La excusa mayoritaria para no realizar deporte o acudir al gimnasio en España suele ser la falta de tiempo. Un pretexto que se repite en todo el mundo occidental: la vida moderna conlleva muchas ocupaciones y poco tiempo libre. Sin embargo, un nuevo estudio sugiere que con un poco de ejercicio diario, cuestión de segundos, ya estaríamos obteniendo resultados beneficiosos para la salud.
Y es que, según un nuevo trabajo llevado a cabo por los investigadores de la Universidad Edith Cowan (Australia) y de la Universidad de Salud y Bienestar Niigata (Japón), una breve dedicación diaria nos permitiría ganar fuerza de forma significativa. La técnica pasa por levantar mancuernas.
Esa sería la asombrosa conclusión del trabajo publicado en la revista Scandinavian Journal of Medicine and Science in Sports. Con solo levantar una mancuerna una o dos veces al día ya se lograrían beneficios significativos, incluso como pequeña terapia antienvejecimiento.
Concretamente, el estudio analizó los efectos de diferentes formas de flexionar el bíceps. Una de ellas en particular desmostró la capacidad de otorgar mejoras significativas en la fuerza, incluso si se practicaba brevemente.
Para llegar a tal conclusión, se analizó a estudiantes universitarios sanos. Un grupo de 39 participantes realizó una flexión de bíceps al máximo esfuerzo durante tres segundos al día, cinco días a la semana, durante cuatro semanas. Por su parte, otro grupo de 13 estudiantes no realizó ningún ejercicio durante el mismo periodo.
Los sujetos del grupo que sí realizaba ejercicio tuvieron que completar uno de los tres tipos de curl de bíceps: curl concéntrico típico (donde la mancuerna se eleva hacia los hombros), curl excéntrico (se alarga el músculo hasta debajo de las caderas) y curl isométrico (el brazo se sostiene en un ángulo de 90 grados, manteniendo el músculo en tensión sin movimiento).
Durante el estudio se midió la fuerza de contracción voluntaria máxima de los músculos de los sujetos antes y después de las cuatro semanas de la investigación, objetivando mejoras significativas. El grupo que realizó un curl excéntrico obtuvo los resultados más llamativos, con mejoras en la fuerza concéntrica de un 12,8%, en fuerza isométrica con un 10,2% y en fuerza excéntrica con un 12,2%. La fuerza muscular general mejoró en un 11,5%.
Por su parte, el resto de participantes también mejoraron en general, con el grupo concéntrico mejorando su fuerza isométrica un 6,3% y el grupo isométrico aumentando la fuerza excéntrica un 7,2%. Sin embargo, no se vieron mejoras en las otras mediciones, lo que indicaría que las contracciones excéntricas serían la mejor forma de ganar fuerza si el tiempo es limitado.
Como bien recuerda el profesor Ken Nosaka, de la Universidad Edith Cowan, aún no se sabe qué mecanismos darían lugar a estos efectos a nivel de contracción muscular excéntrica, pero el mero hecho de que solo una contracción excéntrica máxima de tres segundos al día mejore en tal porcentaje la fuerza muscular en un periodo tan corto de tiempo sí es importante para la salud.
Los investigadores sugieren que estos hallazgos podrían ser beneficiosos a la hora de intentar prevenir la pérdida de masa muscular y fuerza asociadas al envejecimiento, siempre y cuando los efectos puedan replicarse en otros grupos musculares. De momento no se sabe si el efecto podría repetirse y equipararse, y cabrá seguir investigando.