Gemma del Caño y Marián García (o Boticaria García, como prefieran) lo han vuelto a hacer. Un año más se han perfilado como la pareja de divulgadoras en materia de Nutrición más dinámicas. El año pasado sorprendieron al público del evento Naukas, que da cita a un gran número de divulgadores científicos de España, con una ponencia bastante poco convencional en la que explicaron toda la verdad sobre los componentes del sándwich mixto.
"El jamón de York no existe", gritaron a la audiencia en una sesión en la que, además, hubo números musicales y disfraces. Pues bien, este año el alimento sobre el que giró toda su ponencia fue el huevo. Sobre este producto se ha generado mucho alarmismo: si se consumía, no debía de ser más de tres veces por semana. ¿Por qué? Antes se pensaba que el consumo de huevos subía los niveles de colesterol.
Ahora, sin embargo, las cosas han cambiado: la evidencia científica ha demostrado que los huevos son saludables. De hecho, algunos estudios han concluido que la ingesta habitual de huevo previene la enfermedad cardiovascular y, en concreto, el derrame cerebral. De todas formas, los huevos no son un alimento desconocido para nosotros. Se utiliza en muchas elaboraciones. Pero, ¿realmente sabemos cómo comprar los mejores o cómo cocinarlos bien?
"Eurovisión de los huevos"
Del Caño y García pensaron para este año recrear una falsa gala de Eurovisión en la que España, por fin, obtuviera algún reconocimiento. La única condición de este nuevo certamen fue que las letras de las canciones participantes debían tener como protagonista al huevo. El nombre del concurso ficticio, por tanto, no podía ser otro que "Eurovisión de los huevos". ¿Cómo empezó esta idea tan loca? Pues con la típica conversación entre amigas bebiendo cerveza (0,0, por supuesto) en la que se discute cuál sería el mejor método para ganar el concurso internacional.
La raro es que ninguna salió con eso de "tenemos que sacar algo de flamenco". Las divulgadoras sugirieron alterar algunas de las canciones más icónicas con las que España no consiguió alcanzar la gloria. Las han querido mejorar "echándole huevos". Es decir, cambiando la letra para incorporar incorporar un mensaje sobre el consumo de este producto. Las canciones elegidas fueron Baila el chiki chiki, de Rodolfo Chikilicuatre, Bailar pegados, de Sergio Dalma, y Tus ojos bandidos, de Azúcar Moreno.
Pero claro, la reversión del tema del Chikilicuatre fue llamada Chicken, chicken (pollo, pollo), contó con una de las divulgadoras caracterizada como el personaje del tupé y otra vestida de pollo. La canción explicaba cómo se debe leer el código que aparece impreso en la cáscara para saber qué tipo de huevo es. Si la ristra de números empieza por "cero, es el ecológico; uno, el campero; dos, el de las naves; tres, el enjaulado". Las expertas remarcan que, a pesar de que nutricionalmente todos esos huevos son iguales, las condiciones de la gallina ponedora son diferentes.
Sergio Dalma y Azúcar Moreno
La nueva interpretación de Bailar pegados se tituló Cuajar o no cuajar. El tema de la canción no es otro que: "la temperatura óptima de cocción del huevo para evitar toxiinfecciones alimentarias como la salmonela o la listeria", dice del tirón del Caño. Y es que cuajar o no cuajar el huevo "no es cuestión de gusto sólo". Por esta razón, aconsejan cocinar siempre este alimento a 70 grados por lo menos o que los bares utilicen huevina como sustituto para ahorrarte una "cagarrina". El último redoble dice así: "Hay que cuajar". Por si quedaban dudas.
Por último, el dúo de científicas concluyó su espectáculo versionando a las Azúcar Moreno. Del Caño y García esperaban que, con su actuación, las míticas hermanas se reconciliaran y volvieran juntas a los escenarios. Sin embargo, los rifirrafes entre las Azúcar Moreno se solucionaron hace años y este mismo mes de junio JALEOS asistió a uno de sus conciertos. Lo importante es la intención. De todas formas, el mensaje de las divulgadoras quedará grabado en la mente de quien lo escuche de la misma manera que lo hizo Sólo se vive una vez: "Nos hemos tragado muchos años el cuento de que el huevo aumenta el colesterol // son las grasas trans y algunas saturadas las que lo suben hasta el infinito".
Olé.