En una casa palacio de 1.200 metros cuadrados con tres plantas, en el corazón de Madrid, es donde la famosa librería La Central tiene su sede. Es uno de los lugares preferidos para perderse de la reina Letizia (45 años). La monarca visita este templo de libros de manera asidua. Lo hace sola, sin llamar la atención y 'camuflada' bajo un vestuario informal que nada tiene que ver con el de su papel de soberana.
Según ha podido saber JALEOS, la esposa de Felipe VI (50) es una compradora fiel de La Central de Callao. Las reservas de los ejemplares las hace por teléfono con un nombre ficticio, aunque después es ella misma quien acude a recoger el pedido. No hay coches oficiales, ni escoltas, ni nadie abriendo el paso de la reina en una de las vías de más bullicio de la ciudad. Al menos aparentemente. Letizia se inmiscuye entre el gentío como una más hasta llegar a la librería donde ya sus empleados la conocen. Para ellos ver a la reina deambular entre los más de 70.000 volúmenes de fondo especializado que poseen en filosofía, historia, ciencias sociales y literatura, es algo habitual.
La afición de la monarca por la lectura no es nueva. El 6 de noviembre de 2003, día del compromiso oficial del entonces príncipe de Asturias y Letizia, ella dejó claro su gusto por los libros. El obsequio que eligió para su futuro esposo en tan importante momento fue un ejemplar de El doncel de Enrique el doliente, de Mariano José de Larra, una edición antigua de 1850 que definió como "una joya literaria".
Como princesa de Asturias y como reina de España son contadas las veces que ha faltado a su cita anual con la Feria del Libro de Madrid y siempre ha sido por razones mayores. En la última edición no pudo estar presente ya que en las mismas fechas tuvo que volar a República Dominicana y Haití en una viaje de cooperación. La primera vez que debutó en las casetas del Parque del Retiro en solitario y convertida ya en reina fue en 2016. Aquí adquirió para sus hijas, la princesa Leonor (12) y la infanta Sofía (11), los libros Forasteros en el Tiempo de Barco de Vapor y El Príncipe Feliz, que pagó con un billete de 50 euros que sacó de su propio bolsillo.
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Gusto por lo culto
Sus ansias de lectura no se han desvanecido en todos estos años. Sin embargo, las preferencias literarias de Letizia van por otros derroteros ahora. De la novela romántica y caballeresca ha pasado a la novela esotérica. Según una fuente cercana a Casa Real, las últimas compras de Letizia han ido en este sentido. "Compra últimamente mucha novela esotérica y también muchos de libros de música".
Parece que a la esposa de Felipe VI siente un gran interés por las creencias ocultas y prohibidas y por conocer más allá de lo aparente. El Universo prohibido de Lynn Margaret Picknett o La iglesia y sus enigmas (ambos de la editorial Luciérnaga) son dos de las últimas novedades en esta temática. Seguro que tanto uno como otro ejemplar ya han pasado de las estanterías de la casa palacio de La Central a la librería de otro palacio, el de Zarzuela.
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