Acaip-UGT denuncia que dos tercios del personal de la cárcel de Topas se han quedado hoy sin vacuna
El sindicato Asaip-UGT denunció este lunes que dos tercios del funcionariado de la prisión de Topas (Salamanca) no fue vacunado hoy. Según la organización sindical, el 64 por ciento de los empleados no recibió ninguna dosis de AstraZeneca por no pertenecer al colectivo de menores de 55 años sin patologías contraindicadas para su administración, quienes sí la recibieron.
El secretario general del sindicato Acaip-UGT, Jesús Crego, recordó que los trabajadores de Instituciones Penitenciarias, y del centro penitenciario de Topas en especial, son un colectivo con una edad media “muy elevada”. De hecho, aclaró que la media de edad de los trabajadores de Topas está situada en los 55,77 años. “El envejecimiento de la plantilla es un factor muy preocupante y, como consecuencia de ello, más de dos tercios de los efectivos han quedado hoy fuera de la vacunación y deberán esperar a su grupo de edad o condición de riesgo”, explicó.
Acaip-UGT destacó que, sin embargo, el servicio público penitenciario está siendo “un ejemplo de buen hacer, implicación del personal y funcionamiento intachable a lo largo de toda la pandemia”, por lo que tachó de “inasumible” que parte de sus trabajadores no puedan acceder a las vacunas. Un hecho que, según manifestó el sindicato, “va a incidir directamente en la protección del servicio esencial que realizan, y no se va a alcanzar el objetivo de la estrategia de vacunación”. De hecho, para Crego serán “graves e insalvables” los inconvenientes que conlleva la decisión de no vacunar al 64 por ciento del colectivo de trabajadores del centro penitenciario de Topas.
Por esta razón, Acaip-UGT insistió en la necesidad de ofrecer una alternativa de vacunación a los trabajadores penitenciarios de más de 55 años, recordando que "el Centro Penitenciario de Topas es uno de los centros con la media de edad de sus trabajadores más elevada de toda España". Para el secretario general del sindicato, es necesario vacunar a todos los trabajadores del centro de manera simultánea y "es una pena que tras los esfuerzos realizados por todos, incluido el equipo directivo del centro, el Ministerio de Sanidad no haya establecido una estrategia de vacunación que no deje a ningún trabajador de Instituciones Penitenciarias fuera de la inmunización”.
Acaip-UGT insistió en este sentido en que “la entrada del COVID-19 en el centro puede originar, no solo una crisis sanitaria, sino también alterar la normal convivencia del mismo, ya que es un recinto cerrado donde la propagación del virus ,en un momento dado, puede llegar a ser mucho más rápida”. Crego señaló, por último, que “en Topas hay muchos internos con patologías previas y vulnerables a la enfermedad, así como una plantilla muy envejecida, por lo que se hace necesario la inmunización de todos los trabajadores y adoptar una serie de medidas preventivas”.