Los langostinos han pasado en poco tiempo en España de ser un alimento reservado para eventos puntuales, como la Navidad o las bodas, a estar presente en el día a día (no es raro que sirvan de cena cualquiera noche). En la popularización de este marisco han tenido que ver dos factores: la acuicultura y la técnica de congelado. Así, cada vez hay más marcas de langostinos congelados en los supermercados, pero no todas son de la misma calidad... es más, hay algunas que dejan bastante que desear.
Para poder elegir aquellos con la mejor relación calidad-precio, la Organización de Usuarios y Consumidores (OCU) ha analizado varias marcas que ofrecen la variedad más demandada en nuestro país: los langostinos cocidos, congelados, de cultivo y a la venta por cajas. Del estudio también se desprende cuál es el producto que además de ser de baja calidad, sale caro.
Para poder sacar esta conclusiones, además de realizar una degustación, se han medido diferentes factores: etiquetado del producto, defectos físicos de los langostinos, homogeneidad en tamaños, frescura, contenido en sal, aditivos, residuos (Contenido en sulfitos, antibióticos y cadmio) e higiene. Según la OCU, en general, el mayor problema que se han encontrado en el estudio es el exceso de sal, algo que más allá del paladar puede afectar a la salud. Algunas de las marcas analizadas, por cada ración de 100 gramos de langostinos, aportan cerca de 2 gramos de sal al organismo, o sea, casi la mitad de la cantidad diaria de sal (5 gramos) recomendada por la Organización Mundial de la Salud.
Como factor positivo, la OCU apunta que no se ha encontrado rastro de antibióticos ni de metales pesados, como el cadmio. No obstante, sí que contienen sulfitos, que según señala la organización de consumidores se usan para evitar la melanosis (las cabezas negras de los crustáceos).
Pues bien, tras el análisis de todos estos factores, los langostinos que salen peor parados en el análisis de la OCU son los cocidos y congelados de la marca Costasur. Se venden, por ejemplo, en las tiendas online de Carrefour o Alcampo. Se trata de un langostino blanco cocido congelado de la variedad Penaeus vannamei, originario de Nicaragua. Pero, ¿en qué fallan?
Según el citado estudio las variables en las que ha recibido una peor puntuación son: contenido en sal, aditivos y degustación. Tras sumar los puntos obtenidos en cada categoría, este producto es clasificado como de "mala calidad". En cuanto al precio, sale a 11,63 euros el kilo, mientras que el que obtiene la mejor relación calidad-precio, los langostinos Flete de Aldi, cuesta 8,74 euros el kilo.
El peligro del cadmio
Dicho esto, hay que tener cuidado y no pasarse al consumir este alimento en Navidad, sea de la marca que sea, por varios motivos. Por un lado, aunque según la OCU en los casos analizados no se ha encontrado rastro de cadmio, este metal pesado que se suele localizar en la cabeza de mariscos como los langostinos o las gambas. Por eso, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan) recomienda que se evite chupar las cabezas. Si se ingiere el cadmio, que tiende a acumularse en el organismo de 10 a 30 años, sobre todo en el hígado y riñón, puede causar disfunción renal, desmineralización de los huesos, fallo renal o incluso cáncer.
Pero hay más motivos para no succionar la cabeza de estos mariscos: la mayor parte de su contenido en colesterol (que es alto) reside ahí. Por eso, si no se chupan, nos estaremos ahorrando gran parte.
En esta línea, no está demás recordar que si se consume mucho marisco se puede producir una subida de los niveles de ácido úrico en sangre o alergias y/o reacciones alimentarias. También que es importante que el marisco esté bien cocinado para evitar posibles intoxicaciones.
Pero no son todo malas noticias: los langostinos son fuente de proteínas y tienen poca grasa. También aportan una buena cantidad de minerales (yodo, fósforo, selenio, calcio, magnesio y zinc) y vitaminas B12 y B3, según señalan desde la Fundación Española de Nutrición (FEN). Por eso, como suele ser recurrente en Nutrición, disfruta de este alimento esta Navidad pero evitando los excesos.