Los vallisoletanos José Manuel Serrano y Juan Pérez Marciel, en el bolsín clasificatorio para el Circuito de Novilladas de Castilla y León
El Circuito de Novilladas de Castilla y León, inscrito de la Liga Nacional de Novilladas creada por la Fundación del Toro de Lidia, dará comienzo la próxima semana con el bolsín clasificatorio en el que intervendrán los novilleros vallisoletanos José Manuel Serrano y Juan Pérez Marciel.
La próxima semana dará comienzo la celebración del II Circuito de Novilladas de Castilla y León con el bolsín clasificatorio en el que participarán José Manuel Serrano y Juan Pérez Marciel como representantes de la provincia de Valladolid. Los pucelanos disputarán, frente a otros 8 novilleros de las provincias de Salamanca, Ávila y Segovia, las últimas dos plazas disponibles en el Circuito de Novilladas de Castilla y León.
Este Circuito, que este año llega a su segunda edición gracias al éxito obtenido el año pasado, cuando se colgó el cartel de 'no hay billetes' en 6 de las 7 novilladas sin picadores con público que se llevaron a cabo, contará esta vez con 8 novilladas picadas en plazas de las distintas provincias castellanoleonesas, en las que torearán los 9 aspirantes con más proyección de la región, en formato de competencia directa y ante utreros de hasta 18 diferentes hierros de esta Comunidad Autónoma.
La FTL anunciará en los próximos días las fechas y plazas en las que se celebrará el Circuito de Novilladas, así como los hierros elegidos y los nombres de los otros 7 novilleros participantes, 4 de ellos han accedido por méritos propios o intercambios con otros Circuitos y los 3 restantes son los primeros de una puntuación realizada con el asesoramiento de la Unión de Toreros entre los novilleros inscritos.
Con este bolsín dará comienzo la Liga Nacional de Novilladas, proyecto bandera de la Fundación del Toro de Lidia, que integra los diferentes Circuitos de Novilladas y que, en Andalucía, se realiza con el apoyo de Junta de Castilla y León y parte de los fondos de la Gira de Reconstrucción, con el que se pretende estimular la base del toreo en los lugares donde se estaba perdiendo la actividad taurina, con el objetivo de cimentar las bases de un futuro más sólido para la tauromaquia.