¿Cuáles son los mejores alimentos para reforzar el sistema inmunitario? La pregunta se repite estos días entre el común de los mortales. Los terribles consecuencias que está provocando el coronavirus ha hecho que muchas personas se preocupen (más aún) por sus hábitos alimenticios y por el papel que juega la dieta a la hora de protegernos contra enfermedades infecciosas como la Covid-19. ¿Ayuda el pescado azul al buen funcionamiento de nuestras defensas? ¿Y el jengibre? ¿Y qué pasa con los probióticos?
En teoría, es cierto que existen algunos alimentos cuyos nutrientes pueden ayudar a nuestras defensas. Siempre se habla de la vitamina C, la vitamina D, o el hierro, entre otros. Sin embargo, aumentar sobremanera su consumo durante una crisis sanitaria como ésta no va a prevenir la infección por ningún virus ni a combatirlo. Así lo indica un documento que acaban de publicar la Academia Española de Nutrición y Dietética y el Consejo General de Colegios Oficiales de Dietistas-Nutricionistas sobre Recomendaciones de alimentación y nutrición para la población española ante la crisis sanitaria del Covid-19.
"Aunque algunos nutrientes como el cobre, folatos, hierro, selenio, vitamina A, vitamina B12, vitamina B6, vitamina C, vitamina D y zinc contribuyen al normal funcionamiento del sistema inmunitario [...] es improbable que potenciar su consumo se asocie a un menor riesgo", se puede leer en la guía. "Por ello, no hay que fomentar su consumo para este fin", añade. Así lo confirma también el dietista-nutricionista Daniel Ursúa, mente pensante tras el blog y el canal de divulgación en Youtube Nutrihabits.
"Una buena alimentación y unos buenos hábitos de vida en general nos van a ayudar a tener un sistema inmunológico sano, pero no podemos hablar de alimentos específicos para este fin", explica Ursúa. ¿Y qué entendemos por buena alimentación? Una dieta saludable en la que predominen los alimentos de origen vegetal (frutas, verduras y hortalizas), ricos en antioxidantes y micronutrientes, y en la que se siga el patrón establecido en el Plato para Comer Saludable de Harvard. "Ahora mismo lo único que verdaderamente sirve (para evitar el contagio) es lavarse las manos y quedarse en casa", remacha Ursúa.
No es la primera vez que los distintos países del mundo se enfrentan a una epidemia provocada por un coronavirus. Ocurrió con el síndrome respiratorio agudo grave (SARS) y con el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS). En ambos casos, según señala el documento de la Academia Española de Nutrición y Dietética se estudió el papel de los alimentos en la prevención y el tratamiento. En ambos casos las conclusiones son las mismas:no existe evidencia.
"No se ha probado la eficacia del uso de ningún otro nutriente u otros compuestos llamados nutracéuticos, incluidos el ácido ferúlico, ácido lipoico, spirulina, N-Acetylcysteine, glucosamina, beta-glucanos o la baya de saúco para la prevención o tratamiento del Covid-19", advierte la guía. "Esta conclusión se mantiene incluso tras revisar con detenimiento un artículo de revisión sobre potenciales intervenciones dietéticas en coronavirus".
El nutricionismo
Ursúa también advierte de que no debemos consumir alimentos que destaquen exclusivamente por un solo nutriente, sino que debemos ver si el alimento es saludable en su conjunto. Si no, estaríamos cayendo en un concepto que los expertos llaman nutricionismo. "Ya sabéis, eso de: toma mucho calcio, que es bueno para los huesos, incorpora suficiente omega-3 a tu dieta porque es bueno para tu salud cardiovascular, si tomas vitamina C reforzarás tus defensas.. y todas esas cosas llevadas al extremo y por lo tanto descontextualizadas", ejemplifica el también dietista-nutricionista Juan Revenga en su blog.
"Si nos centramos en el consumo de zinc (por ejemplo) y nos venden un producto lácteo suplementado con este mineral, vamos a comprarlo pensando que es algo muy bueno para nuestra salud, pero estaremos olvidando el azúcar añadido que contiene", advierte el autor de Nutrihabits. "Pero, sobre todo, obviaremos otros alimentos mucho más baratos y saludables como las legumbres, que tienen más zinc y de mejor absorción", añade.
Uno de los ejemplos más sangrantes a este respecto es el del Actimel, ese falso yogur -también llamado por algunos como "sorbito de la inmortalidad"- que promete ayudar a tus defensas y que, en realidad, no lo hace. Muchas personas lo compran pensando que se trata de un alimento que favorece la lucha de nuestro organismo contra patógenos varios. En realidad, lo que estamos consumiendo es una leche fermentada, enriquecida con algunas vitaminas, y con una cantidad considerable de azúcar.
Así, conviene tener claro que, pese a que la alimentación juega un papel fundamental en nuestra salud, poco o nada puede hacer un determinado alimento o grupo de alimentos en este preciso momento para prevenir o curar una enfermedad como la Covid-19. Aunque, eso sí, nunca es tarde para adoptar hábitos saludables de vida que favorezcan nuestra salud en general y, por lo tanto, ahora sí, nos ayuden a prevenir todo tipo de enfermedades.