Pocas cosas hay mejores en la vida que saber tu camino. David Muñoz ha sabido defender a capa y espada su propuesta en Londres. Llegó a romper moldes y los esquemas del barrio de Mayfair, abriendo la segunda sede de su restaurante de cocina callejera, StreetXO. Hasta una pequeña calle, Old Burlington Street, nos dirigimos para ver qué se cuece por allí. ¿Comer con las manos? Sí. ¿Cenar con cócteles? También. ¿Disfrutar de la algarabía que les caracteriza? Por supuesto. ¿Viajar con el paladar? Oh, yes!

Ficha y datos de StreetXO Londres

• StreetXO es el restaurante de cocina callejera de Dabiz Muñoz, que primero abrió en Madrid, para más tarde hacerlo en el londinense barrio de Mayfair. El restaurante se completa con Circus XO, un espacio dedicado a la coctelería creativa.
• Lo mejor: El ramen de foie y gallina de Guinea.
• Dirección: 15 Old Burlington Street. Mayfair. Londres
• Horario: M y X de 12:00 a 15:00 horas y de 18:00 a 23:00 horas. J y V de 12:00 a 15:00 horas y de 18:00 a 0:00 horas. S de 13:00 a 15:30 horas y de 18:00 a 0:00 horas. D de 13:00 a 15:30 horas y de 18:00 a 21:30 horas. L de 18:00 a 23:00 horas.
• Precio: Precio medio con comida y cócteles 90 libras.
• Reservas: Aceptan reservas en el +44 (0)020 3096 7555 y en su web www.streetxo.com/london
• Nota: 5/5

Triunfar en la capital británica no ha sido fácil. Quizás por falta de entendimiento del proyecto, pero, ¿cómo en una de las capitales del mundo no entienden un restaurante así? Lo que tenemos claro es que ahora, con el rodaje necesario y el paso del tiempo, StreetXO Londres triunfa. Y vaya si lo hace.

Circus XO, las reglas del chef, el alma del barman

Las 9 de la noche y el restaurante está hasta la bandera. Se accede por la planta de la calle, en la que cuentan con un recepción. La magia se esconde en el piso -1. Allí nos dan paso a Circus XO, un proyecto dentro de otro. ¿Su lema? ‘Las reglas del chef, el alma del barman’, y es que aquí han habilitado un espacio de coctelería, bien para tomar algo mientras esperas a que tu mesa esté lista, bien para picar algo de su carta allí mismo. Podríamos decir que en esta parte, asistimos a lo que es la ‘cocina líquida’ del mundo XO. Sin embargo, si esperas encontrar cócteles reconocibles, te aseguro que aquí no lo harás.

Más que beber, vas a comerte los cócteles con creaciones como ‘The USA Smoker’ a base de ron ahumado y ‘no coke’ -una mezcla de chocolate, chile chipotle, arándanos y cien especias-, todo ello coronado con una loncha de bacon barbacoa o ‘Tokyo-Jerez’ un trago con sashimi de gamba de Motril, soda de té ahumado lapsang, sisho, miso, yuzu y Palo Cortado. También disponen de cócteles eternos bajo demanda.

Un menú para el recuerdo en StreetXO Londres

Un camarero nos avisa de que nuestros sitios en la barra están listos. El tan logrado interiorismo que corrió a cargo de Lázaro Rosa Violán, nos hace figurarnos que estamos en cualquier calle de Bangkok o Singapur mientras vemos el revoloteo de cocineros y camareros por toda la sala. Si vais dos personas, pedid que os sienten en barra. Es la mejor forma de disfrutar de primera mano de todo lo que ocurre en las cocinas, que, al igual que en el StreetXO de Madrid, están a la vista de todos.

Mientras apuramos dos copas de champagne, echamos un vistazo a la carta. ¡Hay tantos platos sugerentes! Además aquí han incorporado la posibilidad de pedir menú degustación, menú para vegetarianos y menús de mediodía. Decidimos probar cosas que no conocíamos y que con el mero hecho de leer los ingredientes, se nos antojan más que deliciosas. Algunos platos como el célebre Club Sándwich XO o la lasagna coreana, han viajado desde Madrid, por lo que si nunca has estado en la casa madre, aquí también tendrás ocasión de probarlos. La carta viene con una introducción que nos invita a adentrarnos en el mundo XO, un mundo lleno de sabores, olores, colores y aventura. Y sabemos que lo que prometen va a ser real. ¡Empezamos!

Los primero, las croquetas de la Pedroche versión Londres. Aquí son de kimchi coreano y leche de oveja, presentadas como un nigiri de salmón salvaje, que queman por encima para darle un sabor ahumado. Lo terminan con huevas de trucha y polvo de té chino. Para comerlas de un bocado. ¡Boom! Primera explosión de sabor en la boca. Como dice David, cada uno de sus platos es una fiesta en la boca. Los sabores son casi adictivos. Queremos más y más.

¡Ah! Este es el momento en que tienes que pedir pan. Pero no el pan al que estás acostumbrado, sino un brioche Singapur que fríen y al que luego espolvorean mantequilla en polvo por encima. Seguimos. Para combatir las bajas temperaturas londinenses, lo hacemos con un Ramen de foie-gras y gallina de Guinea. El caldo lo preparan con huesos jamón y lo terminan añadiendo foie, una yema de huevo, las alitas de gallina de Guinea, trompetas de los muertos, cilantro y cebollino chino. Tanto el foie, como el caldo reducido, aportan melosidad al ramen. Impecable. Se coloca rápidamente a la cabeza de nuestros favoritos.

Al grito de la comanda que discurre por la cocina, llega el siguiente plato. Un Pad Thai. Pero claro, siendo David Muñoz el creador, éste no iba a ser como los demás. En este caso sustituyen los clásicos noodles por setas enoki, que disponen imitando al noodle. Se saltea al wok con salsa de ostras, chiles dulces, lima, cacahuete y cebolla fina. Todo ello sin olvidar una ‘piel’ de tortilla que sirve de base al plato. Por encima se termina con gambas rojas baby y alioli verde. Para comerlo, ponemos la lima sobre el Pad Thai, hacemos un envoltini con la tortilla, lo partimos y a disfrutar.

El último plato de la parte salada, es uno de reciente creación: un lenguado de playa, cocinado a la mantequilla tostada con una emulsión del propio aceite del pescado y oloroso, noodles de Taiwan, aceite de sésamo, hojas de curry y cebollino. Vienen dos filetes del pescado con una textura cremosa, que preparan con una velouté emulsionada con los jugos del pescado y chile chipotle. En el centro del plato encontramos los noodles aliñados con pimienta sansho, lo que aporta notas cítricas y de regaliz. Nos sentimos tentados por otros muchos platos, pero pensamos que por hoy es suficiente.

Rematamos la jugada con uno de los postres, todos ellos de creación propia y a base de helado. Pedimos la Guava Cheesecake, que curiosamente viene en una cajita de helado con palomitas caramelizadas, crema de limoncello y galletas sablé de mantequilla. Fin del ágape.

Y qué deciros, StreetXO Londres vale la pena, y mucho. La próxima vez que vayas a Londres, ¡reserva!