La nuez es uno de los frutos secos más completos que existen. son una fuente de alimento nutritiva repleta de grasas, proteínas y fibra beneficiosas. Si se consumen con moderación, las nueces pueden ser una adición saludable a la mayoría de las dietas. Sin embargo, es posible encontrarlas crudas o tostadas. Conocer las diferencias puede ayudar a escoger lo que sea mejor para la salud.
La realidad es que en algunas de sus características, las nueces crudas y tostadas son bastante similares. Ambos tipos contienen una cantidad similar de proteínas y carbohidratos. En cambio, las nueces crudas contienen más fibra, mientras que las nueces tostadas contienen más calorías y grasa en un solo gramo.
Sin embargo, las diferencias van más allá. Una de las principales diferencias entre estos dos tipos de nueces está en la elaboración, ya que las tostadas se suelen calentar en seco a través de un proceso de asado al horno o frito. Ambos métodos tienen como objetivo mejorar el sabor y la textura de las nueces. Aunque el resultado final presenta algunas diferencias. Por ejemplo, el método de calentamiento en seco es importante cuando se considera el contenido de grasa de diferentes frutos secos. El tostado aumenta el contenido graso y calórico de la mayoría de los frutos secos. Freír, en cambio, aumenta el contenido de ácidos grasos de las almendras, pero no altera el perfil de ácidos grasos de los pistachos o anacardos.
La revista Consumer señala que "los frutos secos -entre los que se encuentran las nueces- pueden consumirse crudos, tostados o fritos. En los dos últimos casos el calor reduce la posible carga microbiana, aunque no las micotoxinas (si llegaran a contaminarlos). Al tratarse de un alimento de bajo riesgo sanitario, no es necesario tomar precauciones especiales a la hora de manipularlo y cocinarlo, aunque sí las habituales medidas de higiene".
Sin embargo, en algunos países, como Estados Unidos, las nueces crudas peladas que se comercializan deben pasar por un proceso de pasteurización. En estos casos, se desinfectan las nueces mediante uno de dos métodos: vaporización o fumigación con el químico óxido de propileno (PPO). La mayoría de los grandes procesadores de frutos secos utilizan PPO para pasteurizar sus productos, a pesar de que, según informó el National Institute for Occupational Safety and Health (NIOSH), la PPO es un posible agente cancerígeno.
Nueces crudas vs tostadas
Al elegir entre nueces crudas y tostadas, una persona debe considerar los beneficios y desventajas de cada tipo. Vea algunos ejemplos a continuación.
Las ventajas de las nueces crudas con respecto a las tostadas o fritas son varias. Entre ellas, podemos destacar que conservan más de su nutrientes naturales, como antioxidantes y vitamina E; contienen menos calorías y menos grasa por gramo, contienen menos sodio y menos radicales libres dañinos.
Entre las desventajas, en cambio, encontramos que tienen menos sabor, aroma y son menos crujientes, o que contienen compuestos naturales que reducen su digestibilidad, lo que puede causar hinchazón y malestar estomacal.
Entre las ventajas de las nueces tostadas o fritas, podemos encontrar que son más fáciles de digerir o tienen un menor riesgo de exposición a bacterias dañinas, como Salmonella y E. coli. También hay mucha gente que considera que tienen un sabor mejorado y una experiencia sensorial general.
Como es lógico, cuenta con importantes desventajas con respecto a las nueves crudas. Por ejemplo, aportan un mayor riesgo de oxidación y exposición a radicales libres durante el almacenamiento, existencia de acrilamida cuando se consume en grandes cantidades, contienen trazas de acumulación de grasas trans, poseen un mayor contenido en sodio o por el proceso al que se ven sometidas, pierden contenido de agua y aumentan el contenido de grasa.
Con los datos que hemos visto, parece claro que las nueces crudas son más saludables. Sin embargo, si se consumen de forma moderado ambos tipos pueden formar parte de una dieta moderada y equilibrada. Sobre todo si de esta forma se evita consumir otros snacks menos saludables, como dulces con grandes cantidades de azúcares añadidos o productos ultraprocesados.