La serie Tiempos de Guerra, de Antena 3, cuenta cómo a comienzos de los años 20 del siglo pasado las tropas españolas luchaban en el norte de Marruecos contra los rebeldes rifeños y un grupo de enfermeras de la Cruz Roja trataban de socorrer a los soldados.
En ese escenario se movía un héroe tan olvidado como ellas, el médico militar Fidel Pagés Miravé. Su experiencia como voluntario en un campo de prisioneros de Viena en la Primera Guerra Mundial se habría de quedar corta ante episodios como el Desastre de Annual, en verano de 1921. Esperar a que los heridos llegasen al hospital de campaña era condenar a la muerte a muchos de ellos, así que cuentan que diseñó una unidad móvil para actuar en las primeras líneas de fuego.
No sabemos cuántas vidas pudo salvar este cirujano nacido en Huesca en 1886 y formado en la Universidad de Zaragoza, pero es seguro que muchos soldados se beneficiaron de una técnica que él mismo desarrolló con el nombre de "anestesia metamérica" y que no es otra cosa que lo que hoy llamamos anestesia epidural, que elimina el dolor en la mitad inferior del cuerpo y es conocida sobre todo por aplicarse en los partos. Consiste en introducir un anestésico local entre dos vértebras de la zona lumbar, de manera que se bloquean las transmisiones nerviosas de la médula espinal.
Cuando estaba a punto de ser enviado a Melilla, la Revista Española de Cirugía publicó un artículo llamado Anestesia metamérica en el que Fidel Pagés describe minuciosamente cómo meses antes había realizado una operación con la novedosa práctica. "El resultado de este intento nos animó a seguir estudiando este método, al que en la clínica denominamos de anestesia metamérica, por la posibilidad que nos proporciona de privar de sensibilidad a un segmento del cuerpo", explicó en ese texto, según recoge Alejandro Polanco en el libro Made in Spain.
Trágico final
Al parecer había repetido con éxito el procedimiento en más de 40 operaciones y la descripción que hacía era tan minuciosa que cualquier otro médico podía replicarla. No obstante, la difusión de la idea fue muy limitada, probablemente porque sus artículos no fueron traducidos a otros idiomas y su vida no iba a durar mucho más. El 21 de septiembre de 1923, con 36 años, un accidente de tráfico acabó con su vida y casi acaba con la técnica que había desarrollado.
Sin embargo, no fue así, aunque la pista documental se pierde hasta casi una década más tarde. El italiano Achilles Dogliotti presentó en un congreso internacional celebrado en Madrid en 1932 un procedimiento de anestesia epidural y se llevó todos los aplausos hasta que Alberto Gutiérrez, cirujano argentino, le acusó de haberse apropiado del trabajo de Pagés. Según explicó, él mismo venía aplicando esta técnica desde hacía tres años, así que su colega italiano no merecía reconocimiento alguno. Finalmente, Dogliotti acabó por reconocer el plagio.
En la ficción
¿Se han olvidado en Tiempos de Guerra de un personaje tan singular como Fidel Pagés? En realidad no, pero la ficción es la ficción, así que los guionistas han construido un personaje llamado Fidel Calderón que es una mezcla de dos personajes históricos, el descubridor de la anestesia epidural y Mariano Gómez Ulla, que también participó en las batallas africanas y se involucró al máximo en la atención a los heridos en el frente con su idea de llevar hospitales transportables a lomos de mulos.