Semana Santa en Castilla y León: estas son las dos únicas prohibiciones que habrá que cumplir

La cuenta atrás ha comenzado para la Semana Santa. Y aunque el presidente en funciones de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, ya adelantó en plena campaña electoral que volvería a las calles, es cierto que todavía sigue habiendo muchas dudas sobre su celebración. 

Así, el delegado territorial de la Junta en funciones, Augusto Cobos, ha presidido hoy la reunión presencial del CECOPI, Centro de Coordinación de Operativa Integrado a nivel provincial, con los alcaldes de los municipios de más de 2.000 habitantes de la provincia, en la que les ha informado sobre la actual situación sanitaria por la pandemia, la evolución del proceso de vacunación y las medidas a tener en cuenta en la celebración de eventos como la Semana Santa. En la reunión participó también el subdelegado del Gobierno, Emilio Álvarez.

Augusto Cobos ha trasladado a los alcaldes la información que se ha dado a las Junta de Semana Santa sobre las recomendaciones y prohibiciones en relación con el desarrollo de los actos procesionales. En este sentido, se mantienen dos prohibiciones: la asistencia de personas que hayan tenido una prueba positiva en los últimos 7 días y aquellas expresiones culturales o religiosas que impliquen el contacto físico con objetos e imágenes, como besapiés y besamanos.

Calles anchas

Igualmente se recomienda que los recorridos procesionales, en la medida de lo posible, vayan por calles anchas en vez de calles muy estrechas para evitar aglomeraciones de público. Informó también del ofrecimiento de la Consejería de Sanidad a las juntas de cofradías de poder hacer cribados o pruebas de antígenos tanto a los integrantes de las bandas de viento como a las personas que van a portar las imágenes.

Por último, el delegado territorial en funciones avanzó a los alcaldes que se está estudiando la posibilidad de extender las autocitas para la vacunación de las personas aún no vacunadas o con algunas dosis pendiente, a otros puntos de la provincia diferentes a los ahora establecidos en dos centros de salud de la capital.