Los ñames, de la familia de las dioscoreáceas, son un tipo de tubérculo típico de Asia, África y el Caribe. A menudo se confunden con el boniato o batata, pero tienen un sabor menos dulce y son más ricos en almidón, aunque son una fuente de carbohidratos muy similar a estos y otros tubérculos, como las patatas o las yucas.
Su color en el exterior es tirando a marrón, pero su interior es blanquecino, amarillento, morado o incluso rosado según su grado de madurez.
Además, son muy nutritivos, y tienen algunas características destacables e interesantes desde el punto de vista alimenticio y también de la salud en general.
Vitaminas, minerales y fibra
Con una ración de ñames de apenas 130 g se consumen alrededor de 150 kcal, de las cuales 37 g son carbohidratos, 2 gramos son proteínas y hasta 5 g son fibra. Así mismo, destaca su contenido en Vitamina C, Manganeso, Potasio, Cobre y vitaminas del grupo B, como la vitamina B5, la vitamina B9 o ácido fólico y la vitamina B1 o tiamina.
Entre todos estos micronutrientes destacan especialmente el potasio y el manganeso, pues una ración de ñames contiene alrededor de un 20% de las necesidades diarias de ambos micronutrientes, importantes y necesarios para mantener una correcta salud ósea y cardiovascular.
Mejoras en la función cerebral
Como curiosidad, en un estudio llevado a cabo durante 12 semanas, aquellos individuos que tomaron un suplemento extra de ñames obtuvieron puntuaciones significativamente más altas en pruebas de función cerebral que el grupo placebo. Esto podría deberse a la diosgenina, un compuesto que poseen los ñames, y que parece mejorar tanto el crecimiento neuronal como la memoria y algunas habilidades de aprendizaje, aunque se necesita más investigación al respecto.
Mejoras en la menopausia
Los ñames también podrían ayudar a aliviar algunos síntomas de la menopausia, según algunos trabajos. Por ejemplo, hubo un estudio realizado en 24 mujeres posmenopáusicas durante 30 días donde se sustituyó el arroz por ñames en 2 de las 3 comidas principales, es decir, unos 390 g de ñames diarios. Al finalizar el estudio, sus niveles de estrona y estradiol habían aumentado un 26% y 27% respectivamente.
Estas hormonas suelen disminuir en la menopausia, y aumentar los niveles de estrógenos puede aliviar los síntomas de la menopausia, aunque actualmente suele evitarse dar tratamiento hormonal sustitutivo con este objetivo.
Sin embargo, otro trabajo de seis meses de duración probó una crema de ñame con el objetivo de reducir el enrojecimiento y la sudoración nocturna, o sofocos, sin demasiado éxito.
Propiedades contra el cáncer
Como sucede con cualquier otro alimento, las propiedades anticancerígenas del ñame deben tomarse con precaución. Por el momento se sabe que posee algunos compuestos antioxidantes con propiedades contra esta compleja enfermedad.
En estudios realizados en animales, una dieta rica en ñames redujo el crecimiento de tumores de colon, y los antioxidantes del ñame habrían sido los causantes de este efecto. Por su parte, en estudios de laboratorio, los extractos de ñame fueron capaces de inhibir el crecimiento de tumores de hígado y piel; sin embargo, este efecto sería similar al demostrado recientemente con el gazpacho español, y evidentemente precisará mucha más investigación al respecto.
Propiedades antiinflamatorias
Los antioxidantes del ñame, por su parte, también habrían demostrado potencial antiinflamatorio. De hecho, se sabe que la inflamación crónica se relaciona con un mayor riesgo de sufrir determinadas enfermedades cardíacas, diabetes y obesidad.
En estudios en animales, el polvo de ñame habría demostrado reducir la inflamación relacionada con estas enfermedades, incluyendo otras patologías como algunos tipos de cáncer o el síndrome de colon irritable. Pero, una vez más, sería recomendable continuar realizando estudios al respecto.
Mejoras en el control glucémico
Por otro lado, el ñame podría ayudar a controlar los niveles de azúcar sanguíneo o glucosa. En estudios realizados en ratas, el polvo de ñame logró reducir los niveles de azúcar o glucosa en ayunas, además de la hemoglobina glicosilada o HbA1c, un parámetro que se usa para controlar el azúcar sanguíneo a largo plazo
En otro trabajo, también realizado en ratas, aquellos roedores que recibieron mayores cantidades de extracto de ñame púrpura lograban reducir su apetito, además de experimentar una mayor pérdida de peso y mejoras del control glucémico, en comparación al grupo control.
Finalmente, otro trabajo realizado en ratas demostró que la suplementación con harina de ñame reduciría la absorción de azúcar en sangre, lo que conduciría a un mejor control glucémico. De hecho, algunas medicaciones para la diabetes mellitus se basan en este mecanismo de acción, aunque en el caso del ñame el almidón resistente y la fibra serían los responsables de dicho control.
Salud digestiva, pérdida de peso y mejoras metabólicas
Los ñames tienen otros beneficios, aunque muchos de ellos solo detectados en animales por el momento.
Por ejemplo, un estudio sugirió que el almidón resistente del ñame aumentaría las enzimas digestivas, ayudando así a descomponer mejor los alimentos y aumentando la cantidad de bacterias beneficiosas para el organismo.
Por otro lado, otro trabajo sugirió que el extracto de ñame tendría efectos saciantes, por lo que podría reducir el apetito y mejorar la pérdida de peso, algo en lo cual también colaboraría la fibra. Las patatas, yucas, boniatos y los túberculos en general suelen poseer un efecto similar.
Por su parte, aunque se desconoce exactamente cómo se produciría este efecto, se observó que el extracto de ñame puede proteger contra ciertas bacterias resistentes a los antibióticos.
Finalmente, en cuanto al metabolismo se refiere, un estudio realizado en mujeres durante 30 días, las cuales consumieron alrededor de 390 g de ñame diarios, lograron reducir alrededor de un 6% de sus niveles de colesterol en sangre. Parece un porcentaje escaso, pero dependiendo de los niveles puede ser un logro significativo.