Una de cada cinco parejas en España tiene problemas de fertilidad. En concreto, la Sociedad Española de Fertilidad calcula que, en España, entre un 15% y un 20% de parejas en edad reproductiva (en torno a 800.000) tienen problemas para tener hijos. Las razones son varias, factores ambientales, malos hábitos como el tabaco, alteraciones hormonales o genéticas o la calidad del esperma.
Actualmente, existen muchos tratamientos de fertilidad distintos, pero teniendo en cuenta que uno de los motivos por los que la calidad del esperma no es suficiente, puede ser la alimentación, merece la pena centrarse en este aspecto y eliminar de la dieta aquellos alimentos que puedan estar alterándolo.
"La clave, como con otras muchas alteraciones del organismo, es tener una dieta equilibrada", afirma Yago Pérez, dietista especializado en el tratamiento de alergias, intolerancias, hipertensión y diabetes. "Poca gente come al día cinco raciones de fruta y de verdura. Además, abusar de las bebidas carbonatadas o la comida rápida, también puede afectar al esperma", añade el nutricionista.
La influencia positiva de una dieta equilibrada con una alta ingesta de pescado, pollo, frutas, legumbres, verduras y cereales integrales; frente al consumo de carne roja y procesada, pizza, granos refinados, bebidas carbonatadas y azúcar, en cuanto a la calidad del esperma, se constata en un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Harvard (EE.UU). La investigación concluye tener una dieta equilibrada puede ser una forma económica y segura de mejorar la calidad del semen.
Grasas y micronutrientes
En este sentido, el dietista-nutricionista Carlos Ríos —conocido en redes sociales por ser el creador del movimiento Realfooding— recoge un estudio en su perfil de Instagram en el que los investigadores observaron que el consumo de azúcar estaba muy relacionado con el aumento de azúcar en la dieta. Estudiaron una población de 15 hombres sanos de entre 20 y 27 años que no fumaban: la primera semana llevaron una dieta saludable y durante la segunda tomaron 375 gramos de azúcar diarios.
El semen de estos jóvenes se vio alterado en un corto período de tiempo y mostró "una extrema sensibilidad y cambios en la funcionalidad". El consumo frecuente de refrescos azúcarados, en este sentido, es uno de los factores relacionados con una peor calidad del semen. Pero no sólo eso: alimentos como los cereales azucarados, las galletas, la respostería, o los zumos industriales, todos ellos cargados de azúcares libres, también influyen negativamente en la calidad del esperma.
Ríos cita otro estudio en la misma publicación que sostiene que el consumo de nueces ha demostrado beneficios: un mayor recuento de espermatozoides y de motilidad total. Una de las razones es que las nueces contienen ácidos grasos omega-3, una sustancia "fundamental para la espermatogéneis", según este artículo de Alimente.
Por esta razón, otros alimentos que pueden mejorar la calidad del semen son los pescados azules e, incluso, el aceite de oliva. Pero, además, es importante que nuestra dieta se base en frutas y verduras que son muy ricas en micronutrientes antioxidantes, como la vitamina C de los pimientos y los cítricos o el licopeno de los tomates, y en proteínas saludables como los huevos y las legumbres que contienen vitaminas B9 y D.
Pesticidas y zinc
Pérez señala el zinc como uno de los componentes claves en la calidad del esperma, un mineral que no está presente en muchos alimentos. Algo que constatan varios estudios científicos, como el llevado a cabo por investigadores de Universidad Médica Militar de Chongqing en China, que demuestra como en el plasma seminal de los hombres infértiles hay un volumen menor de zinc que en el de los hombres con una fertilidad normal.
También, científicos de la Universidad de Mazandaran, Irán, revelan que se necesita un contenido adecuado de zinc en el esperma para la función normal de los espermatozoides y la fertilización de los hombres. Aunque también demostraron como un alto contenido de este mineral por encima del nivel de toxicidad, puede tener un efecto negativo sobre la calidad del esperma.
Después de mejorar los hábitos de vida saludable, otros estudios han apuntado a la necesidad de controlar la ingesta de alimentos expuestos a altos niveles de pesticidas y herbicidas. Los hombres que consumen frutas y verduras con altos niveles de residuos de plaguicidas tienen hasta un 32% menos de esperma, que a su vez contiene un 49% menos de espermatozoides que el de los hombres que consumen los mismos alimentos pero sin contaminantes, según revela un estudio de la Universidad de Harvard (Estados Unidos) publicado en la revista Human Reproduction. De todas formas, en España y la Unión Europea el uso de estos químicos en la agricultura está controlado por leyes que garantizan la seguridad de su consumo.