Este es el consejo de Gordon Ramsay que más me ayuda cuando me toca preparar la cena de Nochebuena
- Tener esto en cuenta reduce el estrés y aumenta la satisfacción.
- Más información: Cómo calcular la cantidad de comida que necesitas cuando tienes invitados
Organizar una comida o una cena en casa es siempre una responsabilidad para el que cocina, una responsabilidad que (casi) siempre es bien recibida y, en muchos casos, muy disfrutada por aquellos a los que nos apasiona cocinar para los demás, para los que pasar tiempo en la cocina no es sacrificio, sino una forma más de expresar amor a nuestras personas favoritas.
Personalmente, me gusta planificarlo todo con antelación como si de un proyecto laboral se tratase, defino el menú, hago listas de lo que tengo que comprar para cada plato y ordeno los ingredientes por establecimientos, me preparo un cronograma en el que incluyo todas las tareas que tengo que hacer, desde las compras hasta que sirvo los platos en la mesa, para organizarme los tiempos y optimizar mis recursos. Todo esto me ayuda a ser eficiente y a no tener que pensar cuando me pongo manos a la obra, simplemente me dedico a ejecutar las tareas con la tranquilidad de que no tengo que preocuparme de cosas como que tenga que hornear un bizcocho y me vaya a encontrar con el horno ocupado con el asado, o que el bizcocho no esté suficientemente frío cuando me tenga que poner a rellenarlo.
Ahora bien, mentiría si dijese que siempre cumplo con el plan a rajatabla. Muchas veces me vengo arriba y, en el último momento, se me ocurren más cosas que podría hacer. Veo que me queda un pequeño hueco en mi organizadísimo plan y pienso que igual a alguien le puede apetecer otra cosa y, si tengo ingredientes a mano, me pongo a preparar más cosas, que si una crema de verduras por si alguien viene un poco destemplado y le apetece algo calentito. que si algún aperitivo para que haya más donde elegir, porque los aperitivos nunca son suficientes. En definitiva, querría que mi casa se convirtiese en un restaurante de lujo del que todos mis invitados salieran encantadísimos, pero se me olvida que, a veces, el precio a pagar es caerme de sueño antes incluso de acabar la cena de puro agotamiento.
El brillante consejo de un profesional para organizar una cena con invitados
Hace unos cuantos años, un amigo me regaló Cocina conmigo (Grijalbo, 2013), un libro de recetas del chef Gordon Ramsay. En este volumen, el cocinero británico dedica un capítulo entero a presentar recetas para compartir y, en la introducción a éste, señala algo que a mí me resultó revelador.
El error que cometemos cuando organizamos una comida en casa es no tener en cuenta el contexto, no podemos cocinar y servir platos como si fuéramos un restaurante, porque ni nuestra cocina, por muy equipada que esté, tiene todos los medios técnicos que una cocina profesional ni disponemos del equipo humano con el que cuenta un buen restaurante. En nuestra cocina solo están nuestras dos manos y, para organizar un evento de este tipo, vamos a tener que ser los proveedores que traigan los ingredientes, el chef, el jefe de todas las partidas, el friegaplatos, el jefe de sala, el sumiller...
Ser conscientes de que en casa no podemos trabajar como en una cocina profesional, es un gran paso a la hora de organizarse. Para que la cena sea un éxito no es necesario complicarse la vida, que no tiene por qué gustar menos un aperitivo hecho con 3 ingredientes que no necesitan cocción que otro que lleva 18 ingredientes extraños y necesita de siete elaboraciones. Ser conscientes de que también deberíamos disfrutar de la cena que hemos preparado sin estar extenuados.
A mí esto me ha ayudado a elegir mejor los menús y a organizar mejor los tiempos, a priorizar platos que se pueden adelantar y que solo tengo que calentar en el último momento, a no temerle a los asados ni a las cocciones largas a fuego lento, porque apenas requieren de mi atención y, mientras se hacen, puedo dedicarme a otras partes del menú. En definitiva, se trata de cocinar para disfrutar del proceso y del resultado, no para competir con un restaurante.
