El elixir de la eterna juventud no solo ha sido protagonista de multitud de películas en la pequeña y gran pantalla: ralentizar el envejecimiento biológico y ganar más años de vida con buena salud es una prioridad de la investigación biomédica. Países como España, con una población cada vez más envejecida, serían los principales beneficiados. Y cada vez son más los estudios que detectan alguna mejora, pequeña pero significativa, capaz de rejuvenecer el organismo humano.
Ese sería el caso del nuevo estudio publicado en la revista Aging, el cual apunta a que es posible reducir la edad biológica real hasta en tres años si se lleva a cabo una dieta y estilo de vida bien enfocados. Este concepto se refiere al envejecimiento real que ha sufrido nuestro organismo, y que puede corresponder o no a nuestra edad cronólogica: por así decirlo, si nos "conservamos bien" o no.
Si bien ya se sabía que la dieta y el estilo de vida son factores clave para mejorar la cantidad y calidad de vida, y reducir el riesgo de múltiples enfermedades, este sería el primer estudio que focalizaría su atención en un elemento particular: la metilación del ADN.
Por otra parte, también se sabe que el envejecimiento es el principal impulsor de diversas enfermedades crónicas, por lo que revertirlo, es decir, "rejuvenecer" a nivel biológico, también mejoraría la calidad de vida como consecuencia y alargaría a su vez la esperanza de vida.
Teniendo esto en cuenta, los investigadores del Instituto de Investigación Helfgott, junto al Laboratorio del Centro de Análisis del Genoma de la Universidad de Yale, llevaron a cabo un ensayo clínico controlado en 43 hombres sanos de entre 50 y 72 años. El programa duró apenas 8 semanas, incluyendo una guía de dieta, sueño, ejercicio, relajación, probióticos y fitonutrientes suplementarios.
El objetivo del programa, como clarifica la autora principal del trabajo Kara Fitzgerald, apuntaba directamente al mecanismo de metilación del ADN. Se trataría, en resumen, de una forma de medir los daños acumulados en el ADN a lo largo de los años, los cuales en última instancia dan medida de la edad biológica.
Rejuvenecer sin píldoras mágicas
En este caso, Fitzgerald destaca que su programa se centró en la dieta y el estilo de vida, sin usar fármacos como tal. Aunque, incide, será necesario ampliar la población de estudio en un futuro.
Entre los hábitos saludables, se incluyen una dieta basada en carnes magras, pescados y vegetales ricos en antioxidantes (carotenoides), limitando alimentos densos en proteínas como el huevo, restringiendo carbohidratos, y favoreciendo el ayuno intermitente. Además, realizaban 30 minutos diarios de ejercicio y se intentaba que durmiesen al menos siete horas cada noche.
Según sus conclusiones el grupo tratado llegó a "rejuvenecer" hasta tres años tras solo ocho semanas de dieta y mejoras el estilo de vida dirigidas al equilibrio de metilación del ADN.
Para llegar a tal conclusión, los investigadores analizaron la metilación del ADN o daños acumulados en el mismo mediante muestras de saliva y la prueba Illumina Methylation Epic Array. El cálculo de la edad biológica se realizó mediante el conocido como reloj Horvath DNAmAge.
Concretamente, el grupo que llevó a cabo el tratamiento con dieta y mejoras en el estilo de vida vio una mejora de hasta 3,23 años en su edad biológica en comparación al grupo control.
Los investigadores sugieren que la metilación del ADN a lo largo de los años tendría relación con el estrés acumulado de forma constante, lo que a su vez causaría un envejecimiento acelerado.
Asumen, además, que el calculo de la edad biológica mediante el reloj de Horvath es un factor a tener en cuenta para calcular el envejecimiento, por lo que el metiloma del ADN o el estudio de los daños acumulados en este debería ser clave en cualquier terapia que busque mejorar la salud y retrasar el envejecimiento.
Así pues, como conclusión, Fitzgerald y sus colegas sugieren que los estudios futuros descubrirán muchas otras formas de retrasar la edad biológica, incluso más allá del estudio de la metilación del ADN.