencia" con otros compañeros de grupo.

Por su parte, el citado Jesús H.B, personado como acusador particular, volvió a relatar, al igual que hiciera en el primer juicio en el mismo escenario, que el día de los hechos participaba en la concentración ante las puertas de La Parrilla de San Lorenzo y que estaba únicamente tratando de grabar con su teléfono móvil, hasta que en un momento dado el policía encausado le agredió brutalmente por la espalda y cayó al suelo "como un sapito, como saco de patatas" y que, mientras yacía "aturdido" boca abajo, siguió recibiendo porrazos pese a los intentos de otras personas de auxiliarle.

Aseguró que el acusado le cogió por el cuello del abrigo, le metió la porra en los riñones y le llevó hasta el furgón mientras me iba diciendo: "¡Ya estás calentito, te vas a enterar, hijo de puta, terrorista, salvapatrias!", al tiempo que en el trayecto le arreó un porrazo en la mano y le destrozó el móvil que llevaba en ella. Luego, mantiene que le metió en el furgón y que a otro agente que había dentro le dijo: "¡Ponle los grilletes y si se mueve, crújele!".

Tenía "fijación" 

El testigo sí volvió también a asegurar que en ningún momento pisó al funcionario policial, de quien asegura que le tenía "fijación" porque ambos habían coincidido anteriormente en otras movilizaciones en las que el declarante participaba como integrante del movimiento antidesahucios.

Otros de los testigos, entre ellos un periodista de Último Cero que cubría aquel día la movilización, corroboraron la versión de Jesús H.B, mientras que el jefe de grupo al mando del operativo policial aseguró que no vio el pisotón pero sí que del mismo fue informado por el subinspector, de ahí entre ambos decidieran proceder a la detención del supuesto agresor.

Concluidas las testificales y la reproducción de vídeos y fotografías sobre lo acontecido el día de los hechos, las distintas partes mantuvieron invariables sus posturas.