El tránsito de Mercurio delante del Sol se ha vivido de forme muy intensa en el Observatorio de Izaña en el Teide (Tenerife), uno de los lugares más privilegiados para observar este fenómeno astronómico que, entre otros datos, arrojará pistas valiosas para investigar la atmósfera del planeta más cercano al astro rey.
Muchos de los investigadores del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) llevaban horas despiertos preparando el seguimiento del tránsito de Mercurio, un acontecimiento poco frecuente que ofrece la oportunidad de realizar mediciones directas del planeta. En el Telescopio Solar GREGOR, dos equipos de investigadores se preparaban para obtener todos los datos posibles durante las ocho horas que durará el fenómeno.
En el quinto piso del observatorio solar se encuentra instalado el equipo de investigadores alemanes, que además suele dormir en el propio telescopio para aprovechar todas las horas posibles de observación.
Dos pisos más abajo, los investigadores españoles seguían el tránsito con un doble objetivo. Por un lado, es un momento perfecto para calibrar sus instrumentos ópticos aprovechando el paso de un objeto tan pequeño frente a la esfera solar.
En una pantalla gigante el Sol aparece como una gigante bola de 1,2 metros, mientras que a esa escala, Mercurio tan solo mide 8 milímetros. Es la ocasión idónea para calibrar los telescopios hasta conseguir el enfoque perfecto.
Además Mercurio apenas tiene atmósfera y su proximidad al Sol hace que sus átomos escapen rápidamente al espacio. Así, el momento es idóneo para estudiar su composición y fijarse especialmente en elementos que se creen mayoritarios, como el sodio o el potasio.
Analizar la finísima atmósfera de Mercurio servirá para aplicar esas técnicas al estudio de exoplanetas que se descubren mediante tránsitos. Uno de los métodos utilizados para descubrir exoplanetas es precisamente el de detectarlos mientras pasan en tránsito frente a su estrella.
El espectro se recoge por los telescopios en la Tierra y los investigadores deberán ser capaces de diferenciar la luz procedente de la estrella y los componentes que provienen del planeta.
Esta jornada representa el primer intento serio de analizar la composición de la atmósfera de un planeta mientras cruza en tránsito su estrella. Si los astrofísicos consiguen diferenciar en el espectro la composición de una atmósfera tan tenue como la de Mercurio, el siguiente paso serán exoplanetas a años luz de nosotros.
Un viaje completo
Durante prácticamente todo el día, entre las 12:12h y las 19:42h en Canarias -una hora más tarde en la península y Baleares-, Mercurio cruzó a contraluz el disco solar. Desde Tenerife, la primera imagen de la entrada del planeta en tránsito tuvo lugar exactamente al ahora prevista, y tenía este aspecto:
El acontecimiento se pujdo seguir en directo gracias al trabajo del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC). A través de su canal en YouTube, cualquiera pujdo seguir en vivo las observaciones que realizaron los profesionales desde las torres solares localizadas en los Observatorios del Teide, en la isla de Tenerife, y del Roque de Los Muchachos, en la isla de La Palma.
Se trata de parte del proyecto STARS4ALL -integrado por distintos institutos y organizaciones europeas-, que también emitió su cobertura a través del portal sky-live.tv.
Para el responsable de la retransmisión, el astrónomo del IAC Miquel Serra-Ricart, "el tránsito de Mercurio es una buena ocasión para organizar actividades educativas en los centros de enseñanza". "Es un fenómeno sencillo de observar pero gobernado por leyes fundamentales de la Física", añade, en declaraciones a EFE.
Sobre el terreno, cerca de los observatorios canarios, varias personas acudieron con sus propios telescopios para poder observar el fenómeno. Poco antes, los tuvieron que poner a punto: en algunos se usaron filtros de hidrógeno alfa y seguían la trayectoria del Sol automáticamente, haciendo 100 fotos cada minuto.
Fenómeno poco frecuente
Este fenómeno -la observación del planeta más cercano al Sol en su tránsito y a contraluz, por la alineación con nuestro planeta- es muy poco frecuente: se da unas 13 veces por siglo en el caso de Mercurio. Las próximas ocasiones serán en 2019 y 2032.
Aunque visible desde toda España en su totalidad, resultó imposible su observación sin la utilización de un telescopio debido al pequeño tamaño del planeta.
Mercurio es el planeta más pequeño del Sistema Solar y el más cercano nuestra estrella. Tiene la órbita más rápida y excéntrica de todos.