Ejemplo práctico: un menú sencillo por menos de 5 euros la ración
Para ilustrar todo lo que os estoy contando, os mostraré un ejemplo práctico, un menú sencillo, económico, equilibrado y fácil de hacer, compuesto por un entrante (mejillones picantes en salsa cremosa de tomate), un plato principal (pollo asado con patatas Pont Neuf) y un postre (flan de turrón).
Comprar los ingredientes
Todo comienza repasando la lista de ingredientes necesarios para preparar cada uno de los platos y marcando qué ingredientes tenemos ya en casa y cuáles necesitamos comprar. Ayudará también hacer listas por establecimientos para saber qué tenemos que comprar en cada sitio. Para todas estas cosas Excel, Google Sheets, Google Keep o cualquier aplicación que permita gestionar listas será muy útil, pero un trozo de papel y un boli también nos sirve.
INGREDIENTE | CANTIDAD | ¿COMPRAR? (SÍ/NO) |
Mejillones picantes en salsa de tomate cremosa (entrante) | ||
Mejillones frescos | 1 kg | |
Tomates maduros | 500 g | |
Cebolla | 1 ud | |
Ajo | 2 dientes | |
Guindilla | 1 ud (o más según gusto) | |
Aceite de oliva | 30 ml | |
Nata para cocinar | 100 ml | |
Sal | al gusto | |
Pimienta negra | al gusto | |
Perejil fresco | 10 g | |
Pollo asado con patatas Pont Neuf (plato principal) | ||
Pollo entero limpio | 1 unidad (aprox. 1.5-2 kg) | |
Patatas grandes | 4 ud | |
Ajo | 2 dientes | |
Limón | 1 unidad | |
Romero fresco | 10 g | |
Tomillo fresco | 10 g | |
Mantequilla | 50 g | |
Aceite de oliva | 50 ml + cantidad necesaria para freír las patatas | |
Sal | al gusto | |
Pimienta negra | al gusto | |
Flan de turrón (postre) | ||
Turrón de Jijona | 300 g | |
Leche entera | 500 ml | |
Nata para montar | 200 ml | |
Huevos | 4 ud | |
Azúcar | 100 g | |
Caramelo líquido | 50 ml |
Cómo gestionar el tiempo
Vamos a ver cómo nos podríamos organizar si queremos servir nuestra cena el martes a las 9 de la noche. Para ello, lo primero que haremos será hacer una estimación realista del tiempo que necesitamos para realizar cada tarea teniendo en cuenta nuestras circunstancias. No todos somos igual de rápidos troceando ingredientes ni tenemos la misma olla superrápida ni nos queda el súper a la misma distancia.
Para este caso concreto, en el que se necesitan pocos ingredientes y todos ellos se pueden conseguir en cualquier supermercado, vamos a asignarle a la tarea de comprar ingredientes una duración de 2 horas, porque siempre va a salir todo mejor si dejamos cierta holgura a la hora de estimar la duración de cada una de las tareas.
Incluso en un menú tan sencillo como este, hay que tener en cuenta que hay elementos que deben hacerse con suficiente antelación y elaboraciones que no se pueden preparar de forma simultánea. El flan debe hacerse con la suficiente antelación para que esté frío a la hora de servirlo y, para su cocción, se necesita utilizar el horno, por lo que no podremos preparlo a la vez que el pollo.
Es decir, para preparar el flan, apenas tendremos que invertir unos minutos que serán los que tardemos en mezclar todos los ingredientes, pero serán necesarias varias horas para que esté listo para servir. Teniendo claro esto, veamos cómo nos podríamos organizar.
Tareas a realizar el lunes
Tarea 1. Comprar todos los ingredientes que no tengamos ya en casa o sacar del congelador aquellos que vayamos a necesitar para completar las tareas del martes.
Tarea 2. Preparación del flan de turrón.
