Ordenan retirar de inmediato este famoso marisco en España y piden no consumirlo

El Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos de la Unión Europea (Rasff) ha emitido una nueva alerta tras detectar un problema en una partida de marisco procedente de Marruecos. En concreto, se trata de unas gambas destinadas al mercado español que habrían superado el límite de sulfitos que establece la Unión Europea para los alimentos. Según detalla el Rasff, fueron las autoridades españolas las que detectaron la incidencia en un control fronterizo.

El Rasff es una herramienta que utilizan las autoridades sanitarias de los distintos países de la Unión Europea para el intercambio de información sobre las medidas tomadas ante la detección de un riesgo en un pienso o en un alimento. Así, según califica este sistema, esta incidencia habría supuesto un "riesgo potencial" para los consumidores. 

Según se detalla en la notificación, las muestras de estas gambas contenían 339 ± 12 % mg/kg - ppm de sulfitos cuando el límite se encuentra en 150 mg/kg-ppm. Como suele ser habitual en estas alertas, no se detalla de qué marca o lote exacto se trata. También se desconoce las superficies en las que se distribuyen estos lingotes de pez espada descongelados. 

Los sulfitos en alimentos son aditivos conservantes, utilizados en industria alimentaria para detener o retrasar el crecimiento de microorganismos y también evitar la acidificación o la fermentación no deseada e incluso la descomposición de los mismos.

Es necesario un control de la ingesta de sulfitos. De hecho, la Aesan recomienda un máximo de 0,7 mg/kg de peso corporal, ya que una ingesta superior de sulfitos puede provocar efectos adversos en el organismo, entre los que se encuentran las cefaleas, migrañas, irritación del tracto intestinal e incluso urticaria.

Facua-Consumidores en Acción ha denunciado en numerosas ocasiones la poca información que ofrece el Sistema de Alerta Rápida de la Unión Europea. Según el organismo, esto provoca que los consumidores sospechen de todos los alimentos independientemente de que estén o no afectados por estas alertas. "El motivo es que no se dan detalles sobre las empresas productoras ni las zonas del país en donde se han cultivado o fabricado los productos", dice la organización.

"Esa falta de información del Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos de la Unión Europea imposibilita que los consumidores puedan comprobar si han comprado o consumido algunos de los productos alertados", añaden.