Así afectan las rotaciones en un hospital a la salud del paciente: "Si entras nuevo, estás más como un pulpo en un garaje"
- Un reciente estudio, realizado con datos del sistema público inglés, estima que el cambio de personal causa hasta 334 muertes adicionales al mes.
- Más información: El peligro de coger un bisturí tras 20 horas de guardia: "Acabas poniendo en riesgo a los pacientes"
Cambiar constantemente de personal puede afectar a la productividad de una empresa. El ámbito sanitario también corre este riesgo. Con la particularidad, eso sí, de que en este caso entra en juego la salud de los pacientes, la cual se ve deteriorada hasta el punto de que el riesgo de mortalidad es mayor.
Esta es la conclusión a la que ha llegado un estudio tras analizar cómo afecta la rotación de médicos y enfermeras durante una década. En las enfermeras, los autores descubrieron que cuando su tasa mensual de rotación aumentaba, la tasa de mortalidad por todas las causas se incrementaba en 35 muertes más por cada 100.000 ingresos. En el caso de los médicos, la cifra era de 14 muertes por cada 100.000.
La investigación se ha realizado con datos del sistema público de salud inglés, por lo que estiman que a nivel nacional se producirían un total de 335 muertes adicionales al mes. Con estas cifras, los autores consideran que se pone de relevancia el papel fundamental que tiene la estabilidad del personal para garantizar la seguridad de los pacientes.
En España no existe un trabajo con tanto volumen de información ni tal actual. No obstante, los profesionales sanitarios consultados por EL ESPAÑOL coinciden en que de realizarse en nuestro país, los resultados serían "similares". "El estudio refleja una situación que ya intuíamos desde hace mucho tiempo", señala Mar Rocha, portavoz del Colegio de Enfermería de Madrid. "Si estamos cambiando de lugar de trabajo, es evidente que la atención prestada no podrá ser de calidad".
Más rotación, más problemas
Uno de los inconvenientes de que la rotación sea alta entre el personal médico es la incapacidad para formarse y especializarse. "Las enfermeras no valemos para todo en cualquier momento", denuncia Rocha. "E igual un día podemos estar en urgencias que al siguiente nos ponen en una UCI".
Algunos estudios sugieren que el riesgo de mortalidad aumenta porque los datos del paciente no se transmite correctamente entre quienes realizan la rotación. Esta falta de comunicación se agrava cuando el personal tampoco es estable. "Cuando tienes experiencia, la información se transmite mejor. Pero si entras nuevo, estás más como un pulpo en un garaje porque no sabes a quién preguntar", apunta el médico Salvador Casado.
Éste entiende que las rotaciones se produzcan "cuando eres joven". En ese caso, sí que es comprensible que tengan que hacer muchas suplencias. Y cuando avanzas, lo normal es que te den más estabilidad. "Pero si los contratos son malos, no se puede implementar una rotación estable".
En base a su experiencia, trabajando en dos hospitales madrileños, reconoce que en aquellos donde tienen más rotación de especialistas, los indicadores son peores: "Hay más problemas, más efectos secundarios y mayor mortalidad". Esta sustitución constante, causada por una condiciones precarias de trabajo, también supone una sobrecarga para los propios compañeros.
Aunque los que más se ven afectados son los pacientes, ya que el nuevo personal "no tiene tanta experiencia". "Sucede tanto con los médicos como con las enfermeras. Si rotan mucho, su desempeño no puede ser el óptimo", lamenta Casado. "Y la forma para que no haya problemas es que el nivel profesional sea estable".
La vicepresidenta del Consejo General de Enfermería, Raquel Rodríguez, discrepa en que las rotaciones en un hospital se traduzcan en un peor servicio. "Técnicamente, la calidad asistencial es la misma", opina, "el problema es que si por la mañana aparece una enfermera, otra por la tarde y al día siguiente también cambia, la relación personal con el paciente se ha roto".
Una llamada de atención
A la elevada rotación del personal se le suma que "el perfil del paciente ha cambiado y es más complejo", como advierte el Ignacio Vallejo, gerente del Hospital de Valme de Sevilla. Este cambio no sólo requiere "una atención más multidisciplinar", sino también "una vías de comunicación que sean estables". Con este escenario, cree que si se cambia de personal, tanto enfermeras como médicos pueden no estar lo suficientemente pendientes de los pacientes.
Los profesionales consultados por este periódico convienen que la rotación —y, en consecuencia, el mayor riesgo de mortalidad— con mejoras laborales, retención de talento y priorizando en la inversión de personal. En definitiva, "si nos cuidas, eso facilita que podamos cuidar mejor a los pacientes".
"A veces se confunde que la satisfacción de los profesionales es porque queremos vivir mejor", indica Rocha. "Y lo que queremos es trabajar bien para poder garantizar una mejor prestación de servicios". Para Vallejo, la conclusión del citado estudio no deja de ser "una llamada de atención para los que tienen cargos de responsabilidad en la gestión sanitaria".