Estos son los cinco mejores alimentos para prevenir trombos y mejorar la circulación en España

Los problemas de circulación sanguínea pueden manifestarse de diversas formas, incluyendo sensación de frío en manos y pies, fatiga y, en casos más graves, pueden llevar a complicaciones como enfermedades cardiovasculares. Factores como la edad, la falta de ejercicio, ciertas condiciones médicas, además de una dieta poco saludable pueden contribuir a estos problemas.  Es por eso que la alimentación juega un papel crucial en la mejora de la circulación sanguínea.

Alimentos que son ricos en antioxidantes, ácidos grasos omega-3, y nitritos pueden mejorar la salud vascular y la circulación. Por ejemplo, frutas y verduras, especialmente aquellas ricas en vitamina C y E, pueden fortalecer las paredes de los vasos sanguíneos y mejorar su elasticidad.

Además, otros alimentos para acompañar e incluso especias, que tienen propiedades antiinflamatorias y que pueden reducir la presión arterial, también son beneficiosos.

Ajo

El ajo es conocido por sus propiedades saludables. Un estudio investigó el efecto de la suplementación con ajo en el flujo sanguíneo periférico, encontrando que el consumo diario de 600 mg de tabletas de ajo durante siete días aumentaba significativamente el flujo sanguíneo en el tejido de la pantorrilla. Esto sugiere que el ajo puede mejorar la circulación gracias a sus acciones vasodilatadoras.

Otra investigación ha demostrado que la suplementación con ajo puede reducir la presión arterial y el colesterol total. También se observó una reducción en los niveles de colesterol. Este alimento, además de mejorar la presión arterial y los niveles de colesterol, cuenta con efectos favorables sobre la aterosclerosis y el calcio en las arterias coronarias.

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Estos hallazgos indican que el ajo puede tener un papel en la prevención y tratamiento de factores de riesgo de enfermedades cardiovasculares. "Es recomendable usarlo fresco picado o congelado para aprovechar al máximo estos beneficios", destaca Concepción Martínez, dietista-nutricionista.

Cúrcuma

La cúrcuma es una especia potente con propiedades antiinflamatorias y anticoagulantes, gracias a su contenido de curcumina. Distintas investigaciones han demostrado que este compuesto tiene efectos antitrombóticos, anticoagulantes y puede influir positivamente en la fibrinólisis.

Sus efectos se deben a su capacidad para alterar la función de las plaquetas y algunos parámetros de la coagulación, tal y como revela un metaanálisis. Además, se ha observado que también sus propiedades antiinflamatorias contribuyen a su efectividad en el tratamiento de enfermedades cardiovasculares.

Según describe la especialista, "esta especia también se puede disfrutar en curry u otros platos que la incluyan, a menudo junto con comino, cilantro y chile".

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Bayas

Las bayas, como los arándanos y las fresas, son ricas en antioxidantes que protegen los vasos sanguíneos y mejoran el flujo sanguíneo. Por ejemplo, una revisión sistemática y metaanálisis de ensayos controlados aleatorios ha demostrado que la ingesta de bayas reduce el colesterol total, el colesterol LDL (el malo), los triglicéridos y la presión arterial, mientras aumenta los niveles de colesterol HDL (el bueno).

Canela

La canela no solo es apreciada por sus beneficios para la digestión y el metabolismo del azúcar en la sangre, sino también por sus propiedades anticoagulantes. Además, ha demostrado tener un efecto notable en la reducción de la presión arterial en pacientes con prediabetes y diabetes tipo 2.

Un metaanálisis de ensayos controlados aleatorios reveló que el consumo de esta especia disminuyó significativamente la presión arterial sistólica y diastólica.

Martínez subraya que es importante tener precaución con la canela si se está tomando warfarina, un medicamento anticoagulante. Sin embargo, la canela puede ser un complemento saludable a la dieta, disfrutándola en el café o encima de yogur griego con bayas.

Jengibre

El jengibre, al igual que los pimientos picantes, contiene salicilatos, que actúan como potentes anticoagulantes. También ha demostrado tener efectos positivos en la circulación sanguínea, particularmente en la reducción de la presión arterial. De hecho, un estudio de distintos ensayos clínicos han revelado que la suplementación con jengibre puede reducir significativamente tanto la presión arterial sistólica como la diastólica.

Esta reducción en la presión arterial es particularmente notable en estudios con participantes de media de edad inferior a 50 años, una duración de seguimiento de menos de 8 semanas y una dosis de jengibre mayor de 3 gramos diarios. Estos hallazgos sugieren que este alimento podría ser beneficioso para mejorar la circulación sanguínea y controlar la presión arterial, especialmente en poblaciones más jóvenes.