¿Quién necesita terraza teniendo una de las vistas más representativas de Madrid? Este verano el Hotel Barceló de Plaza de España propone en su restaurante Somos una carta renovada en la que las recetas más castizas se combinan con elaboraciones originales, veraniegas y exclusivas para disfrutar de lo mejor de la capital con una panorámica sin igual: la emblemática calle Gran Vía.
La oferta se completa con Garra Bar que, bajo su espectacular expositor de bebidas y su techo espejado, pueden degustarse desde un picoteo casual hasta el afterwork más exclusivo. La propuesta engloba recetas típicas de tabernas madrileñas, siempre con un punto de frescura, diversión y chulería. Para acompañar, un vermú, su gran selección de cervezas y vinos madrileños, o un cóctel con el que descubrir el lado más cosmopolita e internacional de la capital.
Ficha y detalles de Somos Garra Bar
- Somos Restaurant y Garra Bar acaban de presentar su propuesta gastronómica castiza en la que destacan, ahora, sus recetas estivales. La coctelería con vermú también es protagonista para los aperitivos urbanos más sofisticados, dejando las propuestas más clásicas para los afterwoks o “la primera” de la noche madrileña.
- Lo mejor: el salmorejo de cigalas con picadillo de huevo y jamón ibérico en Somos, y los cócteles en Garra Bar con sus croquetas ibéricas y chulapas.
- Dirección: Torre de Madrid, Hotel Barceló. Plaza de España, 18, 28008 Madrid
- Horario Somos: 13:00h a 16:00h y 19:00h a 23:00h.
- Horario Garra Bar: 11:30h a 00:00h. Jueves, viernes y sábados hasta la 01:00h.
- Reservas: En la web somosgarra.es.
- Precio medio Somos: 35 euros. Menús ejecutivos: 22 y 29 euros.
- Precio medio Garra: 15 euros.
- Nota: 4/5
Somos Garra, distintos y complementarios
La oferta de Somos se completa con Garra Bar, el rincón más informal del Hotel Barceló, creando el binomio Somos Garra, que complementa la formalidad del restaurante superior con el ambiente más distendido del bar.
Restaurante Somos, propuesta gastronómica castiza y las mejores vistas de Madrid
Sentarse a la mesa frente a una cristalera desde la que puede admirarse la emblemática Gran Vía es una experiencia que el restaurante Somos, ubicado en el Hotel Barceló, ha completado con una propuesta más refrescante y ligera, perfecta para el verano. Su nueva carta propone estivales platos de la gastronomía nacional para continuar dando protagonismo a la capital.
Aprovechar las noches más largas del año o resguardarse del calor a mediodía se convierte en una experiencia deliciosa mientras se contempla el bullicio y ajetreo de la calle más visitada de Madrid, imperdible para turistas y viajeros, pero también para residentes que quieran disfrutar de su ciudad.
Sabores sorprendentes, platos para compartir y picar, recetas sabrosas que nos recuerdan nuestras raíces y se elaboran con el mejor producto nacional… La oferta gastronómica es tan atractiva como original ya que siempre propone un toque vanguardista que le aporta modernidad y frescura a las propuestas. Todo ello se le suma a un espacio abierto a uno de los escenarios más cosmopolitas de la capital, con una impresionante cristalera, todo diseñado y decorado por Jaime Hayon. Para visitas más especiales, el reservado salón 650 cuenta con capacidad para 10 comensales y permite admirar los 650 primeros metros de la Gran Vía, concretamente hasta la Plaza de Callao.
Al mando de los fogones encontramos al chef Rubén Vázquez, quien ha ideado una serie de platos idóneos para hacer frente a las altas temperaturas desde las alturas del restaurante o desde las mesitas informales del bar. Ensaladilla madrileña con verdura y bonito en taquitos; salmorejo con cigalas y picadillo de huevo y jamón ibérico; buñuelos de bacalao con alioli de tinta de calamar; tartar de ternera de Guadarrama con flor de alcaparras; sepia a la plancha con su aliño; o el huevo a baja temperatura con espárragos verdes de Aranjuez y mayonesa de trufa, son algunos de los irresistibles entrantes que encontramos en la nueva propuesta de Somos.
Entre los principales, los pescados y las carnes son protagonistas, pero en Somos también hay un rincón para los platos de cuchara, como las imprescindibles verdinas estofadas con rape a baja temperatura y crujiente de morcilla, que también en verano son una delicia. Lomo de besugo al horno con su guarnición, bacalao sobre tomate y mango, lubina con puré de celerí…
Y entre las carnes, la ternera, siempre de Guadarrama, la encontramos en el entrecot y el solomillo. Para los amantes del ibérico, el secreto se sirve de 5 Jotas y acompañado cremoso de boniato; y, como el plato más castizo está el rabo de toro en conchiglie con setas en su jugo.
Y de postre, Somos vuelve a hacer homenaje a la ciudad con delicias como “De Madrid al Cielo”, unas rosquillas sobre crema de madroños y helado de violeta. El bizcocho de la abuela con helado de limón es perfecto para los gastrónomos más nostálgicos; el “Todo Chocolate”, para los amantes de este goloso producto; y las texturas de fruta de temporada con nube de pistacho y helado de yuzu, se convierte en la propuesta más ligera y refrescante. Todos ellos los firma la maestra repostera Sandra Villazón. Para los menos dulceros, el surtido de quesos de aquí y de afuera acompañados de mermeladas es la opción ideal para rematar la visita.
Picoteo y cócteles de autor en Garra Bar
Con un espectacular expositor de bebidas que presume de ser el más alto de la ciudad y su techo espejado Garra nos da la bienvenida. Un picoteo castizo y casual nos espera en una carta que se basa en las típicas recetas de taberna de siempre con un punto de frescura, diversión y chulería.
Entre las opciones para compartir más demandadas por las visitas están las croquetas ibéricas y chulapas, de jamón y bacalao; los boquerones en vinagre sobre patatas fritas con pimentón; las mini hamburguesas con queso de cabra de Guadarrama; el pincho de tortilla con garra; o la ensalada César castiza con pollo en escabeche.
Más originales encontramos el sándwich vegetal Aranjuez; los soldaditos de Pavía, una versión propia del típico fish & chip inglés; o los barquillos de salmón, guacamole y lima.
Pero en Garra el protagonismo se lo lleva su carta líquida, como en cualquier buen bar que se precie. Su selección de cervezas y buenos vinos, con etiquetas madrileñas, es perfecta para continuar este homenaje a la capital y degustar acompañando algunas de las delicias informales de su carta. La hora del vermú (siempre de la región) y la coctelería de autor no faltan. Afterworks de lo más animados, visitas distendidas o simplemente disfrutar de un buen combinado en cualquier momento del día se hace posible en Garra Bar.
La mano “experta” para realizar estos combinados es la de Andrei Gherman, quien agita propuestas como el Mint Julep o el Clover Club. La visita se ameniza algunos fines de semana con una programación de sesiones de música con varios de los DJs más demandados del momento. Una manera de darle vida al Hotel Barceló, abrir Madrid a visitas y paladares, tanto extranjeros como residentes, y mostrar lo mejor, tanto en la mesa como a través de los cristales, que la capital puede ofrecernos. Una visita obligada para todo el que ame nuestra ciudad y su gastronomía.