La humanidad lleva más de 5 000 años elaborando cerveza y en todos estos siglos de historia, que ya son unos cuantos, la mujer ha desempeñado un papel clave en la evolución de esta bebida.
Aún así, cinco milenios después, la cerveza se sigue considerando una bebida de hombres o para hombres. Algo que no se ajusta en absoluto a la realidad y que la fábrica de Cervezas Ambar ha intentado plasmar en el estudio “Mujeres cerveceras: desmontando mitos y leyendas” cuyo informe acaba de presentar.
Mujeres y cervezas, 5000 años alimentando mitos
Ambar ha impulsado un estudio para analizar el consumo de cerveza por parte de las mujeres, basado en los resultados obtenidos de una encuesta realizada siguiendo la metodología Mobile Only de la empresa de investigación Zinklar en la que han participado un total de 300 mujeres de entre 20 y 50 años en España y en la que se han puesto de manifiesto algunos tópicos que resultan cuanto menos curiosos.
“En Ambar creemos y elaboramos cerveza como bebida paritaria. Una actitud que sin duda ha salido demostrada y respaldada con este estudio” explica Enrique Torguet, director de comunicación de Cervezas Ambar. “Estamos contentos de que las mujeres compartan nuestra visión y lo que ello implica: demostrar que la cerveza es para todos y todas“
La cerveza no es cosas de hombres ni de mujeres
Según el estudio, para el 100 % de las mujeres la cerveza no es bebida de hombres o de mujeres; la cerveza es “cosa de ambos”. Sin embargo, a 3 de cada 4 mujeres nos han servido las bebidas al revés cuando hemos ido con un hombre y éste pide un refresco. Incluso 1 de cada 3 ha notado cómo la gente se extraña al vernos pedir una cerveza cuando vamos solas.
Según afirman las encuestadas, 8 de cada 10 mujeres probaríamos una cerveza nueva si nos la ofrecen. Y, aunque en menor medida, también cuando viajan están dispuestas a descubrir nuevas propuestas. Así lo afirman 6 de cada 10 mujeres, que se animarían a probar las cervezas locales cuando están de viaje.
Las consumidoras de cerveza, según los resultados de la encuesta, preferimos la cerveza rubia tradicional. Y no es cierto que las chicas solo bebamos claras, de hecho, propuestas como la cerveza con limón o la 0’0 solamente son las favoritas de la minoría (un 2% en el caso de la sin alcohol).
La mayoría de las mujeres bebemos cerveza porque nos gusta su sabor (56 %) o porque nos resulta más apetecible que otras bebidas (34 %). Y cuando la bebemos, la disfrutamos incluso tomándola directamente de la botella (45 %). Aunque lo ideal es consumir la cerveza en el vaso más adecuado según el tipo de cerveza, solamente el 18 % la consume siempre servida en copa.
En cuanto al momento de consumo, el 46 % la prefiere por la tarde, de «terraceo», mientras que al 26 % le gusta tomarla como aperitivo.
Así que, como veis, la cerveza es tan unisex como el agua.