Este jueves los reyes, Felipe VI (53 años) y Letizia (49), han visitado la catástrofe volcánica de La Palma tras modificar su agenda institucional. Un traslado que han realizado con el objetivo de mostrar su apoyo y solidaridad a las personas que se han visto afectadas por la erupción del volcán de Cumbre Viaje, después de que la lava haya arrasado sus hogares sin remisión desde el pasado domingo. 

Decenas de personas han perdido todo lo que tenían, su techo y su medio de subsistencia, y han tenido que buscar refugio en los centros habilitados por las autoridades. Una situación límite que los monarcas han palpado en primera persona este jueves al mediodía. Ataviados con ropa informal y cómoda para recorrer la desastre, Felipe y Letizia han conocido de cerca las desgracias humanas.

Comprensivos y atentos, han escuchado atentamente la tragedia de cada uno de los palmeros con los que han tenido la oportunidad de conversar durante unos minutos. En un momento dado de la visita, el Rey ha vivido una simpática anécdota que, no cabe duda, ha aligerado por unos segundos el agónico y triste ambiente que se respira en la isla. En un punto del recorrido, Felipe se ha acercado a un habitante afectado, y con movilidad reducida.

Ante la incredulidad del palmero, que no terminaba de creer que fuera el rey de España la persona que tenía enfrente -por más que su mujer se lo asegurara-, el marido de Letizia se ha quitado por unos segundos la mascarilla para mostrar su cara al descubierto y, de ese modo, despejar las dudas del palmero. 

Felipe y Letizia han estado acompañados este jueves por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez (49), quien ha regresado a la isla tras volar directamente desde Nueva York, donde ha intervenido en la Asamblea General de Naciones Unidas. La visita de los Reyes ha comenzado este jueves al mediodía en el acuartelamiento El Fuerte, en la localidad de Breña Baja, donde han sido realojadas más de un centenar de personas.

Tras esa charla con los vecinos, los monarcas han hecho acto de presencia en la sede del Cabildo de La Palma, donde han mantenido una reunión con el comité del Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca) para conocer la evolución que pueda tener la erupción volcánica. Ahí no se va a detener su itinerario: desde Santa Cruz de la Palma se han desplazado al puesto de mando avanzado, desde donde se dirige el dispositivo de emergencia, para recabar más información sobre los daños causados y acercarse a la zona afectada por la lava. Cabe recordar que el desplazamiento de los Reyes a La Palma les ha obligado a modificar la agenda que tenían prevista para este jueves 23 de septiembre. Por su parte, Felipe ha tenido que suspender las recepciones a militares previstas, y finalmente será la reina emérita Sofía (82) quien acuda en la noche de este jueves a la inauguración de la temporada en el Teatro Real, a la que iban a asistir los Reyes.

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