A día de hoy se sabe que la obesidad, y concretamente el exceso de grasa corporal, tiene diversos efectos dañinos sobre el organismo humano. Desde aumentar el riesgo de sufrir hipertensión o diabetes mellitus, hasta ser un factor de riesgo por sí misma para desencadenar eventos cardio y cerebrovasculares como los infartos de corazón o los accidentes cerebrovasculares o ictus.
Sin embargo, estas no son las únicas consecuencias perjudiciales de poseer un exceso de grasa corporal. Ahora, un nuevo trabajo publicado en la revista Radiology ha corroborado, una vez más, que existe una correlación entre la obesidad y una disminución del volumen cerebral. O lo que es lo mismo: a mayor cantidad de grasa, menor tamaño de cerebro.
Más grasa, menos cerebro
Según el equipo de investigadores del Centro Médico de la Universidad de Leiden, en los Países Bajos, existirían cambios tanto en la materia gris como en la materia blanca cerebral cuando existe un exceso de grasa corporal. La materia gris es el tejido cerebral compuesto por las neuronas o células nerviosas, las cuales se agrupan para conformar las diferentes áreas cerebrales. Por su parte, la materia blanca sería la sustancia formada por las fibras nerviosas, las cuales sirven para intercomunicar las diferentes áreas cerebrales.
En este caso, los investigadores responsables del estudio analizaron las exploraciones cerebrales y encontraron que el exceso de grasa corporal se relacionaba con un menor volumen en determinadas áreas cerebrales, sobre todo en el caso de los hombres respecto a las mujeres.
Cabe destacar que este no es el primer trabajo que relaciona la obesidad con los cambios en el cerebro, dado que en anteriores trabajos ya se habría encontrado algún vínculo entre la obesidad y algunas enfermedades cerebrales o neurodegenerativas, como las demencias.
Además, por otro lado, también cabe destacar que el nuevo trabajo tan solo ha encontrado una correlación entre grasa corporal y volumen cerebral, pero no ha demostrado una causa-efecto; es decir, no ha sido posible determinar que una mayor cantidad de grasa corporal cause una disminución del volumen cerebral de forma directa.
La influencia de la obesidad en el cerebro
En anteriores trabajos ya se había vislumbrado cierta relación entre la obesidad y una disminución del volumen cerebral, incluyendo cambios en la materia blanda. Sin embargo, dichos estudios eran pequeños y usaban medidas indirectas en cuanto a grasa corporal se refiere, como es el caso del IMC o índice de masa corporal, que tan solo tiene en cuenta el peso y la altura, sin tener en cuenta porcentajes de grasa o de masa magra, pudiendo dar como "sobrepeso" a un individuo con más materia muscular.
Por ejemplo, en enero de 2019, otro estudio detectó relaciones entre la grasa abdominal y menores volúmenes de materia cerebral. Pero, de nuevo, se usó una medida indirecta para la grasa. Se tuvo en cuenta la relación cintura-cadera, y no el porcentaje de grasa corporal como tal.
En el nuevo trabajo, los investigadores analizaron información de 12.087 individuos que residían en Reino Unido, con una edad media de 62 años. Todos ellos se sometieron a una resonancia magnética para evaluar la estructura de su materia gris y blanca cerebral. Además, se midió su grasa corporal usando el método de impedancia bioelétrica, el cual estima el porcentaje de grasa corporal enviando pequeñas corrientes eléctricas a través del cuerpo para elaborar una estimación.
Según sus resultados, en el caso de los hombres, los niveles de mayor grasa corporal se relacionaban con un menor volumen de materia gris, sobre todo en las zonas centrales del cerebro, donde se incluyen áreas como el tálamo, el núcleo caudado, el hipocampo, el globo pálido, el núcleo putamen o el núcleo accumbens. Algunas de estas áreas se sabe que están implicadas en el circuito de recompensa cerebral, y otras ayudan a regular los movimientos del cuerpo humano.
En el caso de las mujeres, solo se encontró un menor volumen del globo pálido respecto al exceso de grasa corporal.
Aún así, no está clara la relación entre grasa corporal y volumen cerebral, y por qué afecta de forma diferente a hombres y mujeres. Por el momento, los investigadores hipotetizan sobre el hecho de que un exceso de grasa corporal aumente el ambiente inflamatorio a nivel corporal, algo que a su vez dañaría el tejido cerebral. Pero, además, cabe tener en cuenta que el estudio se realizó en un momento muy puntual y no hubo un seguimiento de los participantes a lo largo de los años, por lo que no es posible saber si es la obesidad y el exceso de grasa corporal la causa del menor volumen cerebral, o al revés.
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