En la era digital, la alimentación de la juventud está siendo manipulada por influencers que utilizan técnicas de marketing brillantes pero peligrosas. Así lo afirma Almudena Villegas, escritora y experta en Historia de la Alimentación, quien advierte de las consecuencias negativas de seguir pautas alimenticias erróneas promovidas en las redes sociales.

En una entrevista con EFE, Villegas expone que muchas de las tendencias alimenticias populares entre los jóvenes, como el vegetarianismo o el veganismo, se presentan más como modas que como opciones nutricionalmente equilibradas. Ser vegetariano o vegano es "una opción que respeto", señala, pero puede dañar la salud si no se gestiona adecuadamente. Según la experta, estas dietas pueden llevar a deficiencias de hierro y vitamina B, lo que aumenta la dependencia de suplementos farmacológicos, beneficiando a la industria farmacéutica.

Villegas profundiza en este tema en su libro ‘La amenaza de la alimentación’ (Almuzara), donde critica las prácticas alimentarias modernas que considera perjudiciales y aboga por un retorno a las raíces culinarias. La experta sostiene que nuestra capacidad de consumir carne, un alimento que ha sido crucial para el desarrollo humano desde el Paleolítico, está siendo rechazada voluntaria pero inconscientemente, lo que podría afectar nuestra salud y vigor.

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En su obra, Villegas también alerta sobre el impacto negativo de la tecnología y la biotecnología en nuestras dietas. Insiste en la necesidad de reconectar con la sabiduría culinaria ancestral y de recuperar el tiempo compartido en torno a la mesa, elementos clave para una alimentación saludable y consciente.

Un fenómeno preocupante es la "gastrificación", un proceso en el que los alimentos ultraprocesados tienen el mismo sabor en cualquier parte del mundo, despojando a la cocina autóctona de su personalidad y autenticidad. Esta estandarización de sabores no solo afecta la identidad culinaria de las regiones, sino que también priva a los niños de experiencias culinarias significativas, como las recetas tradicionales de sus abuelas.

Villegas enfatiza que hemos llegado a un punto donde comer se ha convertido en un problema debido a la comodidad. En lugar de cocinar platos saludables, muchas personas optan por consumir comida rápida y ver programas de cocina en la televisión. Para revertir esta tendencia, la experta sugiere aprovechar la tecnología para facilitar una alimentación basada en la dieta mediterránea, reconocida por su equilibrio y beneficios para la salud.

Finalmente, Villegas hace un llamado a la reflexión y a la acción: es necesario rebelarse contra un sistema alimentario que nos está aplastando y que nos aleja de una dieta sana y tradicional. La clave, según ella, es educar desde el buen conocimiento y fomentar patrones de alimentación que han demostrado ser beneficiosos a lo largo del tiempo.

Con su análisis crítico, Almudena Villegas invita a los lectores a cuestionar las modas alimentarias promovidas por influencers y a redescubrir el valor de una dieta basada en nuestras raíces culturales y en la sabiduría de generaciones pasadas.