La actriz Ana Obregón llevaba más de seis meses sin salir en ninguna revista del corazón, algo poco habitual en ella. Una de las últimas veces que lo hizo fue a su pesar, cuando Diez Minutos publicaba en exclusiva imágenes de ella, su exmarido Alessandro Lequio y el hijo de ambos Álex a las puertas de uno de los mejores centros especializados en cáncer del mundo, el Memorial Sloan Kettering Cancer Center.
Casi medio año después, la protagonista de Ana y los siete vuelve al papel couché, por el último motivo que hubiera querido: contar cómo ha vivido la experiencia de tener un hijo de apenas 26 años diagnosticado de cáncer que todavía no ha concluido el tratamiento contra la enfermedad. Lo ha hecho en su revista de cabecera, ¡Hola! pero, aunque el emotivo relato pretende, según sus propias palabras, "servir de ejemplo a otras muchas madres que pasan por esto", desliza algunos mensajes preocupantes sobre el estado de la oncología española, que EL ESPAÑOL ha comentado con oncólogos de nuestro país.
Son frases que habrían llegado a más de dos millones de lectores -según los datos del último Estudio General de Medios (EGM) sobre la audiencia de la revista-y que pueden dar lugar a una idea equívoca sobre la necesidad de desplazarse a un centro especializado en cáncer de EEUU -en concreto al MSKCC- para tener posibilidades de curarse.
Aunque Obregón es bastante explícita al dar detalles sobre el cáncer de su hijo, omite el más importante a la hora de hacerse una idea del pronóstico: el tipo de tumor. Por esta razón -y por no querer hablar, lógicamente, de pacientes cuyo historial médico no conocen-, los expertos no quieren comentar el caso particular del joven. Pero sí algunas afirmaciones de la actriz que hacen referencia al panorama oncológico en España.
"Como en España no hay casi casos como el suyo, nos enteramos de que en el MSKCC, donde habían identificado este tipo de cáncer, existía un tratamiento", explica la actriz en las páginas de la revista. El jefe de Oncología Médica del Hospital General Universitario Gregorio Marañón, Miguel Martín, señala a este medio que la oncología española está "al nivel de la estadounidense" y que cualquier tratamiento cuya eficacia esté demostrada está tan disponible en nuestro país como en EEUU.
Se trata de una afirmación que "desde el respeto máximo a que cada uno haga con su dinero lo que quiera" comparte la presidenta de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), Ruth Vera. "Cuando en España nos encontramos con un tumor de baja incidencia, se manda a tratar a un centro de referencia -uno en el que se hayan visto varios casos como ése-, ya que tenemos el nivel suficiente y la tecnología suficiente. Yo no conozco ningún tipo de cáncer del que se hayan diagnosticado cero casos en España", apunta.
Diferentes ritmos de aprobación de fármacos
Lo que reconocen expertos es que sí hay tratamientos que son aprobados antes en EEUU que en nuestro país -también ocurre al revés, que algunas terapias llegan antes a Europa que a América-, pero esto no significa que los pacientes españoles no puedan recibirlos. En esos casos, señalan los expertos, se recurre al uso compasivo y los enfermos reciben las terapias, algo que ocurre incluso con algunas experimentales. "El nivel de participación de España en ensayos clínicos es muy elevado", subraya Vera.
Hay situaciones muy concretas en las que realmente un fármaco podría sólo recibirse fuera de nuestras fronteras, pero se trata de medicamentos muy experimentales, que estuvieran probándose en ensayos clínicos, ninguno con eficacia probada. "Eso es algo de lo que se informa a los enfermos y a sus familiares", sostiene Martín.
Sin embargo, hay otra afirmación de Obregón que aún puede llevar a más equívocos y es la referida al pago de tratamientos oncológicos en nuestro país. El autor de la entrevista de ¡Hola!, le dice a la actriz: "Pero hay mucha gente que no podrá disponer de tus mismos recursos, Ana", a lo que ella responde: "No dejo de pensar en ello. Dios mío. Por eso, a partir de ahora, me voy a dejar la vida por esas fundaciones que ayudan a familias sin recursos para que puedan costearse los tratamientos".
Sin duda, se trata de un error -entendemos que involuntario- de la actriz, ya que la sanidad pública cubre todas las fases de los tratamientos oncológicos en España. "Este concepto no es bueno ni correcto", comenta Vera, que reitera que nadie en nuestro país deja de recibir el mejor tratamiento disponible para el cáncer por falta de recursos económicos. De hecho, la propia Fundación que cita Obregón como ejemplo de las que va a apoyar a partir de ahora, Caico, habla de apoyo "socioeconómico", más para financiar los gastos derivados de la enfermedad que los tratamientos en sí.
En cualquier caso, Vera considera que puede haber otras razones que hayan llevado a Obregón a cruzar el charco para ir al que, reconoce, es uno de los mejores centros de cáncer del mundo. "Ahí se es más anónimo, hay más privacidad y se trata de instituciones privadas, con las habitaciones propias de centros así y mejor hostelería", comenta, y concluye: "Pero esto esto no hay que mezclarlo ni con la supervivencia ni con la cura del cáncer. Curar un cáncer o vivir más con él no es cuestión de dinero".