Txumari Alfaro diversifica su cartera de remedios-milagro. La 'Bioneuroemoción', una doctrina pseudocientífica inspirada en las teorías del médico alemán Ryke Geerd Hamer - varias veces condenado en su país - y que comparte con otro notorio embaucador, el curandero Enric Coberá - que ha llegado a afirmar que "solo se mueren de cáncer los gilipollas" - puede aplicarse, según el seminario que oferta por 290 euros, para tratar la celiaquía, las alergias y las intolerancias alimentarias.

La base de la 'bioneuroemoción' mantiene que todas las enfermedades son básicamente psicosomáticas: los conflictos emocionales las desencadenan, y bastaría la paz mental para sanar. Así, Alfaro llegaba a decir a la madre de una paciente en el pasado congreso pseudocientífico 'Un mundo científico' que "la terapia consiste en no hacer nada, solamente tomar conciencia del cáncer de pecho". Desde la Asociación Española contra El Cáncer calificaron el aserto de "barbaridad".

Ahora, son los activistas y asociaciones de celíacos quienes denuncian en redes sociales que el naturópata ha pasado a comercializar los presuntos beneficios de la terapia al campo de la alimentación. Mediante el uso de "Terapia Regresiva Consciente" - es decir, desentrañando el conflicto emocional que teóricamente ha desencadenado la reacción perniciosa - promete proporcionar el "protocolo" para "manejar a un persona con una alergia o un intolerancia".

El folleto de los cursos de Alfaro promete terapias "homeopáticas", "dietéticas" y "remedios naturales" para "mejorar la vida" del paciente, lo que abarca un ramillete de propuesta presuntamente inocuas a la para que inefectivas. El seminario se impartirá en verano y ha sido organizado por centro privado de Valladolid, con cinco cursos a lo largo del fin de semana con un importe de 60 euros cada uno. El "Taller vivencial" al completo supone por tanto un importe de 290 euros.

El desglose de las materias es lo que finalmente nos catapulta al terreno de la bizarría. Txumari Alfaro abordará la "descodificación de las alergias y los desamores" y las "fobias" que provocan "alergias psicológicas". Pero tres casos son extrañamente específicos. La celiaquía, según el folleto, tiene que ver con "el conflicto de la desestructuracion familiar"; la intolerancia a la leche, con "el conflicto de la separación de mamá"; y la alergia al huevo con "el miedo a perder a mi bebé".

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