La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), dependiente del ministerio de Consumo, ha alertado de la presencia de un componente alérgeno no declarado en los frutos secos y arándanos recubiertos de chocolate de la marca comercial Gourmet Finest Cuisine, los cuales contienen leche sin especificar en el etiquetado.
La agencia avisa que, como medida de precaución, se recomienda a aquellas personas con alergia o intolerancia a los componentes de la leche que se abstengan de consumir el producto. Si bien, para el resto de la población, no comporta ningún riesgo.
La alerta ha saltado este viernes 6 de mayo desde las autoridades sanitarias de Polonia. En cuando se ha tenido constancia en nuestro país, la información ha sido trasladada a todas las comunidades autónomas.
El producto en España ha sido distribuido en la cadena de supermercados Aldi. Las especificaciones del lote en el que se ha detectado que no se declaraba el componente alérgeno son:
Nombre del producto: A mixture of roasted pecans, roasted and salted almonds and sweetened, dried cranberries in dark chocolate; marca comercial: Gouermet Finest Cuisine; número de lote: 05PA02208; fecha de caducidad: 24/08/2022 y 05/09/2022; peso de unidad: 100g; temperatura: ambiente.
Alérgenos y etiquetado
Como especifica la Aesan, en los alimentos envasados la información sobre los alérgenos deberá aparecer en la lista de ingredientes y, además, hacerlo de forma destacada mediante una composición tipográfica que la diferencie claramente del resto de la lista de ingredientes. En el caso de que no haya lista de ingredientes, en el etiquetado deberá haber un apartado que incluye la mención "contiene".
La intolerancia a la lactosa y la importancia del etiquetado es una de las luchas de la Agenia, que incluso ha desarrollado un folleto informativo para concienciar a empresas y ciudadanos sobre el peligro de no especificar u observar la presencia de leche.
"Cuando en la lista de ingredientes (o después de la palabra contiene) figure de manera destacada la palabra leche o cualquiera de sus derivados, debe entenderse que el producto contiene lactosa y proteínas lácteas, por lo que no resulta apto ni para alérgicos a las proteínas de la leche ni para intolerantes a la lactosa", esgrimen.
Además, piden precaución porque hay muchos alimentos distintos de los lácteos, como pueden ser embutidos, sopas o salsas, que no tenemos asociados a este componente, pero que sí llevan lactosa entre sus ingredientes.
Las consecuencias de consumir un producto con un componente alérgeno son muy variadas y puede ser desde una diarrea hasta un shock anafiláctico, algo que puede suceder, incluso, si se toman pequeñas cantidades del alimento en cuestión.