Los pistachos son uno de los frutos secos más populares de España.

Los pistachos son uno de los frutos secos más populares de España.

Nutrición

Adiós a los pistachos: estas son las personas en España que deben eliminarlos ya de su dieta

Pese a que se trata de uno de los frutos secos más completos y beneficiosos para el organismo, hay personas que pueden tener problemas con ellos. 

22 junio, 2024 02:26

Los pistachos son un fruto seco altamente valorado tanto por su sabor como por su perfil nutricional, pero su consumo excesivo puede tener varias contraindicaciones que deben ser consideradas con seriedad.

Una de las preocupaciones más significativas es su alto contenido calórico. A pesar de que son una excelente fuente de grasas saludables, consumir grandes cantidades puede llevar a una ingesta calórica excesiva, lo cual podría resultar en un aumento de peso no deseado.

De hecho, un estudio publicado en el Journal of Nutrition, destaca que, aunque los frutos secos como este pueden tener efectos beneficiosos sobre la salud cardiovascular, su consumo excesivo puede contribuir al sobrepeso debido a su densidad calórica.

Denominado Pistacia vera, el pistacho es originario de las regiones del Medio Oriente y Asia Central, específicamente de áreas que actualmente comprenden Irán, Turkmenistán y Afganistán.

Su cultivo se remonta a miles de años, con evidencias arqueológicas que sugieren que fueron consumidos por civilizaciones antiguas como los persas y babilonios.

A lo largo de la historia, ha sido valorado no solo por su sabor, sino también por sus propiedades nutricionales y medicinales. Los mercaderes de la Ruta de la Seda jugaron un papel crucial en la difusión de este fruto seco, llevándolo desde sus tierras natales a diferentes partes del mundo, incluyendo Europa y China.

En términos de valor nutricional, son una excelente fuente de diversos nutrientes esenciales. Son ricos en proteínas, lo que los convierte en una opción popular entre vegetarianos y veganos. Una porción de aproximadamente 28 gramos proporciona cerca de 6 gramos de proteína.

Además, los pistachos contienen una alta cantidad de grasas saludables, predominantemente ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados, que son beneficiosos para la salud cardiovascular. Incluso algunos estudios los vinculan su consumo con la reducción del colesterol LDL (malo) y el aumento del colesterol HDL (bueno). Sin embargo, hay personas a las que estos beneficios no les compensan respecto a las contraindicaciones que les pueden suponer.

Además de su densidad calórica, otra contraindicación notable es el riesgo de problemas digestivos. Estos frutos secos contienen una cantidad considerable de fibra dietética que, aunque es beneficiosa en cantidades moderadas, puede provocar malestar gastrointestinal cuando se consume en exceso.

El sistema digestivo puede tener dificultades para procesar grandes cantidades de fibra de una sola vez, resultando en síntomas como hinchazón, gases y diarrea. En distintas investigaciones se ha probado que el exceso de fibra puede llevar a síntomas de malestar gastrointestinal, particularmente en individuos que no están acostumbrados a la alta ingesta de la misma.

Además, los pistachos son ricos en oxalatos, compuestos que pueden contribuir a la formación de cálculos renales en individuos susceptibles. En concreto, un estudio publicado en el Clinical Journal of the American Society of Nephrology señala que la ingesta elevada de oxalatos está asociada con un mayor riesgo de formación de cálculos renales, especialmente en personas con antecedentes de esta condición. Por lo tanto, aquellos con predisposición a los cálculos renales deben moderar su consumo de este fruto seco para evitar aumentar el riesgo de recurrencia. 

El contenido de sodio es otro factor preocupante, particularmente en la versión salada. El consumo excesivo de sodio puede elevar la presión arterial y aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Además, el consumo elevado de sodio está relacionado con un mayor riesgo de hipertensión y enfermedades cardíacas, tal y como detalla una investigación publicada en la revista de la American Heart Association. Por lo tanto, las personas con hipertensión o enfermedades del corazón deben optar por pistachos sin sal y consumirlos con moderación.

En cuanto a las intolerancias alimentarias, algunas personas pueden ser intolerantes a los pistachos debido a la presencia de ciertos compuestos proteicos. Esta puede manifestarse con síntomas como náuseas, vómitos, diarrea y dolores abdominales después de consumir el fruto seco. Este tipo de reacción es distinta de una alergia, la cual involucra al sistema inmunológico.

Este proceso de intolerancia ocurre cuando el sistema digestivo no puede descomponer ciertas proteínas presentes en este alimento. Esto puede deberse a una deficiencia enzimática o a una sensibilidad específica a estos compuestos.

En algunos casos, la reacción puede ser el resultado de una respuesta inmunológica no alérgica como las deficiencias enzimáticas y sensibilidades a ciertos alimentos.

Es crucial diferenciar entre la intolerancia y la alergia a los pistachos. Mientras que una alergia implica una respuesta del sistema inmunológico que puede ser grave y potencialmente mortal, la intolerancia generalmente resulta en síntomas digestivos y no involucra el sistema inmunológico de la misma manera. Las personas que sospechan que pueden ser intolerantes deben consultar a un médico o dietista para una evaluación adecuada.