Iñaki Urdangarin cumple años el 15 de enero, el día más triste del año. En el Blue Monday dura la resaca navideña y el ánimo alicaído alcanza sus límites más altos. Así, en sintonía con el tercer lunes de enero -el más mustio de todos- va a vivir el exduque de Palma el día de su 50 cumpleaños.

Es, quizás, el último cumpleaños que podrá celebrar en libertad. El aniversario, que debería festejar con la familia completa y por todo lo alto, llega meses antes de que el Tribunal Supremo se pronuncie sobre el recurso que interpuso el marido de la infanta Cristina. Pero el horizonte se vislumbra pesimista, la Fiscalía solicita aumentar la pena de seis a diez años de cárcel.

El exjugador de balonmano vive uno de los momentos de mayor incertidumbre desde que se hizo pública la sentencia del caso Nóos. Desde Ginebra espera y vive su cumpleaños lejos del país en el que dejó una trama de corrupción y fraude.

Navidades lejos de la Casa Real

Aunque se enfrenta a una pena de prisión, que ha recurrido, vive en el país suizo con la hija del rey Juan Carlos I (80) y sus hijos. En 2013, ella se mudó junto a sus hijos huyendo del lío judicial, en el que ella también estuvo imputada y del que ya le han absuelto.

Como su cumpleaños, las navidades también fueron las más tristes para la pareja. Los Urdangarin-Borbón pasaron las fiestas de pascua en Vitoria, sabiendo que esta primavera se sabrá la última palabra del Tribuna Supremo. En la capital vasca reside Claire Liebaert, la madre de él, que ha sido su gran apoyo en los años de investigaciones, juicios y sentencias.

Tras la proclamación de Felipe VI (49) como rey, su hermana no ha pasado ninguna Navidad en la Casa Real. Viven resguardados , junto a sus cuatro hijos, residen en Ginebra, alejados de las consecuencias del caso Nóos. Acercándose a una vida llana, pero sin alejarse de los privilegios que vienen dados por la cuna, intentando no recrearse en una vida llena de juicios y repercusión.

Ajenos a la Casa Real, la familia disfrutó de unos días de vacaciones en Roma. Decidieron pasar un tiempo de descanso en la capital italiana justo la semana del cumpleaños del rey emérito. El 5 de enero Juan Carlos celebraba sus ochenta años ajeno a su hija y su yerno. Los 

La infanta Cristina vive junto a su marido los que podrían ser los últimos meses de libertad de Iñaki Urdangarin. Refugiados en su familia pasarán la celebración del 50 cumpleaños del exjugador de balonmano. 

La caída de un duque

Tras años de paseos por los juzgados, testimonios e imputaciones, el imperio de un yerno modelo cayó en un pozo sin fondo. El rey emérito se retiró y se puso a un lado del problema. Al otro lado, su hija y su marido. 

"La justicia es igual para todos", dijo el todavía rey Juan Carlos, se refería a Iñaki Urdangarin. Y así, mantenía, el todavía rey, una defensa de la justicia que se podía entender en contra de su yerno. 

En el primer discurso de Navidad de Felipe VI pasaba a pies puntillas por encima de la corrupción y depositaba su confianza en los funcionarios públicos. El que había sido íntimo de Iñaki Urdangarín, ya no lo es más. En numerosas ocasiones se les veía juntos, con él y con su hermana, pero desde que se destapó el caso Nóos, no volvió a aparecer con él en público. La última vez que estuvieron juntos en un acto fue tenso para ambos. Ninguno de los dos pudo evitarlo, fue en una fiesta organizada por los primos del rey. 

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