Preparación del flan de turrón (Hora de inicio: 18:00 h)
Paso 1. Trituramos el turrón hasta obtener una crema de textura homogénea.
Paso 2. En un cazo, calentamos la leche y la nata a fuego medio. Agregamos el turrón triturado, removiendo hasta que se obtener una mezcla homogénea.
Paso 3. En un bol, batimos los huevos con el azúcar. Añadimos la mezcla caliente poco a poco sin dejar de remover para que no se nos cuaje el huevo.
Paso 4. Vertemos la mezcla en moldes caramelizados. los cubrimos con papel de aluminio y los cocinamos al baño María en el horno, precalentado a 160 °C, durante 45 minutos.
Paso 5. Enfriamos a temperatura ambiente, tapamos las flaneras con papel film y dejamos en la nevera hasta el momento de servir.
Tareas a realizar el martes
Tarea 1. Preparación del pollo asado.
Tarea 2. Confitar las patatas Pont Neuf.
Tarea 3. Preparación de los mejillones picantes con salsa cremosa de tomate.
Tarea 4. Poner la mesa y servir el menú.
Preparación de pollo asado (Hora de inicio: 18:00 h)
Paso 1. Precalentamos el horno a 180 °C.
Paso 2. Lavamos y secamos el pollo. Lo sazonamos con sal, pimienta, romero, tomillo y rellenamos con el limón partido por la mitad y los dientes de ajo. Untamos la piel del pollo con mantequilla en pomada dándole un masaje para que se reparta uniformemente.
Paso 3. Colocamos el pollo con las pechugas hacia arriba en una fuente de horno untada con un poco de aceite de oliva. Es importante que la fuente no sea mucho más grande que el pollo para que los jugos no se desparramen y se evaporen con el calor del horno.
Paso 4. Horneamos entre 60 y 90 minutos, regando ocasionalmente con los jugos de la bandeja. El tiempo total va a depender del tamaño del pollo y de nuestro horno.
Paso 5. Una vez listo el pollo, lo sacaremos del horno y lo taparemos con papel de aluminio.
Confitar las patatas Pont Neuf (Hora de inicio: 18:45 h)
Mientras se está asando el pollo:
Paso 1. Pelamos las patatas y las cortamos en bastones gruesos (estilo Pont Neuf).
Paso 2. Confitamos las patatas en aceite de oliva hasta que estén tiernas. Escurrimos y reservamos.
Preparación de los mejillones picantes con salsa cremosa de tomate (Hora de inicio: 19:45 h)
Paso 1. Limpiamos bien los mejillones, eliminando barbas e impurezas.
Paso 2. Picamos la cebolla, los ajos y la guindilla.
Paso 3. En una sartén grande, calentamos el aceite y sofreímos la cebolla, el ajo y la guindilla hasta que la cebolla esté tierna.
Paso 4. Añadimos los tomates rallados -sin la piel- y dejamos reducir a fuego medio durante unos 15 minutos removiendo de vez en cuando para que el tomate no se agarre.
Paso 5. Incorporamos los mejillones y cocinamos hasta que se abran. Añadimos la nata, salpimentamos y mezclamos bien y cocinamos a fuego muy lento durante un par de minutos, lo justo para que la nata coja temperatura.
Poner la mesa y servir el menú (Hora de inicio: 20:30 h)
Paso 1. Poner la mesa.
Paso 2. Servir los mejillones calientes.
Paso 3. Si fuese necesario, mientras se están comiendo los mejillones, precalentaremos el horno para darle un golpe de calor al pollo. También precalentaremos la freidora para terminar de hacer las patatas Pont Neuf, a las que daremos una fritura a 180 ºC en el cambio de platos para que se calienten y se doren por fuera.
Paso 4. Sacamos los flanes de la nevera para que se atemperen ligeramente.
Paso 5. Servimos el pollo con las patatas.
Paso 6. Desmoldamos y emplatamos flanes.
Paso 7. Servimos el postre.