Tal solo 5 minutos son necesarios para poner en práctica este método japonés para reducir cintura. Bajar de talla es uno de los propósitos más populares para empezar el año y ahora podemos lograrlo realizando el estiramiento que ha acuñado el doctor Fukutsudzi, un ejercicio que corrige la postura, mejora la posición de la espalda y la zona lumbar. Perderemos centímetros del perímetro abdominal con la única ayuda de una toalla y una esterilla para tumbarnos cómodamente en el suelo.
No se trata, sin embargo, de una rutina de adelgazamiento, sino de redistribución de la grasa abdominal. El médico japonés Toshiki Fukutsudzi es el creador de este ejercicio que ha trascendido con su mismo nombre y con el que conseguiremos, además, ejercitar el cuerpo para reposicionar las vértebras y la pelvis de cara a aliviar los dolores de espalda y corregir la postura. El quiropráctico especialista en problemas posturales desarrolló su método tras una década de investigación y se puede poner en práctica en casa siguiendo unos sencillos pasos.
Lo primero es hacerse con un rulo de fitness de unos 10 centímetros de diámetro o, en su defecto, con una toalla de baño que podamos enrollar y sujetar con una goma hasta obtener un elemento parecido, pero mucho más casero y barato. Cuando lo tengamos, colocamos la esterilla en el suelo y nos acostamos boca arriba, colocando la toalla o el rulo bajo las lumbares, justo encima del sacro. Las piernas deben estirarse y separarse ligeramente, con los pies hacia dentro juntando los dedos pulgares de ambos.
5 minutos estirados
Los talones quedarán separados unos 20 centímetros y los brazos deben estirarse hacia atrás, por encima de la cabeza, también ligeramente separados y con las palmas de la mano mirando al suelo. En este caso son los dedos meñiques los que se acercan hasta tocarse. Este es el último detalle de la postura de Fukutsudzi, en la que tendremos que permanecer durante cinco minutos respirando por la nariz, relajadamente, sintiendo cómo se estira el cuerpo separando y juntando únicamente los dedos de los pies, y con el abdomen en tensión.
Cuando pasen los 5 minutos podemos relajar la musculatura y repetir el ejercicio un par de veces más o, si lo preferimos, podremos hacer las tres repeticiones repartidas a lo largo del día. Como decíamos antes, este no se trata de un método para adelgazar, sino para reducir la cintura a través de la redistribución de la grasa visceral que se acumula en el tejido adiposo. Por eso es importante que exista una constancia a la hora de practicarlo para que la reducción de cintura no sea un avance temporal, sino que se mantenga en el tiempo.
Conviene recordar que la grasa abdominal no es únicamente un problema estético para algunas personas, sino que suele ser un reflejo de la grasa que infiltra nuestros órganos. El especialista en Endocrinología y Nutrición, Guillem Cuatrecasas, explicaba a EL ESPAÑOL que "no es simplemente un acúmulo más o menos antiestético. Precisamente, porque infiltra esos órganos tan importantes en el control del metabolismo, a mayor grasa abdominal mayor riesgo de diabetes, de hipertensión, de cifras altas de colesterol y, en definitiva, mayor riesgo cardiovascular".
La Fundación Española del Corazón advierte del riesgo de padecer enfermedades en los pacientes que tienen un aumento de grasa abdominal y, además de los oportunos ejercicios que podremos practicar para deshacernos de ella, es conveniente tener en cuenta el poder de muchos alimentos quemagrasas como puede ser el salmón, que ayuda a bajar el colesterol; las nueces y las almendras, repletas de fibra soluble; la avena, porque reduce también el colesterol y provoca sensación de saciedad, y el brócoli, ideal para producir un déficit calórico y adelgazar.
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