El 98,6% de las muertes atribuibles al calor en el verano de 2023 se produjeron en mayores de 65.

El 98,6% de las muertes atribuibles al calor en el verano de 2023 se produjeron en mayores de 65.

Salud

Así mata el calor en España: mayores de 75 años, con patologías y sin aire acondicionado

Las altas temperaturas suponen un riesgo para la salud de toda la población, pero en los grupos más vulnerables pueden agravar enfermedades previas.

7 agosto, 2024 02:00

Al menos 1.170 personas han fallecido en España desde el pasado 16 de mayo. Pese a que la estación no comienza hasta pasado un mes, esta es la fecha que el Instituto de Salud Carlos III elige como punto de partida para elaborar cada verano el informe acerca de las muertes atribuibles a excesos de temperaturas. Se trata de un documento en el que se desglosa cuál es el perfil de las víctimas mortales por el calor en nuestro país.

Por grupos de edad, la población más vulnerable son los mayores de 75 años. En el verano de 2023, por ejemplo, concentraron hasta un 90,5% de las muertes atribuibles al exceso de calor, con un total de 2.724 defunciones. Este porcentaje no sólo es similar al que se lleva registrado este año (con datos hasta el 4 de agosto), sino que se mantiene durante la última década.

"No hemos observado que haya surgido un perfil nuevo", asegura a EL ESPAÑOL Julián Domínguez, jefe del servicio de Medicina Preventiva del Hospital Universitario de Ceuta. "Son pacientes mayores que en muchas ocasiones no se pueden adaptar fisiológicamente a unos valores tan altas", ya que cuentan con un umbral de sudor más alto y una menor capacidad termorreguladora. A estas edades también suelen producirse un mayor número de patologías que agravan el efecto de las temperaturas extremas.

No obstante, el calor extremo también es peligroso para los menores de 75, tal y como demostró un estudio publicado en 2021. Tras analizar los datos de 74 millones de estadounidenses, comprobaron que el riesgo de acudir al servicio de urgencias durante un día de calor extremo en las personas de 45 a 54 años era del 10,3%, frente al 3,6% que se registró en los mayores de 75.

Los autores del trabajo concluyeron que el mayor riesgo de los adultos jóvenes se debía a que podían pasar "mucho más tiempo al aire libre". Especialmente, señalaban a los trabajadores. Basándonos en el citado informe del ISCIII no es posible conocer las circunstancias en las que fallecen. Aunque, en este sentido, el informe anual presentado recientemente por UGT advirtió que los accidentes laborales por calor aumentaron un 23% en 2023.

Mayor impacto en mujeres

En cuanto al género se refiere, se observa una mayor letalidad en el femenino. En el verano de 2023 se registraron 1.900 muertes atribuibles al exceso de calor en las mujeres; esto es, casi un 63% del total.

Esta diferencia no es única de España. Un estudio realizado por investigadores del Instituto Nacional de Salud e Investigación Médica de Francia (INSERM, por su siglas en francés) halló que durante la ola de calor que se vivió en este país en 2003, el número de muertes relacionadas con el exceso de temperatura en mayores de 55 fue un 15% más alto entre las mujeres que entre los hombres de la misma edad.

La investigación liderada por ISGlobal acerca de la mortalidad asociada al calor en Europa también llegó a la misma conclusión. De hecho, en 2022 (último año del que se tienen datos), uno de los países con una de las diferencias más considerables fue España, con una tasa de mortalidad en mujeres de 295, frente a los 181 en hombres.

La explicación a esta desigualdad entre géneros parece ser multifactorial, como señala un estudio elaborado por investigadores de la Universidad Libre en Ámsterdam (Países Bajos). La primera causa a la que apuntan los autores es que las mujeres sudan menos y, por tanto, pierden menos calor. Creen que también puede influir que tengan una mayor predisposición que los hombres a vivir solas y a llevar una vida activa. 

La comunidad más afectada

En lo que respecta a la distribución geográfica, la Comunidad de Madrid es la región que más muertes atribuibles al calor acumula desde el pasado mes de mayo, con un total de 262. De lejos le siguen Cataluña (160), Castilla y León (131) y Castilla La Mancha (113).

La comunidad madrileña también es la que mayor mortalidad presentó en el pasado verano, tanto en números absolutos, con 409 defunciones, como en la tasa ajustada (194 muertes por 100.000 habitantes). Uno de los posibles motivos por el que ostenta el funesto título de tener más decesos es su longevidad, ya que es la región de España donde más se vive, con una esperanza de vida de 84,63 años.

Madrid también es la comunidad con el nivel de renta por hogar más alto. Este dato puede resultar contradictorio, pues varios estudios han asociado los barrios pobres con una mayor mortalidad por olas de calor. Sin embargo, como explicaba el médico preventivista y miembro de la Sociedad Española de Epidemiología (SEE), Mario Fontán, en este artículo de EL ESPAÑOL existe una diferencia de renta entre el norte y el sur de la propia comunidad.

La influencia del nivel de renta es tal que incluso el tener —o no— un ventilador puede evitar una muerte por exceso de temperatura. Así es, según un trabajo español publicado a finales del pasado año, el aire acondicionado redujo las muertes por calor cerca de un 28,6%.