La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), dependiente del Ministerio de Sanidad, ha emitido una alerta de retirada de un antibiótico de uso habitual tras obtener "resultados fuera de especificaciones" en el "estudio de estabilidad en los ensayos de apariencia, humedad e impureza". El medicamentos afectados es Zinnat, que elimina tanto en niños como en adultos las infecciones bacterianas.
En concreto, se trata de Zinnat 250 mg 'Granulado para suspensión oral', en formato de 10 sobres (NR: 59063, CN: 695631). El número de lotes es FS4S, con fecha de caducidad 31/10/2022.
La AEMPS ha solicitado la retirada del mercado de todas las unidades distribuidas de los lotes afectados y devolución al laboratorio por los cauces habituales; y a las CCAA que hagan un seguimiento de la retirada.
Acuprel, cuyo principio activo es la Cefuroxima axetilo, es un antibiótico que se utiliza para tratar infecciones de garganta, senos de la nariz, oído medio, de pulmones o pecho, del tracto urinario de la piel y tejidos blandos. "Zinnat también se puede utilizar para tratar la enfermedad de Lyme (infección transmitida por las garrapatas)", explica el prospecto.
Para adultos, la dosis recomendada de Zinnat es de 250 mg a 500 mg dos veces al día, dependiendo de la gravedad y tipo de infección. Para niños, la dosis recomendada de Zinnat es de 10 mg/kg de peso del niño (hasta un máximo 125 mg) a 15 mg/kg de peso del niño (hasta un máximo 250 mg) dos veces al día. El dosaje final dependerá de la gravedad y tipo de infección el peso, y la edad del niño, hasta un máximo de 500 mg al día.
La Aemps clasifica los defectos de calidad de los medicamentos en tres categorías (1, 2 y 3). La primera de ellas corresponde con un riesgo más elevado, y la clase tres con un menor riesgo. En este caso, la Aemps apunta que se trata de un defecto de clase dos.
Antiobióticos y resistencia bacteriana
"Los antibióticos se utilizan para tratar infecciones bacterianas y no sirven para tratar infecciones víricas como la gripe o el catarro", recuerda la Aemps. "Es importante que siga las instrucciones relativas a la dosis, las tomas y la duración del tratamiento indicadas por su médico. No guarde ni reutilice este medicamento. Si una vez finalizado el tratamiento le sobra antibiótico, devuélvalo a la farmacia para su correcta eliminación. No debe tirar los medicamentos por el desagüe ni a la basura".
El uso inadecuado de antibióticos es una de las principales causas de la denominada 'resistencia bacteriana', el hecho de que las cepas se estén volviendo resistentes al tratamiento y agraven las infecciones. El mayor análisis realizado hasta la fecha, publicado en enero en The Lancet, señala que las bacterias 'superresistentes' causaron en el año 2019 1,27 millones de decesos. "Más, incluso, que el SIDA o la malaria, con hasta 860.000 y 640.000 muertes en ese año, respectivamente".
Bruno González-Zorn, catedrático del Departamento de Sanidad Animal de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid y asesor de la OMS, habla de "una pandemia silenciosa". Segín explica, "El uso inadecuado es la fuerza motriz principal [de la resistencia], y por eso hay que reducirlos", subrayando que en el mundo al menos un tercio de los antibióticos se prescriben inadecuadamente.