Al rey Juan Carlos (80 años) le gusta comer bien, y no es ningún secreto. Le gustaba cuando ejercía como rey, y lo hace mucho más ahora que está jubilado y tiene bastante tiempo libre. La última escapada ha tenido lugar este lunes en el exclusivo restaurante El Paraguas, situado en el barrio Salamanca (la zona más lujosa de Madrid).

El local está especializado en la elaboración de platos asturianos, en un ambiente íntimo y discreto (siempre tan favorable para Juan Carlos, que prefiere que estas veladas se queden en la más estricta intimidad). 

A la salida del restaurante Juan Carlos ha querido atender a la prensa agolpada a sus puertas. El rey emérito se ha mostrado de lo más agradable, deseando Feliz Navidad a los medios. Por su parte, estos profesionales han querido darle las gracias al monarca y le han preguntado cómo será la Navidad con su hija la infanta Cristina (53) en casa. Un asunto ante el que ha hecho gala de su mejor sonrisa para evitar comentar nada. 

Así, es relativamente habitual verle comer en algunos de los mejores restaurantes. En muchas de estas escapadas gastronómicas está acompañada de la infanta Elena (54), su hija mayor que disfruta tanto como él de este placer y de otros como la caza o la tauromaquia, y unas de las pocas personas de la Familia Real que se ha mantenido a su lado durante todos estos años (y escándalos). 

A sus 80 años sigue disfrutando de su vida de jubilado y ha quedado para comer en lo que parece todo un encuentro con amigos en el restaurante típico asturaiano. Su nuera, la reina Letizia (46) también ha visitado en alguna ocasión El Paraguas. Si lo ha hecho en el último tiempo, no ha habido constancia gráfica.

Sin embargo, sí que hemos podido verla junto a su esposo, el rey Felipe (50), en otro restaurante de los mismos propietarios, el Ten con Ten, situado en pleno barrio de Salamanca y con una carta de origen asturiano pero actualizada.

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