Cuidadito con los mensajes que mandáis, amigos. El novio de Edurne y su compañero de profesión, Iker Muniain, han sido los últimos en caer. Aunque no los primeros. Pensároslo dos veces antes de darle a enviar.
David De Gea:
A sus 25 años, el futbolista parece no saber que el número de teléfono no se le da a todo el mundo. Menos todavía a chicas que trabajan para un señor que tiene montado un negocio de pornografía. Analicemos los hechos. Un hotel, chicas guapas que quieren ligar contigo, que son amigas de Torbe, eres un famoso jugador de fútbol que además tiene novia… ¿Cuántas probabilidades hay de que algo salga mal?
Sí, amigo De Gea. La has liado parda. Menos mal que tu chica ya sabe lo que es sufrir después de haber representado a España en el festival de Eurovisión. Edurne, no te rasgues las vestiduras. Vuestro amor podrá superar este pequeño bache. O no.
Iker Muniain:
El otro implicado en el caso del hotel, las chicas de Torbe y De Gea. Sin duda, el amigo que toda mujer de este planeta desea para su novio. Ese que no sabe decirle que no está bien dar teléfonos a féminas guapas y sexys. Ese. Y lo peor es que él es consciente de que tú le odias.
En este caso, Iker escurrió el bulto y le pasó el marrón a De Gea. ¡Viva la amistad!
David Beckham
Traducción de la conversación: David: Si estás un poco excitada, pásate por aquí. Rebecca: ¿Por dónde? David: ¿Por el hotel? Rebecca: ¿Cuál? David: El mismo de la última vez, pero hoy había un montón de prensa, así que a lo mejor no es buena idea. Quizá la próxima vez.
Liarse con la niñera no es solo cosa de Jude Law. (Un besi Jude). El futbolista inglés se 'tropezó' varias veces con Rebecca Loos, la que fuera asistente de su mujer, Victoria, y nanny de sus hijos. La liebre saltó (un saludo para los compis de Jara y Sedal) cuando Rebeca, que es más lista que las pesetas, vendió los mensajes de texto que se mandaba con David. ¡La Virgen de Guadalupe! ¡Qué vocabulario! ¡Qué guarrindongadas se ponían! (y nunca mejor dicho lo de ponían). Lo más light que salía de la boca de David era esto:
Después, un festival de "me estoy tocando no sé dónde", "tengo ganas de hacerte el salto de la rana", "estoy más caliente que el palo un churrero" y un montón de frases más, pero en inglés, que siempre queda más fino, se sucedieron. A favor de David debemos decir que en aquella época no había Whatsapp y cada mensaje costaba sus 15 céntimos y los multimedia con fotografía (los que interesan, vaya) su eurito. Habiendo dinero…
"El Chapo" Guzmán:
Uno de los narcotraficantes más poderosos y peligrosos del mundo fue capturado por el intercambio de mensajes telefónicos con la modelo y actriz Kate del Castillo. El cortejo digital de “El Chapo” le llevó a ser encontrado. Permítame el lector que me guarde los chascarrillos en este momento no vaya ser que el señor Chapo me lea y me envíe un regalito.
Doña Letizia:
Ni la realeza se libra de las desgracias digitales. Fue la actual reina de España la que vio como un mensaje privado de Whatsapp a su amigo Javier López Madrid daba la vuelta al mundo. Letizia también tuvo que soportar el 'cachondeito' de que se filtrara el cariñoso apodo que le tenía a su colega: "compi yogui". Enternecedor y humillante a partes iguales. La próxima vez que le escribas un Whatsapp a tu amigo del alma ahórrate el momento "te súper adoro, trisqui winky".
Por cierto, la reina no se refería a este yogui
Sino a este
Toda España descubrió así que López Madrid hacía yoga. Inquietante.
Selena Gómez
Traducción de la conversación. Justin: Tú eres todo lo que necesito ahora mismo. Sé que puedo hacerlo bien esta vez. Selena: Tú eres un adicto a las drogas. Necesitas ayuda. Justin: Venga, no me digas que no echas esto de menos.
Y he aquí la versatilidad del periodismo. Dos líneas antes hablábamos de la realeza y ahora de un ídolo de adolescentes convertida en cantante sexy. Maravillas de la profesión. Melancolías aparte, una filtración de sus conversaciones de Whatsapp con su exnovio Justin Bieber nos confirmó lo que era un secreto a voces. El intérprete tenía problemas con las drogas. Así pues, Selena no tuvo más remedio que cantarle aquello de "vete, olvida mi nombre, mi cara, mi casa y pega la vuelta". Y por lo que más queráis, fijaos bien en el bigotillo pre-Comunión de Justin en el siguiente gif. Mítico.
¿Moraleja? No tengo tiempo de contárosla que tengo que contestar un Whatsapp.