La relación de Jennifer Garner (44 años) y Ben Affleck (43) ha dado un giro de 180 grados. Este verano se cumplió un año desde que los actores anunciaran su separación y su interés de divorciarse lo antes posible. Sin embargo, en julio se dio a conocer que la pareja había decidido paralizar el proceso de divorcio, lo que trajo consigo los rumores de una posible reconciliación y ahora, los portales norteamericanos se hacen eco del cuarto embarazo de la actriz.
Y es que desde que se produjo la separación Garner y Affleck no han llevado exactamente vidas aisladas, ya que siguieron compartiendo hogar por el bien de los niños aunque en habitaciones distintas. Los hollywoodienses tienen tres hijos en común, Violet (10), Seraphina (7) y Samuel (4) con los que Jennifer no ha dudado en cruzar el charco para que vieran a su padre durante el rodaje de La liga de la Justicia en Londres durante este verano. La falta de distanciamiento entre la pareja, pese a haberse separado, responde a la estrecha amistad que se consolidó durante los diez años que estuvieron casados, pero también se debe a que ambos tenían la esperanza de volver a estar juntos, según indican fuentes allegadas a los actores.
El cuarto bebé que está en camino podría ser la baza definitiva para consagrar su relación. Al parecer, Affleck está inmerso en terapias psicológicas para ayudarle a salir de sus problemas con el alcohol y dejar de lado las fiestas y las malas compañías. Además, el actor hará todo lo que esté en su mano para demostrarle a Garner que puede confiar en él, según indica US Weekly, después de que su infidelidad con la niñera de los pequeños durante la primavera de 2015 fuera "la gota que colmó el vaso" para romper el matrimonio. Sin embargo, a juzgar por las imágenes que se hacían públicas esta misma mañana, Jennifer habría dado una segunda oportunidad al actor. Las fotografías muestran a la pareja de compras por las calles de Los Ángeles muy compenetrada y en las que el actor ejerce de educado caballero llevando las bolsas y permaneciendo muy atento a sus hijos.
Ben Affleck y Jennifer Garner se conocieron en el rodaje de la película Daredevil en 2003, aunque prefirieron mantener su relación en secreto hasta un año después. Se dieron el 'sí, quiero' de forma muy privada en una playa del Caribe y con la novia embarazada de cuatro meses. Quizá esta nueva maternidad cierre al fin los capítulos de altibajos entre los actores y puedan volver a presentarse como una de las parejas más duraderas de la meca del cine.