El cirujano gallego es el creador de una técnica que permite realizar operaciones complejas con una pequeña incisión.

El cirujano gallego es el creador de una técnica que permite realizar operaciones complejas con una pequeña incisión.

Salud

Dr. González, el 'yonqui' del bisturí que opera en 136 países: sobrevivió a Al Qaeda y curó a Broncano

Diego González Rivas es el cirujano que ha operado en más países del mundo con la revolucionaria técnica que él mismo desarrolló en 2010.

20 septiembre, 2024 03:01

El 12 de octubre de 2002, Diego González Rivas (A Coruña, 1974) iba camino del Sari Club, el local indonesio en el que aquel día murieron más de 200 personas por un atentado atribuido a Al Qaeda. Se salvó "por un minuto". Paradojas del destino, ocho años más tarde inventó una técnica con la que ha salvado la vida a miles de pacientes por todo el mundo

Este cirujano gallego tenía claro desde bien temprano que la muerte nunca es una opción. De pequeño, su familia le grabó en un casete diciendo algo así como "les deseo feliz año nuevo y que no se os muera ningún familiar". La grabación, en realidad, era una excusa para preservar —como hace él con la vida de los demás— los chistes que contaba, con los que intentaba "hacer feliz a la gente".

Luego, acompañando a su madre al hospital en el que ejercía de enfermera, se dio cuenta de que también se puede hacer feliz a la gente siendo médico. Su primera opción fue la cirugía plástica. "Nunca he pensado qué hubiera sido de mí si la hubiera escogido", dice González Rivas a EL ESPAÑOL desde un aeropuerto (su segunda, o casi primera, casa).

"Sería completamente diferente", prosigue, "pero creo que el camino que escogí ha sido el adecuado. Estoy contento de lo que he conseguido y la vida que llevo, porque nada importante se consigue de forma fácil". Para ello, ha tenido que sacrificar relaciones con amigos o incluso formar una familia: "Si te dedicas tanto a tu profesión, tienes que renunciar a muchas cosas".

Basta escucharlo unos minutos para comprobar que esta dedicación no es impostada. "Soy un apasionado hasta tal punto que he convertido mi trabajo en mi forma de vida. Al no verlo como un trabajo, no me cansa. En los últimos años, de hecho, sólo recuerda dos momentos en los que haya pasado 'mucho tiempo' sin pisar un quirófano.

El último, el año pasado cuando subió al Kilimanjaro. Estuvo cinco días sin operar y se sintió "raro". También tiene esta sensación cuando está en algún país (ha operado en un total de 136) y no tiene que operar: "Es como si estuviera vagueando".

Este "ritmo frenético" que lleva se traduce en unas 1.000 cirugías mayores al año. Un cirujano en España suele realizar entre 60 y 80. Para él, tener un volumen de operaciones por encima de la media no repercute en el resultado final, sino todo lo contrario: le da "mucha más soltura y experiencia".

Piedras en el camino

González Rivas sabía, al decantarse por la cirugía torácica, que las operaciones que iba a realizar tendrían postoperatorios muy duros, en los que el paciente experimenta mucho dolor por la cirugía que se practica. En Estados Unidos, sin embargo, había un grupo que desde principios de siglo había conseguido reducir la intervención a dos incisiones (hasta entonces, se realizaban tres, como mínimo).

En 2007, González Rivas contactó con el jefe del equipo, el doctor Thomas A. D'Amico, quien rechazó su petición para visitar el hospital porque no se conocían. Cuando lo abordó en un congreso en EEUU, cambió de parecer y le dijo que le enviara un correo. Tuvo que hacerlo desde una nueva dirección para que no se percatara de que era el mismo cirujano español al que se había negado hacía poco tiempo.

Tras aprender la técnica, regresó a España para implantar y mejorarla. ¿Por qué no hacer una incisión en vez de dos? En junio de 2010, operó al primer paciente de cáncer de pulmón con este innovador procedimiento que se vino a llamar 'Uniportal VATS', una técnica que permite realizar intervenciones quirúrgicas complejas a través de una única incisión de tres o cuatro centímetros de longitud, sin la necesidad de separar las costillas.

Como suele decirse, el alumno superó al maestro. Aunque los 'maestros' que por aquel entonces tenía en el hospital gallego no vieron con buenos ojos que el joven cirujano de 36 años tratase de innovar en la técnica. Las piedras en el camino existieron. "Cuando alguien destaca o quiere hacer algo fuera de lo común, saldrán personas que no le apoyarán y le atacarán", lamenta. "Pero es la naturaleza del ser humano, tienes que apreder a lidiar con ello".

Él, cuenta, luchaba "contra viento y marea" para convertir los problemas en "oportunidades". Estos obstáculos fueron los que precisamente provocaron que, al principio, no tuviera tanta notoriedad en España. También influye que en nuestro país a diferencia de los que ocurre en EEUU, donde se promociona al que "destaca en algo"— "muchos científicos se han tenido que marchar porque con contaban con el apoyo suficiente". Aunque cree que la situación "está cambiando".

La operación de Broncano

González Rivas se dio a conocer entre el público general la noche del pasado miércoles, cuando acudió como invitado de La Revuelta. No era la primera vez que se encontraba con el cómico y presentador David Brocano. Hace cuatro años le entrevistó en La Resistencia. Fruto de aquella entrevista, el cirujano gallego le ofreció la posibilidad de operarle de su hiperhidrosis palmar, una condición que provoca en el paciente que le suden en exceso las manos, las axilas o los pies.

El cirujano gallego junto a David Broncano en su operación de hiperhidrosis palma.

El cirujano gallego junto a David Broncano en su operación de hiperhidrosis palma.

El propio Broncano reconoció recientemente en una entrevista que valoraba que la gente no se sacrificara casi nada por su trabajo. Esta actitud de priorizar la vida al éxito laboral se ha extendido entre los más jóvenes bajo el nombre de "ambición silenciosa" ("quiet ambition", en inglés). A González Rivas le resulta "curioso" que las nuevas generaciones le den menos importancia al trabajo.

Considera que se es "menos creativo que antes". "Sí que se es creativo a la hora de realizar contenido para redes, pero es contenido para divertir, no hay tanta creatividad para intentar cambiar el mundo". También observa "menos dedicación" que en generaciones anteriores: "Lo veo en Medicina. Antes te llamaban para hacer prácticas, y aunque no te pagaran, te ibas de cabeza. Ahora son más selectivos a la hora de tener más tiempo libre. Aunque me parece totalmente válido".

Al exponerse a un mayor público en el nuevo programa de TVE, este cirujano recibió sonadas críticas en redes sociales por reconocer que había realizado operaciones en países donde no se cumplen los derechos humanos o a personas que habían cometido delitos. "Soy médico, y trato de preservar la salud, independientemente del país o de las circunstancias de cada uno", defiende González Rivas, quien ni siquiera se negaría a operar a los terroristas que hace 22 años estuvieron a punto de acabar con su vida.